Dormir con el perro puede parecer algo muy natural para muchos, pero también es motivo de debate entre quienes lo defienden y quienes prefieren mantener esa distancia durante la noche. Para algunos, compartir la cama con su perro es una muestra de cariño y una fuente de tranquilidad . Dicen que los hace sentir seguros, relajados e incluso acompañados emocionalmente . Además, hay quienes disfrutan de la rutina de tener a su mascota acurrucada a los pies de la cama o incluso bajo las sábanas como si fuera un miembro más de la familia.