Así cambiará el urbanismo del barrio de San Cristóbal en Lorca

El barrio lorquino de San Cristóbal, uno de los más poblados de la ciudad, se transformará con la urbanización de una gran parcela de más de 4.000 metros cuadrados de superficie, situada en la ribera del río Guadalentín, en la que se construirá una gran manzana residencial y de servicios. Se podrán levantar bloques de pisos de hasta siete alturas con 250 viviendas y bajos comerciales y está prevista la construcción de un centro de salud de atención primaria, nuevas calles y zonas ajardinadas. La reordenación de esta gran bolsa de suelo  permitirá “regenerar” el urbanismo de esa zona de la ciudad, próxima al río Guadalentín, según ha dicho la concejala de Urbanismo, María Hernández, que ha supervisado los últimos derribos junto a su homóloga de Desarrollo Local, Rosa Medina. La parcela estaba ocupada por viejas fábricas en estado ruinoso y viviendas ocupadas y las demoliciones se han ejecutado en los últimos años, conforme el consistorio llegaba a acuerdos con los propietarios. De la superficie total de la parcela 1.647 metros cuadrados serán edificables, 900 metros cuadrados se dedicarán a equipamientos y 1.390 a nuevos viales. El consistorio tiene previsto también la construcción de nuevas calles para mejorar la permeabilidad, el diseño de zonas verdes y la renovación todos los servicios de abastecimiento, saneamiento, alumbrado público, red de riego y canalizaciones para el soterramiento de las líneas de baja tensión y telecomunicaciones. Las zonas de tráfico rodado contarán con pavimento de aglomerado impreso y la zona de la plaza de pavimento de piedra natural con adoquín de granito en varios formatos y colores y se renovará el alumbrado público con nuevas luminarias de tipo led. En la misma zona el consistorio acaba de inaugurar un nuevo mercado de abastos y en octubre derribará el antiguo para construir en su lugar un bulevar que conectará la plaza del Cristo de la Sangre con la iglesia del barrio.