Descartado el foco de gripe aviar en Málaga: las aves murieron por la Enfermedad de Newcastle

Las aves del Parque de Huelin (Málaga) no murieron por gripe aviar , sino por la E nfermedad de Newcastle . Así lo ha comunicado el Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre de Andalucía (CAD), que ha informado de que el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid) ha determinado que los ejemplares recogidos en este espacio fallecieron a causa de este virus, por lo que queda descartado un posible foco de influenza aviar en la capital. En este episodio se remitieron cuatro aves, dos gaviotas patiamarilla, una tórtola turca y un ánade real, y, a la vista de los resultados, la Junta subraya que se trata de una zoonosis leve que ya ha aparecido en parques urbanos andaluces . El Ayuntamiento cerró Huelin de forma preventiva el 3 de septiembre y lo reabrirá este sábado, 13 de septiembre, manteniendo controles en estanques y humedales urbanos. El CAD ha precisado que el riesgo para la población es mínimo y se asocia a la manipulación directa de aves muertas o moribundas sin protección; los casos humanos descritos suelen limitarse a queratoconjuntivitis(inflamación en la conjuntiva y la córnea) si, tras tocar un ejemplar, la persona se frota los ojos. Las autoridades reiteran la recomendación de no tocar fauna fallecida y avisar a los servicios municipales o al 112. La ficha técnica del Ministerio de Agricultura recuerda que Newcastle es una infección vírica altamente contagiosa en aves , con presentaciones de distinta virulencia, y que les provoca síntomas respiratorios , digestivos y nerviosos. En Andalucía la situación contrasta con lo sucedido en Málaga, ya que en las últimas semanas se han confirmado hasta nueve focos activos de gripe aviar H5N1 en las provincias de Sevilla y Huelva, según los registros oficiales de la Junta de Andalucía y del sistema de alerta veterinaria RASVE. En la capital sevillana se han detectado varios episodios en distintos espacios verdes. El primero se registró en el Parque del Tamarguillo, donde la Junta confirmó la presencia del virus en aves silvestres . Pocos días después, el 11 de septiembre, se notificó un nuevo foco en los Jardines del Real Alcázar, tras la muerte de un pavo real y un pato dentro del recinto monumental. A ello se suma el Parque de Miraflores, que ha sido confirmado como foco este viernes 12 de septiembre, también en aves silvestres. Estos casos han obligado al Ayuntamiento hispalense a reforzar las medidas de prevención y a extremar la vigilancia en zonas verdes con presencia de aves acuáticas o en cautividad. En el entorno natural de Doñana , espacio clave para las rutas migratorias, también se han registrado positivos. El 5 de septiembre se confirmó un foco en Aznalcázar (Caño del Guadiamar), que afecta a un somormujo y otras aves silvestres, con código RASVE 2025/30. Además, el 9 de septiembre se constató otro caso en La Puebla del Río, en una finca con aves cautivas, identificado con el código RASVE 2025/2. En Hinojos, igualmente dentro del área de Doñana, se mantiene una vigilancia activa por la aparición de ejemplares muertos en humedales . En la provincia de Huelva , el virus ha alcanzado también a la ganadería. Una explotación de aves de corral en El Cerro del Andévalo fue confirmada como foco entre el 4 y el 5 de septiembre por la Junta de Andalucía, lo que obligó a aplicar medidas de sacrificio sanitario y la creación de zonas de protección y vigilancia. Apenas unos días más tarde, el 9 de septiembre, se notificó un segundo brote en una granja de Valverde del Camino, a unos 20 kilómetros del primero, bajo el código RASVE 2025/5. En una de estas explotaciones se contabilizaron hasta 8.400 aves afectadas , según fuentes oficiales. Con este panorama, la Junta cifra en nueve los focos activos de gripe aviar en la comunidad, concentrados en Sevilla y Huelva, al tiempo que mantiene un seguimiento intensivo en marismas y humedales para controlar la propagación del virus entre aves migratorias y domésticas. En paralelo, en la provincia de Córdoba se investiga el hallazgo de aves muertas junto al río Guadalquivir , aunque hasta el momento no se ha confirmado que se trate de casos de influenza aviar. La administración autonómica insiste en que la transmisión del virus a humanos es muy rara y que las medidas adoptadas buscan proteger tanto a la fauna silvestre como a la cabaña ganadera. Entre esas medidas destacan la retirada segura de ejemplares muertos, la vigilancia en espacios naturales y urbanos, y la activación de protocolos de bioseguridad en explotaciones avícolas. El foco está puesto en frenar la expansión en zonas sensibles como Doñana, donde confluyen miles de aves migratorias en estas fechas. La cronología en Málaga muestra que la respuesta local y autonómica, cierre preventivo, envío de muestras al Laboratorio Nacional de Referencia y refuerzo de la vigilancia, ha sido prudente y proporcionada al contexto andaluz, donde confluyen corredores migratorios y focos activos en provincias limítrofes. Con el parque de Huelin de nuevo operativo desde el 13 de septiembre, el Ayuntamiento mantendrá precauciones en todos los humedales urbanos, limpieza de orillas, retirada inmediata de aves fallecidas con equipos protegidos y comunicación pública, mientras la Junta conserva activo el seguimiento en lagunas y marismas andaluzas . La experiencia reciente en Sevilla, Doñana y Huelva avala esa prudencia: vigilancia reforzada, protocolos claros y mensajes de prevención a la ciudadanía.