El furor por los 'fantasy' de fútbol ya conquista a más de ocho millones de españoles

Si observa a un compañero de trabajo en actitud eufórica mientras observa su móvil, es posible que acabe de fichar a Lamine o a Mbappé. Si está tomando algo con un amigo y le ve de repente con cara de enfado, quizá haya sufrido un ‘clausulazo’ que le haya dejado sin Oblak o Nico Williams. Y si descubre a su primo de Valencia ansioso por saber si ha habido goles o expulsiones en un Oviedo-Alavés que a priori ni le va ni le viene, no tenga ninguna duda: está jugando al ‘fantasy’.