El ruido y el impacto sobre las terrazas y persianas provocado por una fuerte granizada ha despertado en la madrugada del viernes al sábado a los vecinos de un buen número de municipios de la zona oriental de Huesca, como Barbastro, Adahuesca, Camporréls, Paralta. Binéfar, Aguas, Pozán de Vero o Estadilla. La piedra, además, ha provocado daños en infraestructuras, en los cascos urbanos y en los campos. La lluvia ha descargado de nuevo con fuerza pocos días después de otra fuerte tromba de agua y pedrisco. La piedra ha arrasado con viñedos del Somontano y con numerosos campos. Hay zonas donde la uva tardía aún no se había recogido y las pérdidas han sido del 100%, aunque aún es prematuro evaluar los daños que también han dejado numerosos desperfectos en el mobiliario urbano de las localidades perjudicadas. También ha sufrido cuantiosas afecciones de barro y maleza arrastrada por la riada de agua la carretera que da acceso a la localidad de Estadilla. En este municipio numerosos usuarios han grabado el impacto de la tormenta y también los daños ocasionados a su paso, como la destrucción de tejados y la entrada de agua en las viviendas. Se han cuantificado decenas de litros por metro cuadrado en apenas unos minutos, aunque en otros municipios la lluvia torrencial se ha alargado más de hora y media. En esta población, numerosos bajos han quedado anegados, así como almacenes, el campo de fútbol y explotaciones ganaderas. Algún vecino describe que caían bolas de tenis, y es que las bolas de granizo recogidas tenían sobre unos 6 centímetros. Se trata de la tercera tormenta de gran envergadura que se registra en una semana en la comarca de La Litera y se acumulan los daños .