Raúl Flores Martínez/Enviado Las torrenciales lluvias que azotaron el jueves y viernes al estado de Hidalgo dejaron un panorama devastador en el municipio de Metztitlán, donde al menos mil personas permanecen incomunicadas en cuatro comunidades: Huayateno, Hualula, Tlaxco y San Antonio. Desde hace más de 48 horas, los habitantes duermen sobre las azoteas de sus viviendas, rodeados por el agua y en espera de la ayuda federal que apenas comienza a llegar. Elementos de la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) emprendieron la primera incursión a estas zonas de difícil acceso utilizando un camión Uro y lanchas Zodiac, con el objetivo de llevar alimentos y rescatar a quienes piden auxilio ante la escasez de víveres. El convoy naval, integrado por dos camiones comando y un vehículo anfibio, partió desde la presidencia municipal de Metztitlán cargado con despensas. Sin embargo, el trayecto que normalmente tomaría 30 minutos se convirtió en una odisea de más de dos horas: deslaves, caminos cubiertos por rocas del tamaño de un automóvil y los remanentes de ríos desbordados obstaculizan el paso. La carretera de dos carriles que conecta la cabecera con las comunidades permanece bloqueada por el desbordamiento de la laguna de Metztitlán, cuyo nivel de agua supera el metro y medio de altura, impidiendo todo tipo de tránsito. “La laguna subió de pronto y estamos inundados. Queremos aunque sea una despensa. A todos mis amigos o familiares que puedan echar la mano, lo que sea es bueno”, relató desesperado Rafael Barrera Barrera, habitante del barrio La Punta, en el municipio de Xuchitlán, mientras observaba los restos de su hogar anegado. Los comercios locales, que servían como último refugio de abasto, agotaron sus productos en cuestión de horas; la mayoría perdió su mercancía con la inundación que barrió con su patrimonio. Mientras tanto, la ayuda humanitaria avanza lentamente. Los marinos, cargando víveres y medicamentos, recorren a pie tramos fangosos y zonas donde los vehículos no pueden acceder. En las próximas horas, brigadas médicas se desplegarán en los puntos más afectados para atender casos de infecciones gastrointestinales, dermatológicas y prevenir brotes de dengue, ante el estancamiento de grandes cuerpos de agua. La tragedia en Metztitlán vuelve a evidenciar la vulnerabilidad de las comunidades serranas de Hidalgo ante las lluvias extremas. En tanto las autoridades evalúan los daños, la población resiste entre el lodo, el hambre y la incertidumbre, con la esperanza de que la ayuda llegue antes de que el agua —o el olvido— los vuelva a alcanzar, sobre todo el gobierno de Julio Ramón Menchaca que fue rebasado desde el inició de la contingencia. CONSULTA LAS NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA EN EXCÉLSIOR esm Contenidos Relacionados: CFE restablece electricidad al 91% tras lluvias; más de 18 mil usuarios resultaron afectados Defensa mantiene a 7 mil 300 elementos en la aplicación del Plan DN-III-E por lluvias ‘Necesitamos alimento y medicamento’, piden afectados por lluvias en Zacualtipán, Hidalgo