Durante cuatro años he trabajado como administrativa en el centro de salud de Alsasua. En abril de 2024, tras veinte años de enfermedad y múltiples operaciones de rodilla, tuve que afrontar la amputación de mi pierna derecha. Tras un año y medio, con esfuerzo y con la ayuda de mis médicos, me recuperé y, en junio de este año, el INSS me dio el alta. Tenía muchas ganas de reincorporarme a mi trabajo, en el que siempre me sentí útil y valorada.