Jessica Zamora Ramirez El cáncer de riñón es uno de los retos más complejos en medicina, sobre todo cuando se trata del carcinoma renal no células claras , un tipo menos frecuente, más agresivo y con pocas opciones de tratamiento. Aun así, un avance reciente podría cambiar esta situación. Una investigación mostró que combinar ciertos fármacos inmunoterápicos puede aumentar de forma notable la supervivencia de las personas con este tipo de cáncer. Te puede interesar: Fumar causa cáncer de riñón: especialistas advierten sobre los riesgos Ipilimumab + nivolumab mejoran la supervivencia en carcinoma renal Un estudio clínico reciente publicado por la revista especializada e-Medic y presentado durante el congreso anual de la American Society of Clinical Oncology reveló avances importantes en el tratamiento de uno de los tipos de cáncer renal más difíciles de tratar: el carcinoma renal no células claras (nccRCC) . Este subtipo representa uno de los mayores retos clínicos, ya que es más agresivo, menos frecuente y responde peor a las terapias convencionales. La investigación analizó la eficacia de una inmunoterapia dual basada en dos fármacos: ipilimumab y nivolumab , ambos pertenecientes a la clase de los inhibidores de puntos de control inmunitario (immune checkpoint inhibitors). Estos medicamentos actúan estimulando al sistema inmunológico para que reconozca y destruya las células tumorales con mayor eficacia, superando así uno de los principales mecanismos que el cáncer utiliza para evadir la respuesta inmune. Los resultados fueron alentadores: los pacientes tratados con la combinación mostraron una supervivencia global superior a los 12 meses, una mejora significativa si se compara con las terapias tradicionales, que apenas logran extender la vida durante unos pocos meses en casos avanzados. Además, se observó un incremento en la tasa de respuesta objetiva, es decir, un mayor porcentaje de pacientes experimentó una reducción significativa del tamaño del tumor. Este avance es especialmente relevante si consideramos que el carcinoma renal no células claras representa entre el 15% y el 20% de todos los casos de cáncer de riñón, pero históricamente ha contado con muy pocas opciones terapéuticas eficaces. La inmunoterapia dual no solo amplía el arsenal de tratamientos disponibles, sino que también mejora la calidad de vida y aumenta la esperanza de supervivencia en pacientes que antes enfrentaban un pronóstico desfavorable. Te puede interesar: ¿Por qué el cáncer de riñón suele detectarse por accidente? El reto de los subtipos no células claras y la falta de tratamientos eficaces El cáncer de riñón no es una sola enfermedad. Existen diferentes subtipos con comportamientos biológicos distintos, y el carcinoma de células claras es el más común y estudiado, indica un artículo del Instituto Nacional de Cáncer . Sin embargo, los subtipos no células claras —como el papilar, cromófobo o medular— suponen un reto aún mayor. Estos tumores tienden a ser más resistentes a las terapias dirigidas tradicionales, como los inhibidores de tirosina quinasa, y su respuesta a la quimioterapia suele ser limitada. Además, tienen tasas de supervivencia más bajas y un comportamiento clínico más impredecible, lo que complica la toma de decisiones terapéuticas. Por estas razones, los avances en inmunoterapia han estado enfocados principalmente en el carcinoma de células claras, dejando a los pacientes con variantes no células claras con muy pocas opciones. La relevancia del nuevo estudio radica precisamente en esto: por primera vez, pacientes con cáncer renal avanzado y con opciones terapéuticas agotadas podrían beneficiarse de un tratamiento que demuestra una eficacia clínica real. Este hallazgo supone un cambio de paradigma en el abordaje de la enfermedad y abre la puerta al desarrollo de nuevos protocolos clínicos más específicos para estos subtipos. ¿Quién participó en la investigación? La investigación fue desarrollada en colaboración con importantes centros oncológicos internacionales, entre ellos el Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) en España y diversos hospitales e institutos especializados en Estados Unidos. Con la participación de estos centros demostró la eficacia de la inmunoterapia dual en pacientes con carcinoma renal avanzado que habían agotado previamente otras opciones terapéuticas. Además, los resultados obtenidos sirven como base para futuros estudios que buscan combinar la inmunoterapia dual con terapias dirigidas o incluso con vacunas personalizadas, con el objetivo de mejorar aún más la respuesta inmunológica, prolongar la supervivencia a largo plazo y ofrecer tratamientos adaptados a las características moleculares de cada tumor. Te puede interesar: Vacuna experimental frena desarrollo de cáncer de riñón avanzado Elegibilidad, efectos adversos y próximos pasos en investigación A pesar de los resultados prometedores, los especialistas advierten que la inmunoterapia dual no es adecuada para todos los pacientes. Antes de iniciar el tratamiento, los oncólogos deben evaluar cuidadosamente aspectos como el estado general de salud, la función renal, el historial médico y la presencia de enfermedades coexistentes (comorbilidades), factores que influyen en la tolerancia y eficacia de la terapia. En cuanto a los efectos secundarios, la combinación de ipilimumab y nivolumab puede provocar reacciones asociadas a la activación del sistema inmunológico, entre ellas fatiga, inflamación, fiebre o alteraciones endocrinas. Sin embargo, según la American Cancer Society , la mayoría de estas reacciones son controlables con un monitoreo adecuado y con intervención temprana. El beneficio potencial de la terapia suele superar ampliamente los riesgos, especialmente en pacientes sin alternativas terapéuticas eficaces. El siguiente paso para la comunidad científica será la realización de ensayos clínicos de fase III con un mayor número de participantes. Esto permitirá validar los resultados obtenidos, comprender mejor los efectos a largo plazo y, eventualmente, establecer esta inmunoterapia dual como nuevo estándar terapéutico para el carcinoma renal no células claras. La combinación de ipilimumab y nivolumab representa uno de los avances más importantes en la lucha contra el carcinoma renal avanzado en los últimos años. Al ofrecer una alternativa eficaz en casos con opciones limitadas, esta inmunoterapia dual no solo prolonga la supervivencia, sino que también mejora la calidad de vida de los pacientes. Contenidos Relacionados: Cáncer de mama: experto revela que el colesterol y los alimentos ultraprocesados hacen más agresiva la enfermedad ¿Por qué el cáncer de riñón suele detectarse por accidente? Cáncer de riñón, el riesgo silencioso para trabajadores expuestos a solventes