Laura Toribio A los 65 años, cuando fue víctima de un atentado, Ciro Gómez Leyva sintió que entraba al “otoño de su vida”. No al invierno, dice, sino a una etapa gozosa, consciente, en la que busca cerrar su historia con plenitud, lucidez y cierta alegría. “Yo tenía 65 años cuando me dispararon. Es decir, estaba entrando, o acababa de entrar, a lo que llamo el otoño de mi vida, un otoño muy gozoso, muy disfrutable”, explicó el periodista en entrevista con Fernanda Familiar, al presentar su libro No me pudiste matar, editado por Planeta. La reflexión surgió tras el atentado que sufrió en diciembre de 2022. Desde entonces, reconoce, se pregunta cuántos años de vida plena le quedan: “¿Qué me queda por vivir? ¿Cuántos años me quedaban después del atentado? ¿Seis, ocho, diez, doce, quince? Me quiero regalar, y regalarle a los míos, un buen epílogo de vida: vivir con cierta plenitud, con razonable alegría, con razonable felicidad, sin tratar de chingarme a nadie.” Ciro Gómez Leyva considera que el título de su libro resume tres sobrevivencias: “No me pudo matar el grupo criminal que trató de hacerlo. No nos pudo matar la ofensiva brutal de seis años de Andrés Manuel López Obrador. Y no me pudo matar la tristeza, el desánimo, el abandono después de esos años y esos hechos.” Desde Madrid, donde reescribió la historia entre enero y abril de este año, el periodista habló de la libertad de hacerlo lejos de la rutina y con la calma que le permitió revisar cada palabra. El autor recordó la frase más dolorosa del libro: “asumí que había perdido, quizá de por vida, el privilegio de caminar sin guardias por las calles de mi ciudad y mi país. Y la vida sin caminatas… no merece la pena ser vivida.” “El caminar es aire, es luz, es reflexión, es tiempo, es espacio, es libertad. Eso sí lo perdí, es un privilegio que no he podido recuperar después del atentado”, afirmó. Sobre el perdón, fue claro: “el perdón tiene algo de arrogancia, de superioridad. Yo no lo pido. He estado dispuesto a ofrecerlo cuando puedo reparar un daño, pero no espero que me lo den.” Gómez Leyva dice no creer en un ser supremo ni en la trascendencia, pero sí en las acciones de bien y de mal, y en lo que llama “la tiranía de la contingencia”: el azar que define dónde se está y por qué. “La vida sigue —recordó citando a Wislawa Szymborska—, y podemos hacerla mejor. Si después de una guerra nadie recoge las cosas, ¿quién las va a recoger?, ¿quién va a secar la sangre?” cva Contenidos Relacionados: Dan 11 años de cárcel a ‘El Haza’, implicado en atentado contra Ciro Gómez Leyva Caso Ciro Gómez Leyva: Dan 11 años de cárcel a ‘El Dedotes’ y ‘El Yeye’ ‘El Patrón’ suma segunda vinculación a proceso por atentado contra Ciro Gómez Leyva