Ikea está en proceso de aumentar la cantidad de productos que fabrica en Estados Unidos, ya que el minorista de muebles para el hogar más grande del mundo se encuentra bajo la presión de los aranceles impuestos por el presidente Donald Trump a muebles y gabinetes de cocina.El minorista de muebles para ensamblar en casa, que facturó 5 mil 500 millones de dólares en EU el año pasado, actualmente solo produce alrededor de 15 por ciento de los artículos que vende en el país. Esto se compara con 75 por ciento en Europa y 80 por ciento en Asia.“Queremos seguir expandiéndonos en EU y Canadá. ¿Cómo optimizamos una buena estructura de suministro que garantice el acceso adecuado a materiales, componentes y producción? Estamos trabajando a muy largo plazo”, declaró Jon Abrahamsson Ring, director ejecutivo de Inter Ikea, propietaria de la marca, a Financial Times.Trump impuso esta semana aranceles de entre 10 y 50 por ciento a las importaciones de muebles y productos de madera extranjeros. Ikea, responsable de alrededor de 1 por ciento de la producción industrial total, recibirá un golpe fuerte.Jesper Brodin, director ejecutivo de Ingka, que opera 90 por ciento de las 487 tiendas de Ikea, señaló que en 2023 el grupo se comprometió a invertir 2 mil 200 millones de dólares tanto en nuevas tiendas como en instalaciones de producción en EU.“Seguiremos buscando maneras de sumar nuevos puntos de contacto con los clientes y ampliar el abastecimiento y la logística en América del Norte, incluido EU”, dijo en otra entrevista. Ring dijo que, dado que Ikea importa la mayoría de sus productos estadunidenses desde Europa, se encuentra “cautamente optimista” respecto a que puede aplicar los aranceles de 15 por ciento que EU impuso a las exportaciones de la Unión Europea, en lugar de las tasas más punitivas de Trump sobre los productos de madera.La mayoría de los competidores de Ikea importan de Asia, que está sujeta a tasas más altas.Los comentarios de los ejecutivos sobre los aranceles se produjeron después de que Ikea informó una caída de 1 por ciento en sus ingresos anuales, hasta 44 mil 600 millones de euros, en el ejercicio que terminó en agosto.La empresa atribuyó la disminución a los recortes de precios que implementó en 2024 luego de un periodo de alta inflación, y dijo que tanto el volumen de ventas como las visitas de clientes subieron 3 por ciento el año pasado.Ikea se expande en el continente americano, con aperturas en nuevos países como Costa Rica y Panamá, además de nuevas tiendas en EU, incluida una nueva en el distrito SoHo de Manhattan. El minorista sueco también abrirá este año los llamados estudios de planeación de cocinas en 10 sucursales de Best Buy, como parte de un esfuerzo por consolidar su presencia en ciudades más pequeñas de EU.Ikea también está probando un nuevo tipo de tienda, llamada Lada, en localidades más pequeñas. Abrirán en locales comerciales que ya existen para reducir costos y ofrecerán una experiencia de compra más convencional y sencilla que las salas de exposición de Ikea.La prueba piloto incluye tres tiendas en el Reino Unido (Norwich, Chester y Harlow), además de una en Polonia y otra en EU.Tolga Öncü, gerente de ventas minoristas de Ingka, dijo que el grupo decidirá a finales de año si expande el nuevo formato a más lugares.Se simplificaron las tiendas, incluyendo la eliminación de gran parte de la presentación visual de los productos, pero aún garantiza a los clientes que podrán recibir cualquier producto que no esté en la tienda en un plazo de 24 a 48 horas, añadió Öncü. Ikea ha hecho de numerosos formatos más pequeños --especialmente en los centros de las ciudades, más cerca de donde viven y trabajan sus clientes-- a medida que se aleja de su fuerte dependencia de las grandes tiendas fuera de las ciudades.