Con danza, Paula Villaurrutia, rescata la memoria raíz

Virginia Bautista La trenza representa el camino de la vida y los listones de colores que forman los moños son “como los pedazos de memoria de los que estamos hechos”. Por esto, una larga trenza de 14 metros cruza el escenario donde cobra vida la obra Male Rosita, entre caminos y memorias , de la coreógrafa Paula Villaurrutia . TE RECOMENDAMOS: Ensayo Escénico: Paradigma de un artefacto disruptivo Estrenada anoche en el Teatro de la Danza del Centro Cultural del Bosque , donde ofrecerá siete funciones más hasta el 26 de octubre , esta pieza, la primera parte del proyecto Pasos danzantes … testimonial coreográfico de bailadores tradicionales hurga en temas como la memoria, la pertenencia y la identidad. Contamos dos historias: la de una persona orgullosa de quien es y, su contraparte, alguien que, por prejuicios, vergüenza o imposiciones sociales, decide alejarse de esas memorias, de esos recuerdos”, comenta Villaurrutia en entrevista. LA OBRA VA MÁS ALLÁ DEL RACISMO Y LA DISCRIMINACIÓN La también bailarina afirma que, más allá de decir no al racismo y a la discriminación , la coreografía tiene varias lecturas . “Hay muchos motivos por los que rechazas quién eres, como el aspiracionismo. Pero existe esa memoria raíz que es fuerte, que brota y resurge; y, por más que quieras olvidarte de ella, la traes en la piel, en tus rasgos, en lo que comes y te gusta bailar. Es tu ADN, por más que te escondas”. UN MONTAJE INSPIRADO EN UNA MUJER PURÉPECHA Detalla que Rosalinda Vázquez Ochoa , una mujer purépecha originaria de Michoacán , que vive en la Ciudad de México y a quien conoce desde hace 15 años, inspiró este montaje que combina baile tradicional, danza contemporánea, voz y el canto de las pirekuas. Es una mujer ejemplo que salió de su pueblo para asentarse en esta gran urbe sin perder sus tradiciones. Es un homenaje a la gente que ha resguardado su cultura y ha resistido a la vorágine social; porque gracias a esto construimos nuestra historia”, agrega. La maestra de danza folklórica explica que ha trabajado en Male Rosita … durante este año . “Ha sido un proceso complejo. A diferencia de otras piezas, sólo sabía que iba a trabajar con ella. Y que los ‘ingredientes’ serían de la región purépecha de Michoacán. Pero no sabía hacia dónde me llevaría la historia, porque dependía del acercamiento con ella, de sus testimonios”. Dice que Rosalinda le contó que nunca sufrió discriminación , pero que sí vio el maltrato a otros . “Narra que le tocó ver que en su pueblo no dejaban entrar a personas con pantalón de manta o no los dejaban hablar en purépecha. Su testimonio se escucha en el escenario”, señala sobre la obra que dura 50 minutos. Male quiere decir señorita o muchachita. Ella interactúa todo el tiempo conmigo. Cuido que siempre sea ella, no es una actuación. Hay una participación especial de su esposo, con quien forma el Dueto Purépecha y ofrecen un momento de música en vivo”, indica. CONSULTA AQUÍ LAS NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA *mcam Contenidos Relacionados: Nacho Cano da voz a La Malinche Descifran en escena las claves del Mictlán en Foro Coyoacanense Hugo Argüelles Alistan reposición escénica de Algo de Ricardo en el Foro Shakespeare