No hay tal paz y ni siquiera se está cerca de ella. El conflicto entre Israel y Palestina no empezó hace tres mil años, como lo dijo Donald Trump con su acostumbrada mezcla de ignorancia y egolatría, pero tampoco inició el 7 de octubre de 2023, como lo han afirmado los medios occidentales con machacona insistencia. En realidad, la violencia en la zona se remonta a los años de 1946-1948, cuando comenzó la expulsión de los habitantes árabes del territorio de Palestina para erigir allí un Estado artificial e intruso: Israel.