Tener la necesidad de masticar hielo puede ser una señal de falta de hierro

Seguro que más de una vez has masticado los pequeños hielos que quedan en el vaso al terminar un refresco. En principio, aunque no sea demasiado recomendable para los dientes, se trata de un gesto inofensivo, pero si se convierte en algo frecuente y compulsivo puede estar indicando algo más.