La elegancia y el éxito siempre rodearon el nombre de Isak Andic , el visionario empresario que transformó la moda española a través de Mango , la multinacional que fundó y presidió hasta sus últimos días. Pero la historia que marcó su legado ha tomado un inquietante giro. A 10 meses de su muerte en una presunta caída accidental en Montserrat , Jonathan Andic , su hijo y único testigo de los hechos, ha sido imputado por un presunto delito de homicidio. De la cumbre del éxito a un abismo judicial La mañana del 14 de diciembre de 2024 parecía haber sido una de reconciliación entre padre e hijo . Isak y Jonathan Andic decidieron recorrer en solitario uno de los senderos del majestuoso macizo de Montserrat , a las afueras de Barcelona. Sin embargo, lo que debía ser un paseo íntimo terminó en tragedia : el fundador de Mango cayó mortalmente. La noticia paralizó no solo al mundo de la moda, sino también a los círculos empresariales y políticos de toda España. En un primer momento, tanto los Mossos d’Esquadra como el Juzgado de Instrucción número 5 de Martorell manejaron la hipótesis de un accidente . La causa se mantuvo bajo la categoría de muerte accidental, hasta que, a principios de este año, se reabrió discretamente la investigación , supuestamente por protocolo en muertes no naturales . Sin embargo, esa reapertura escondía mucho más de lo que parecía. Secretos, sospechas y un giro de 180 grados Según ha adelantado El País , la jueza a cargo del caso ha cambiado el rumbo de la investigación tras detectar incongruencias en las declaraciones de Jonathan Andic , quien ha pasado oficialmente de testigo a imputado como sospechoso de homicidio. El secreto de sumario ha sido clave en este desarrollo. Durante meses, los Mossos continuaron investigando en silencio , incluso cuando algunos medios sugerían que la causa ya estaba cerrada. Entre los elementos más relevantes figuran las contradicciones entre las dos declaraciones de Jonathan (una en estado de shock poco después de los hechos, y otra meses después en el despacho de su abogado, Cristóbal Martell), además del análisis exhaustivo de su teléfono móvil , cuyas pistas podrían ser cruciales para esclarecer el caso. Una relación rota y el testimonio que encendió las alarmas No solo el comportamiento de Jonathan ha suscitado dudas. El testimonio de Estefanía Knuth , pareja sentimental de Isak Andic , ha añadido una nueva capa de tensión al asunto. Knuth habría mencionado que la relación entre padre e hijo era complicada y distante, una situación que precisamente habría motivado esa caminata en Montserrat como un intento de acercamiento. Desde la familia Andic , el hermetismo ha sido absoluto. En declaraciones conjuntas a El País y El Mundo, un portavoz aseguró que “la familia no ha hecho ni hará comentarios sobre el fallecimiento de Isak Andic ” y que seguirán colaborando con la justicia . No obstante, la misma fuente quiso dejar claro que “están seguros de que se demostrará la inocencia de Jonathan ” y de que este proceso judicial “terminará lo antes posible”. Tras el fallecimiento del patriarca, la estructura de Mango y del imperio Andic vivió una reconfiguración silenciosa. Jonathan asumió la presidencia de Punta Na Holding , sociedad patrimonial que engloba el 95 % del capital de Mango , ahora en manos de los tres hijos del empresario: Jonathan, Judith y Sarah Andic. A pesar de su implicación en la investigación , Jonathan mantiene un rol clave en el negocio familiar, aunque en junio cesó de sus funciones ejecutivas dentro del comité de dirección de Mango . Te puede interesar Muere el fundador de la cadena española de moda Mango en un accidente de montaña