"Don Víctor de Aldama se refería a las gestiones que había realizado con anterioridad facilitando inmuebles para encuentros de diversa naturaleza en los que participaba junto a otras personas el sr. Torres. En particular fue recurrente el alquiler de un piso en la calle Atocha". Esta frase consta en el escrito que remitió la defensa del empresario al Tribunal Supremo a finales del año pasado. Una acusación que se ha derretido meses después. Víctor de Aldama, el empresario investigado por el caso de las mascarillas junto a Koldo García, José Luis Ábalos y Santos Cerdán, se ha convertido en un personaje clave para la derecha mediática y política para tratar de hacer caer al Gobierno central. Un hombre de negocios (ahora en libertad tras ser detenido y declarar voluntariamente) que se ha dedicado durante más de un año a contar diferentes versiones llenas de medias verdades, mentiras y acusaciones gravísimas sin ningún tipo de prueba documental. Y el caso del ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres , es un ejemplo esclarecedor de cómo muchas de esas acusaciones han quedado desmontadas, pero han servido para inflar horas de tertulias y hojas de periódicos poniendo en duda a algunos políticos progresistas. Durante meses se especuló con la elaboración de un informe de la UCO sobre el ministro que pudiera costarle el banquillo en los tribunales, principalmente en base a las afirmaciones que había hecho Aldama. Y ese documento se hizo público este lunes, pero no hay rastro en él ni de mordidas ni comisiones por parte del expresidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ni de pisos con prostitutas. El ministro de Política Territorial va a presentar una demanda contra Aldama y, además, ha pedido al Partido Popular que pida perdón por recoger estas acusaciones que le han hecho daño en el ámbito familiar. Pero Génova 13 calla e incluso volverá a sentar, por cuarta vez, al expresidente canario en la comisión de investigación del Senado sobre el caso Koldo . Todo ello después de que los propios investigadores no hayan encontrado ni siquiera indicios delictivos respecto al socialista en el informe elaborado por la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil. “Es un hombre honrado” , reiteran desde el Palacio de La Moncloa sobre Torres. Desde el entorno del ministro indican: “Ni mujeres explotadas sexualmente, ni pisos, ni mordidas, ni comisiones, ni encuentros con narcotraficantes. El juez no ha considerado creíble ninguna de las falsas acusaciones de Aldama. Quedan desmontadas las mentiras de la derecha y de la ultraderecha. Quedan desacreditadas las difamaciones interesadas en medios y pseudomedios de comunicación”. En cambio, el informe de la UCO sí ha derivado, según un auto conocido este viernes, en la citación por parte de la Audiencia Nacional a declarar como investigados tanto a Koldo García como a Víctor de Aldama en relación a la compra de mascarillas y de test de antígenos en Canarias. Desde que fue detenido Aldama, por la trama de los hidrocarburos, y su posterior declaración en la Audiencia Nacional, su principal amenaza es que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , conocía las supuestas actividades corruptas de Koldo García, José Luis Ábalos y Santos Cerdán. Y ha dicho en varias ocasiones que tiene pruebas. Pero ha pasado un año y no ha presentado ningún indicio o material que corrobore ese extremo. Asimismo, ha puesto sobre la mesa estos meses una supuesta relación de cercanía con el jefe del Ejecutivo que, posteriormente, ha quedado limitada a una foto en la bambalinas del teatro de La Latina, en Madrid, durante el acto de presentación de la candidatura de Pepu Hernández para las elecciones municipales de 2019. Otro de los grandes puntos en el caso Koldo es la supuesta adjudicación, con mordidas a cambio, a través del Ministerio de Transportes durante la época de José Luis Ábalos. Para sustentar la denuncia, el empresario trasladó un manuscrito de Koldo García, con nombres de lugares y de empresas supuestamente beneficiadas. El departamento, ya en manos de Óscar Puente, informó, tras una comprobación, que una de las obras no se había licitado, mientras que otra fue licitada ya no siendo ministro Ábalos. Tres de esos contratos fueron dados a la oferta más baja y el restante a las propuesta mejor puntuada. Además, la otra supuesta prueba era un anexo de los presupuestos generales. Aldama también ha tratado de ensuciar al Gobierno acusando directamente a la esposa del presidente, Begoña Gómez, y a varios ministros de tener cuentas bancarias en República Dominicana (María Jesús Montero, Teresa Ribera, Ángel Víctor Torres, Óscar López y Pilar Alegría). La denuncia fue archivada tanto por la Fiscalía Anticorrupción como por el Tribunal Supremo, que señaló en su auto que tomó la decisión por "la absoluta ausencia de cualquier indicio mínimamente fundado, primero sobre la existencia de algún delito y segundo, de indicios fundados o dotados de mínima verosimilitud sobre la participación en el mismo de las personas mencionadas en la denuncia". El PP también presentó una querella contra el PSOE por financiación ilegal y tráfico de influencias a raíz de las declaraciones de la empresaria Carmen Pano de haber llevado 90.000 euros en metálico a la sede socialista de Ferraz por orden de Víctor de Aldama en octubre de 2020. La Audiencia Nacional archivó la querella por falta de indicios. Ahora, sí ha abierto una investigación, trasladada al Tribunal Supremo, por los pagos en efectivo a Ábalos y Koldo después de un nuevo informe de la UCO. Un año después de su declaración ante el juez, Aldama tampoco ha aportado ninguna prueba de su acusación de que supuestamente la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez , en su polémico paso por Barajas, tenía organizada una cena con Sánchez y cinco ministros, por lo que supuestamente el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, creó un espacio Schengen. Aldama también se vendió como un supuesto enlace entre servicios secretos internacionales vinculado con el CNI, la CIA y el MI6. Tampoco ha aportado ninguna prueba de una relación de colaboración, a excepción de una fotografía en una cacería junto a miembros de servicios de inteligencia internacionales. Fuentes de la Inteligencia española negaron a la Cadena Ser que trabajara para ellos. Además, a lo largo de estos meses también se ha sabido, por ejemplo, que sus afirmaciones en la intimidad difieren de algunas públicas. En un audio enviado a Koldo García (que está incluido en el sumario de la causa, pero que fue ignorado por la UCO en su informe) desvinculaba a la esposa del presidente del rescate de Air Europa.