En un contexto económico cada vez más incierto, muchas personas se ven obligadas a buscar fórmulas sencillas de ahorro. Una de ellas viene de Japón, tiene más de un siglo de antigüedad y se llama Kakebo. Su traducción literal es libro de cuentas para la economía doméstica, pero este método va mucho más allá de llevar las cuentas al día: propone un cambio profundo en la forma en la que nos relacionamos con el dinero.