La cosecha de cítricos en Córdoba será menor a la prevista si no llueve pronto

Con un cierto retraso ha comenzado ya la campaña de recolección de los cítricos en la comarca de la Vega del Guadalquivir, donde se contabilizan unas 12.000 hectáreas repartidas por municipios como Palma del Río, Hornachuelos o Posadas, principalmente. Las previsiones, tanto de la Junta de Andalucía como del propio sector, son que la cosecha será sensiblemente inferior con respecto a la correspondiente a la temporada anterior. Las causas son, fundamentalmente, meteorológicas debido a la falta de precipitaciones y a las altas temperaturas alcanzadas en verano y en este inicio del otoño, aunque entre los productores hay esperanzas de que se pueda recuperar algo si llueve próximamente. El aforo de la campaña 2025-2026, que dio a conocer en septiembre la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, auguraba para Córdoba una producción de 253.174 toneladas , lo que supone un 26 por ciento menos en relación periodo pasado, cuando se llegó a las 344.414 toneladas. La naranja dulce acapara gran parte de esta cosecha con unas 240.535 toneladas previstas, algo más de un 27 por ciento de descenso interanual. Por detrás, aparece el pomelo, con 6.693 toneladas estimadas (-18,7%), la mandarina, con 5.755 toneladas (-6,5%), y el limón, con 191 toneladas (-23,3%). La pérdida de fruta recogida en el conjunto de Andalucía también baja, pero la mitad de lo que lo hace en Córdoba (-13%), que se queda en el segundo puesto de la comunidad con una mayor disminución, sólo por detrás de Granada, que se dejará esta vez un 41 por ciento de la cosecha. El técnico de Asaja en Córdoba, Eduardo Eraso, indicó que esas previsiones de la Administración autonómica se han podido quedar ya obsoletas debido a que ese estudio se presentó a mediados de septiembre y, desde entonces, las lluvias han sido muy escasas y las temperaturas han sido especialmente elevadas para la época del año. Según los cálculos de la patronal agraria, la merma de producción podría haber subido hasta el 30 por ciento. «Lo que es la cantidad de fruta no varía tanto , sino que este descenso viene dado, sobre todo, por los menores rendimientos que se esperan», subrayó Eraso. Por su parte, el presidente de Palmanaranja, Antonio Carmona , coincidió en el diagnóstico de Asaja, pero declaró que «aún hay posibilidades de que nos acerquemos al aforo de la Junta si hay precipitaciones pronto, como parece que va a ocurrir en los próximos días según las previsiones meteorológicas que hay». Según apuntó, «la naranja aún no ha alcanzado su máxima madurez, por lo que si llueve puede seguir creciendo y aumentado, de este modo, su calibre». En lo que se refiere al mercado, tanto Palmanaranja como la Junta han constatado que la campaña se ha iniciado con escasas operaciones. Carmona señaló que «el mercado va arrancando poco porque todavía hay producciones de Sudáfrica que están entrando en Europa, aunque cada vez son menos». El también gerente de Sunaran explicó que el incremento del ritmo de las ventas «dependerá de los acuerdos que tengan las cadenas de supermercados con cada uno de sus proveedores, de modo que esperamos que todo se vaya modulando para conseguir unos niveles de precios aceptables». Una vez más la entrada de cítricos de países extracomunitarios causa no pocos dolores de cabeza a la industria cordobesa. «Es un total sinsentido que la Unión Europea (UE) permita la llegada de producciones de países que están utilizando fitosanitarios que no están prohibidos aquí, por lo que seguimos reclamando la aprobación de cláusulas espejo a fin de que todos cumplamos las mismas condiciones», resaltó el técnico de Asaja. También persiste el problema de la falta de mano de obra para las labores de recolección y en la industria. Carmona indicó que «esta es una cuestión que ha venido para quedarse, pero esta campaña es posible que se note algo menos que el año pasado debido a la inferior cosecha que está prevista». En este sentido, Eraso subrayó que «las dificultades son mayores cuando coinciden las temporadas de olivar la de cítricos». Desde Asaja esperan poder repetir la experiencia que realizaron en la campaña pasada cuando se aprobó un pequeño contingente de casi 100 trabajadores marroquíes para las explotaciones de naranja en la provincia.