Receta de pan de calabaza, un clásico en otoño de Joseba Arguiñano

Cuando llega el otoño, la calabaza se convierte en la reina de la despensa . Con ella podemos elaborar un sinfín de recetas. Su dulzura natural, su textura cremosa y su color vibrante la hacen perfecta para elaborar platos reconfortantes. Y si además la convertimos en pan, el resultado es una receta que huele a casa, a horno encendido y a tardes tranquilas. El pan de calabaza de Joseba Arguiñano es una de esas elaboraciones sencillas y agradecidas que funcionan tanto para desayunos como para meriendas o incluso para acompañar platos salados. El uso del puré de calabaza le aporta una jugosidad especial, y la decoración con pipas tostadas le da un toque crujiente que hace aún más apetecible cada bocado. A continuación, te explicamos cómo prepararlo paso a paso en casa. En un bol grande, pon la harina y añade el puré de calabaza previamente mezclado con el huevo, la masa madre, la levadura desmenuzada, el azúcar y la sal. Mezcla bien hasta que toda la harina desaparezca. Cubre con film y deja reposar a temperatura ambiente durante 30 minutos . Después del reposo, pasa la masa a la encimera. Incorpora la mantequilla en dos tiempos , amasando hasta que se integre por completo. Forma una bola, vuelve a colocarla en el bol, cúbrela y deja reposar 1 hora. Divide la masa en dos porciones iguales. Forma bolas y pásalas por papel de cocina ligeramente humedecido , luego presiónalas sobre un plato con las semillas de calabaza para que se adhieran bien. Colócalas sobre una bandeja con papel de horno, tapa con un paño limpio y deja fermentar durante 90 minutos. Precalienta el horno a 200 ºC. Pulveriza los bollos con un poco de agua y hornéalos durante 10 minutos . Baja la temperatura a 190 ºC y hornea otros 20 minutos. Una vez listos, deja enfriar sobre una rejilla. Usa calabaza asada al horno, bien escurrida , para que el puré no tenga exceso de humedad. Si no tienes masa madre , puedes aumentar ligeramente la cantidad de levadura, aunque el sabor será menos profundo. Las pipas de calabaza no solo aportan textura, también un toque tostado que contrasta muy bien con la suavidad de la miga. Este pan es ideal para congelar : córtalo en rebanadas y congélalas separadas para tener siempre pan casero a mano. Y si quieres otras recetas de pan para elaborar en casa , puedes probar con este pan casero con harina de almendra o incluso un auténtico pan de pueblo . Este pan de calabaza es una de esas recetas que te reconcilian con el otoño . Fácil de hacer, con ingredientes sencillos y resultado delicioso, es un básico que no puede faltar en tu recetario de temporada. Pruébalo y verás cómo se convierte en uno de tus imprescindibles.