Teniendo en cuenta las siniestras ocurrencias de Yolanda Díaz respecto a la vivienda , uno esperaba verla cualquier mañana exclamar briosa lo de «¡exprópiese!». El comunismo es propenso a lo de expropiar siempre y cuando la propiedad sea la del otro. El comunismo siempre anda en contra de la empresa privada, incluso de la golosa industria de las falsificaciones, salvo que el bolso lo porte alguien de tu parentela bermellona. El comunismo pretende igualarnos a todos hacia el subsuelo de la miseria mientras ellos disfrutan de la dacha de Galapagar, por ejemplo, y del colegio privado para los pequeñuelos o de la universidad privadísima para la adolescente. De momento, sus avances suponen una empanada mental atropellada que sólo parchea a... Ver Más