La alcaldesa de Valencia, María José Catalá , culpa directamente a la oposición de no llegar a un acuerdo para aprobar la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) y asegura que desde su partido «lo pelearán judicialmente si se da el contexto determinado». Así lo ha denunciado este miércoles la primera edil, quien ha acusado al PSOE de «intentar incorporar proyectos urbanos que nada tienen que ver con la ordenanza». Además, ha insistido en que el «Partido Popular ha sido el único grupo responsable para no perder esos recursos». Cabe recordar que desde el último pleno municipal, el Ayuntamiento de Valencia tiene en juego 115 millones de euros tras el voto en contra de última hora de Vox a la ordenanza de la ZBE, cuya entrada en vigor estaba prevista para el 1 de diciembre. La negativa de Vox, que forma parte del equipo de gobierno junto al PP, dejó a los 'populares' en solitario en la defensa de la normativa tras votar hasta en cinco ocasiones a favor previamente. Tras el voto en contra de su socio de Gobierno, el PP inició las negociaciones con la oposición, en las que según ha indicado Catalá, han incorporado «las propias alegaciones» que presentaron PSOE y Compromís, que contemplaban « nuevas etiquetas y ampliar el ámbito territorial». No obstante, la primera edil subraya que en el momento de la negociación, «de repente» les comunicaron que «también querían incluir el corredor verde », que tal y como ha señalado Catalá, «no se puede poner incluir en el texto de la ordenanza de la ZBE». Por ello, la alcaldesa ha incidido en que «esta ha sido una oportunidad única para dejar en evidencia lo que de verdad supone contar con el PSOE y Compromís». «Han demostrado que no tienen ningún ánimo de llegar a ningún consenso por responsabilidad», ha insistido. Asimismo, además de señalar que el PSOE «quiere incorporar proyectos que nada tienen que ver», Catalá también ha acusado a Compromís de proponer «aprobar la ordenanza a cambio de que les aprobaran una moción en el siguiente pleno, que nada tenía que ver» «Yo lo intento, he cogido sus propias alegaciones para negociar ese texto pero es que no quieren llegar a ningún acuerdo, quieren incorporar en la negociación cosas que no», ha concluido la alcaldesa de Valencia. La no implementación de la ZBE en Valencia pone en riesgo los fondos europeos Next Generation. Además de la pérdida de estas ayudas, el Ayuntamiento se enfrentaría a una sanción económica por incumplir con la normativa, junto con la obligación de devolver las subvenciones al transporte, lo que asciende a 115 millones de euros. Al respecto, la concejal socialista María Pérez ha denunciado que «la señora Catalá no solo no dice la verdad sobre las negociaciones de la Zona de Bajas Emisiones sino que, además, parece haber olvidado que es la alcaldesa. Porque la responsabilidad de cumplir con la ley y tener una zona de bajas emisiones que mejore la calidad del aire es de la alcaldesa y del Partido Popular; la responsabilidad de conseguir llegar a un acuerdo con el resto de partidos políticos también es de la alcaldesa y del Partido Popular; y la responsabilidad de que esta ciudad no pierda 115 millones de euros ni las bonificaciones al transporte también es de la alcaldesa y del Partido Popular. Pero la señora Catalá parece que prefiere culpar a los demás antes que asumir sus obligaciones y esconder su falta de gestión detrás de excusas. Y eso no es gobernar sino irresponsabilidad política».