La periodista Maribel Vilaplana acudía al juzgado de Catarroja el pasado 3 de noviembre para declarar en calidad de testigo en la causa que investiga la DANA, liderada por la magistrada Nuria Ruiz Tobarra. La periodista, que comió con Carlos Mazón en El Ventorro el día del temporal, aportaba su testimonio por segunda vez, después de que publicara una carta a la ciudadanía meses atrás. En las semanas posteriores, el popular presentaba su dimisión y, recientemente, declaraba en la comisión de investigación en Les Corts. En ambas apariciones ha vuelto a eludir responsabilidades, soltar mentiras y, sobre todo, dejar en el aire multitud de incógnitas. Puesto que todavía se desconoce dónde estaba o qué hizo durante su apagón comunicativo, las teorías siguen surgiendo, involucrando también a la comunicadora. Mientras, ella trata de volver a la "normalidad" centrándose en su trabajo, aunque no "ajena a lo que está pasando". Ni veinticuatro horas después de enfrentarse a la Justicia, Vilaplana retomó su vida profesional impartiendo sus cursos de formación. Fuentes cercanas a su entorno cuentan a ElPlural.com que el trabajo le sirve de "válvula de escape" en un momento en el que sigue recuperándose anímica y físicamente. Preguntándose de "dónde saca las fuerzas", señalan que tiene la "batería en -1". Además, aseguran que "no es ajena a lo que está pasando, no está aislada en una burbuja", pero, ante el constante volumen de noticias sobre ella, Mazón y la causa que rodea a la DANA, "necesita volver a la bendita normalidad y monotonía". El trabajo se ha convertido en una manera de "recuperar fuerza", por lo que se encuentra "focalizada" en él. Vilaplana otorga distintas formaciones en materia de comunicación y, al margen, es consejera de Comunicación y Relaciones Institucionales del Levante UD, club que lograba el ascenso a la Primera División a finales de la temporada pasada. Recientemente, José Danvila, consejero delegado del equipo, ha apoyado públicamente a la comunicadora en declaraciones a El Mundo: "Es vomitivo lo que se está haciendo con Maribel. Si se llamara Vicente, se acabaría el morbo". Desde su entorno confirman que el club levantinista la ha "respaldado desde el minuto cero". El pasado mes de mayo, el equipo celebraba el ascenso por las calles de Valencia, pero Vilaplana decidió no formar parte de la comitiva levantinista por el temor a ocupar titulares. "Es un hecho histórico y ella no pudo ir porque no quiso quitarle el mínimo protagonismo al equipo porque la noticia iba a ser esa. Fue una decisión súper dolorosa. Es un momento mágico que no volverá a repetirse y prefirió sacrificarlo", contaba su entorno a este periódico. Aunque ya insistían en que fue una decisión personal tras "pensar fríamente", puesto que "está respaldada" y "el club está súper orgulloso de ella". El apagón comunicativo de Mazón que salpica a Vilaplana Días antes de que se cumpliera el primer aniversario de la DANA se conocían nuevas informaciones que volvían a desmentir la que era, hasta la fecha, la última versión de Carlos Mazón...