Explica Bruno Martín (Madrid, 1982) que su gran epifanía cinéfila llegó en 1997, con 14 años, cuando su padre le grabó de la tele 'Reservoir dogs' en VHS. «Después de verla, la rebobiné y la volví a ver entera. Y así hasta cuatro veces seguidas. Y entonces me dije: Vale, esto es lo que yo quiero hacer en la vida. No rebobinar cintas de VHS, sino películas como ésa». Han pasado 28 años y Bruno Martín estrenó en el pasado Festival de Sitges, el mismo en el que Quentin Tarantino ganó el premio a la mejor dirección en 1992 por Reservoir dogs, para presentar su «primera película seria»: 'Luger'. Un contundente thriller de acción que rinde homenaje a las buddy movies de los 80 desde una reivindicación castiza de la estética del polígono industrial. Martín presentará hoy la película en Fancine (Albéniz, 21.30 horas), y lo hará avalado por las estupendas críticas recibidas hasta la fecha. Una de las sorpresas de la temporada del cine nacional.