Mi enhorabuena a quiénes les haya tocado algo, aunque sea la pedrea, en el sorteo de la lotería de Navidad. Y a los que no, ¡mucha salud!, que es el premio más grande que puede recibir el ser humano, porque ¿qué haces con un premio gordo si no puedes disfrutarlo porque la salud no te acompaña? Por lo demás, disfrutemos estos días de la familia y de los amigos, y pensemos en los que no puedan hacer lo mismo, o porque no la tienen, o la tienen lejos o la han perdido... Y también en aquellos que no tienen nada y que la van a pasar solos, o en compañía de otros en sus mismas condiciones. Y es que, desgraciadamente, la Navidad no es igual para todo el mundo.