Cristina Velasco, presidenta del Colegio de Veterinarios de Cádiz habla de la campaña que pone en marcha esta Navidad el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Veterinarios (CACV)  para poner en valor el trabajo de los profesionales. Bajo el lema 'Con V de Veterinaria', la iniciativa, busca resaltar la presencia indispensable del sector en la sociedad, coincidiendo con la Navidad, una fecha clave para el consumo y la seguridad alimentaria. La campaña se articula en torno a la letra 'V', asociándola a los valores que definen la profesión. Cristina Velasco explica que se trata de una "V de valiente, porque ayudas a los animales cuando más te necesitan", y una "V  vocacional", ya que es un trabajo "pasional". También es una "V de vigilantes", por su labor detectando pandemias como la gripe aviar, y "vital", porque su fin último es salvar vidas. La presidenta ha añadido los conceptos de "versátil", "valiosa" y "visionaria" para describir un campo que abarca desde la investigación a la fauna salvaje, sin olvidar que las "vacunas también se escriben con v". Durante su intervención, Velasco ha querido recordar el papel fundamental que juegan los veterinarios en la cadena alimentaria, un trabajo a menudo invisible pero crucial. "Hay un gran trabajo detrás, que no se ve, y el hecho de que no se vea este trabajo parece que no existe", ha afirmado. Su labor garantiza que los productos de origen animal, como carnes, leche o huevos, lleguen a la mesa "sanos, seguros y saludables", especialmente en Navidad, una época de "mucho trajín" y consumo. La presidenta ha insistido en que son una profesión "vital, porque nuestro trabajo es salvar vidas". Al hacer balance del año, Cristina Velasco ha calificado el 2025 como "muy complicado, un año muy complejo, de mucha reivindicación y mucha lucha”. El principal obstáculo, según ha denunciado, es un real decreto derivado de un reglamento europeo que "nos dificulta nuestra expresión como facultativos". Velasco ha descrito la situación como una "yincana de dificultades y de problemas y de inseguridades jurídicas" que les "maniata" y limita su criterio clínico para curar tanto a animales de producción como de compañía. Además de los retos normativos, la presidenta ha expresado su preocupación por el avance de enfermedades como la dermatosis nodular, un foco de peste porcina africana en Barcelona o el impacto de la gripe aviar en Madrid. Por ello, ha hecho un llamamiento a la conciencia global: "Necesitamos un poquito de atención y de mirada a la naturaleza y y ponernos en en el camino con ella para que todas estas pandemias se disipen". Con la vista puesta en el futuro, el sector tiene un objetivo claro para el próximo año. Cristina Velasco ha manifestado su esperanza de que en 2026 consigan "que se derogue ese Real Decreto 666 del año 23, que tantos quebraderos de cabeza nos está trayendo". La presidenta confía en que el nuevo año traiga "cosas buenas" para una profesión cuyo valor, a menudo, permanece oculto a los ojos de la sociedad.