Hastío, desencanto y desafección

Las tres marías de hogaño. Hastío de una clase política gobernante que ni escogida adrede podría ser peor; desencanto al percibir que cada día que pasa no hace sino empeorar las situaciones a las que debemos enfrentarnos; desafección por haber abandonado toda esperanza de que la política sea el noble ejercicio que permite progresar ordenadamente a la sociedad. Buen diagnóstico del Rey. Lógicamente, esa radiografía en 3D, no va a ser escuchada por quien, indudablemente, protagoniza la alocución real, el pavo engolado que preside su gobierno y que se ha cogido por banda dos semanas de vacaciones. Dos semanas. Dos semanas sin soportar su facundia hueca también es verdad que confiere un cierto alivio. Solamente los más emocionales aspiran a... Ver Más