Jesús, padre de Blanca, de 2 años, ingresada desde noviembre en el hospital donde pasa la Navidad: "Somos de Valladolid y como tiene más hermanos, nos hemos venido toda la familia"

El programa ''La Linterna' de COPE' se ha trasladado este 25 de diciembre al 'Hospital Infantil Niño Jesús' de Madrid para mostrar cómo se vive la Navidad entre pasillos, habitaciones y unidades de guardia. Con Rubén Corral al frente, el programa ha recogido el testimonio de sanitarios, pacientes y familiares, entre los que destaca la historia de Jesús, el padre de Blanca, una niña de casi dos años de Valladolid que lleva ingresada en el centro desde el pasado 5 de noviembre. Jesús ha relatado cómo su familia  llegó al Niño Jesús de Madrid desde Valladolid. "Nos derivaron porque vieron que el caso, incluso la paciente, eran especiales", explica. A pesar de la distancia, la familia decidió permanecer unida. "Como además  Blanca tiene hermanitos, hemos decidido venirnos todos, familia unida", cuenta Jesús. Esta decisión ha supuesto un desafío logístico mayúsculo, pero también una fuente de fortaleza. Para hacerlo posible, los abuelos se han trasladado para ayudar, mientras Jesús y su mujer teletrabajan haciendo "malabares para sacar del tiempo" y se turnan para cuidar de Blanca. La familia ha encontrado un piso cerca del hospital gracias a la ayuda de las trabajadoras sociales y a "mucha búsqueda". Los hermanos mayores de Blanca, de seis y cuatro años, también son un pilar fundamental. "Tiran mucho de ella, la animan mucho", comenta su padre, explicando que convierten la rehabilitación física en un juego. Aunque la Nochebuena no ha sido en Valladolid, la han pasado juntos, que era lo importante. Ahora, todas sus esperanzas están puestas en los Reyes Magos. "Creemos que si todo va bien, pues, ya sean en en Valladolid", afirma Jesús con ilusión. Ese es el gran deseo en su carta de Reyes. El reportaje de COPE también ha dado voz a los sanitarios que pasan estas fechas trabajando. Raquel Jiménez, jefa de sección de pediatría y responsable de la hospitalización domiciliaria, ha explicado que este servicio permite a muchos niños pasar la Navidad en casa. "El médico y la enfermera vamos a ver la casa", detalla, permitiendo administrar tratamientos como antibióticos intravenosos en el domicilio y mantener las rutinas familiares. Por su parte, Marta Pérez Somarriba, oncóloga pediátrica, ha señalado que en Navidad se intenta "que se queden ingresados el menor número de pacientes posible". Para los que no pueden irse, el hospital se esfuerza en "hacérselo pasar lo mejor posible" con actividades y visitas. Pérez Somarriba reconoce que, aunque es un reto, su trabajo es gratificante: "Hay que celebrar los éxitos y aprender de las de los momentos que no son tan buenos", reflexiona. María Paz Manzanares, supervisora general de enfermería durante la Nochebuena, ha descrito la noche como "dura por una parte, y bonita por otra". Dura por los momentos de tensión con pacientes graves, y bonita porque "consigues aportar ilusión y alegría". En estas fechas, el personal se centra en el "cuidado más psicológico" y el acompañamiento, siendo muy permisivos con las visitas de familiares porque "la gente necesita a su familia". El 25 de diciembre, el Hospital Niño Jesús presentaba una imagen de calma, con pasillos casi vacíos y una mezcla de decoración infantil y navideña. Una tranquilidad que contrastará con el ajetreo habitual cuando los pacientes que recibieron permisos especiales comiencen a reingresar. Una realidad que recuerda la dedicación de quienes, por trabajo o por enfermedad, pasan la Navidad lejos de sus hogares, pero rodeados de cuidados y esperanza.