No compro más Lotería en mi vida

Lunes. Ya no compro más Lotería. Dicho sea como propósito para el año que comienza. Nunca me toca. Menuda estafa. Otro año un montón de pasta tirada a la basura. Sumido en estos importantes pensamientos, me advierten de que tengo un reintegro de 20 euros. Algo es algo, me digo. Yo soy muy de decirme cosas. Sobre todo cuando voy a ingresar algún dinero. Tengo escasa habilidad para generar capital fuera de la nómina. Imagino que bajo ya a la Administración que hay cerca de mi casa y que los 20 euros vuelan como los vencejos o las golondrinas, que no sé yo cuál va más rápido. El ambiente en una redacción el 22 de diciembre siempre es entrañable, interesante, gritón y con churros. Se ve que hemos descartado el anís de otros años. Por los pantallones se va colando el soniquete de los niños de San Ildefonso. El resto del día tendrá como objetivo esquivar toda información sobre la Lotería. Es difícil pero las elecciones extremeñas aún dan juego.