Cuidar, ya es hora, con plena conciencia

Cuidar, ya es hora, con plena conciencia

Ayer me crucé con una amiga -empujando con sonrisa- y un amigo, la silla de ruedas de su madre. Y pensé, en el frío este por el que caminamos que, a la hora de la verdad, cuidar es lo que nos distingue. Detrás del ruido de la vida, que es mucho, nos amenaza con un revólver y nos dice: no se puede descansar, no se puede parar. ¿Y dónde queda ese tiempo para cuidar? Porque todos tenemos que hacerlo alguna vez.