
Vilma Fuentes: La luz de los faros
Mirar las telas de Cristina Rubalcava invita a un viaje con destino a la nostalgia más sonriente, la de los recuerdos sabrosos como una rumba o un danzón. Las figuras que bailan en su pintura evocan un México donde la vida nocturna chispea burbujas de champaña y la luz eléctrica se cuela entre los poros de la noche y su “diluvio de estrellas” cantado por Agustín Lara.