La Corte, con purificaciones y limpias

La Corte, con purificaciones y limpias

Registremos en nuestras memorias este primero de septiembre, porque será el día del inicio del fin de un Poder Judicial autónomo y mínimamente eficiente. La reforma judicial que entra en funciones hoy será, más allá de los perfiles de los ministros de la Suprema Corte, unos pocos preparados, otros oscuros y alguna impresentable, el primer acto de un diseño institucional que parte exactamente al revés de lo que se tenía que hacer en la justicia y que es el resultado de una suma de errores políticos, pero sobre todo de la debilidad de la presidenta Sheinbaum que no supo o no quiso parar un capricho político del expresidente López Obrador . Más de 800 funcionarios judiciales entrarán en funciones de aquí al 15 de septiembre, la mayoría sin conocimientos previos, sin capacitación, algunos han declarado que si ni siquiera les han informado donde despacharán o si tendrán personal, porque muchos de los que saben realmente cómo funcionan los juzgados, el verdadero personal de carrera que fue el más castigado con esta reforma, se ha ido o ha perdido el interés porque precisamente la reforma lo que ha hecho es cancelar la posibilidad de que puedan ascender por sus méritos, todo queda en manos de unos acordeones o de una tómbola. Son innumerables los funcionarios judiciales de alto y mediano nivel, incluso cercanos a la 4T, que están sorprendidos por la forma en que se decidieron las cosas y el desaseo existente en todo el proceso, incluyendo los muchos que estaban dispuestos a participar a los que se les advirtió que mejor no lo hicieran, porque sin apoyos externos más allá de su experiencia no podrían ganar. El gobierno federal puso a los suyos en la Corte, en el tribunal de disciplina y el administrativo (desde donde realmente se manejará el poder judicial), además de las instancias electorales federales, mientras que los gobernadores pusieron a la mayoría de los jueces y magistrados que les tocaban. Insisto, incluso gente capacitada y cercana a la 4T que no tenía protectores electorales poderosos quedó fuera de este cuadro donde se privilegió mucho más la política o el amiguismo que la capacidad. El viejo lema de 90 por ciento de lealtad y 10 por ciento de conocimientos, se volvió a imponer en esta administración, pero ahora permeando desde arriba hacia abajo a la estructura del Poder Judicial. Claro que el Poder Judicial necesitaba una reforma profunda, pero lo que se hizo fue desandar lo andado, destruir los avances que se tenían y no atacar, al contrario, se han profundizado los problemas que teníamos. Elegir por voto popular ministros, jueces y magistrados, para colmo en una elección despreciada por la ciudadanía, es un error cuyas consecuencias pagaremos muy caro con el tiempo: la justicia no es un concurso de popularidad, sino de capacidades. Para reformar la justicia no había que destruir la Corte, había que separar de ella el Consejo de la Judicatura y mejorar los procesos de elección a través de méritos. No había que destruir la carrera judicial: separando la Judicatura, se le tendría que haber impulsado con más fuerza y transparencia. No había que comenzar por lo federal, sino por la justicia local, la peor, la más corrompida, la menos transparente, la que más afecta a la ciudadanía. Con esta reforma se ha perdido la posibilidad de mejora porque ya no habrá estímulos para ello: el único mérito es entrar en el acordeón correcto, porque ni siquiera, como hemos visto, es necesario cubrir los requisitos establecidos por las propias autoridades para ser juez o magistrado. Pero al mismo tiempo, hacia abajo, en tribunales y juzgados el panorama es desolador, porque se ha roto, en más de la mitad de la estructura judicial, la cadena de mando que pasó a manos del poder político y los poderes fácticos que se impondrán en cada uno de los estados o regiones. El crimen organizado debe estar feliz. Lo que mal empieza, mal termina. El programa de instalación del nuevo Poder Judicial comenzará a las cinco de la mañana con un acto de purificación en las oficinas de la Corte, entiéndase como una limpia, un método científico y, por supuesto, legal para desalojar malos espíritus; seguido de una ceremonia de consagración de bastones de mando y servicio, acompañado de la purificación de los nuevos ministros en la zona arqueológica de Cuicuilco. Estos ritos, organizados en colaboración con chamanes de pueblos indígenas, ocuparán buena parte de las actividades antes de instalación formal, previo a ella habrá, dicen, un fandango popular. Perdón, con todo respeto: en los tiempos en los que la Iglesia no estaba separada del Estado, se hacían misas y te deums católicos, ahora purificamos instalaciones y ministros con ritos indígenas, lo que no deja de ser una forma religiosa de auparlos al poder. Lo único que les faltó fue regalarles el famoso detente de López Obrador para que así se protejan de la corrupción y los criminales (y de paso de cualquier enfermedad). Hasta las formas, tan necesarias en la impartición de justicia, hemos perdido en esta reforma que será la más costosa de todas las que nos impuso López Obrador . A ver cómo le explican al secretario de Estado, Marco Rubio , que llegará unas horas después, que vamos a combatir la criminalidad y hacer justicia con purificaciones y limpias. Columnista: Jorge Fernández Menéndez Imágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0

Día de la Presidenta

Día de la Presidenta

Este año se cumplieron dos siglos de que la persona encargada del Poder Ejecutivo en México rinde un informe anual sobre el estado de la administración pública, usualmente en la apertura de sesiones del Congreso. El primero en hacerlo, el 1 de enero de 1825, fue Guadalupe Victoria , quien lo pronunció en Palacio Nacional, que también alojaba al Legislativo, y en el que el primer presidente dijo que la nación recién independizada había “sufrido mucho para llegar al estado de tranquilidad en que hoy se halla”. Con el tiempo, el informe se convirtió en más que un acto de rendición de cuentas –o, mejor dicho, en algo distinto a eso–, pues el hecho de presentar el documento por escrito y pronunciar el discurso alusivo se convirtió en un homenaje a la Presidencia misma y, por supuesto, a quien la detentaba, dejando claro que el resto de las instituciones de la República se supeditaban a ella, sin consideraciones, por el equilibrio de Poderes. A partir de la promulgación de la Constitución de 1917, se volvió obligatorio presentar un informe anual cada 1 de septiembre, en el arranque del primer periodo ordinario de sesiones del año legislativo. El primero en hacerlo en esa modalidad fue Venustiano Carranza , quien aquella vez afirmó que la Carta Magna de Querétaro era “la única base segura para la paz y norma de mi conducta”. Mi infancia y adolescencia fueron marcadas por el ejercicio de adulación que se escenificaba cada 1 de septiembre, dentro y fuera del Congreso. Comenzaba con un recorrido del presidente en turno, en coche abierto, en el que miles de personas, alineadas en el trayecto, lo bañaban de confeti y le dedicaban porras. Ya en el recinto, los presentes interrumpían su discurso con aplausos. En 1974, Luis Echeverría pronunció un discurso de cuatro horas y fue aplaudido 104 veces, es decir, casi una vez cada dos minutos. Para un niño, el Día del Presidente era un suplicio, porque cualquier tipo de diversión pública estaba cancelada; era lo único que transmitía la televisión y, peor, marcaba el fin de las vacaciones de verano. Con la declinación del régimen de partido hegemónico del siglo pasado, esa parafernalia fue disminuyendo hasta que el mandatario ya no pudo pronunciar su discurso en el Palacio Legislativo y debió contentarse con mandarlo por escrito, aunque nunca ha dejado de haber una ceremonia al margen, como la que tendrá lugar este lunes. Hoy, por cierto, se cumplen 20 años de la última vez que el Ejecutivo leyó su mensaje desde la tribuna de San Lázaro. “Haciendo eco a lo expresado por muchos miembros de este Congreso, hoy se pone fin a un rito”, dijo el entonces presidente Vicente Fox , el 1 de septiembre de 2005. “Hoy se transforma el sentido de un acto en el que se compilaban y presentaban cifras favorables al gobierno, para lucimiento del presidente en turno”, agregó. La presencia del mandatario en la ceremonia dejaría así de ser obligatoria, siendo sustituida por la simple entrega del documento. Aun así, Fox fue impedido el año siguiente de protagonizar esa versión descafeinada del informe, pues los legisladores de izquierda le cerraron el acceso al salón de sesiones del Palacio Legislativo, como una manera de no reconocer la derrota de su candidato Andrés Manuel López Obrador en las elecciones presidenciales de 2006. Con el paso de estas dos décadas, el presidencialismo mexicano ha vuelto a florecer, matando con su sombra la división de Poderes, y ha reaparecido la lisonja para quien lo encarna. Por primera vez desde 1994, la persona que pronunciará el discurso del informe estará rodeada por Poderes enteramente sometidos a la voluntad del partido gobernante: mayorías calificadas en la Cámara de Diputados y el Senado, y una nueva Suprema Corte elegida en votación popular mediante una participación de sólo 13 por ciento –la más baja para una elección a nivel nacional en toda la historia—y prácticas cuestionadas, como el uso de acordeones. El oficialismo ha vuelto a tener todo el poder. Qué quiere hacer con él, además de concentrarlo y conservarlo, no está enteramente claro. Lo que sí, es que hoy no es sólo la primera vez que una mujer rinde el informe: hoy es Día de la Presidenta. Columnista: Pascal Beltrán del Río Imágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0

Soy un presidente en guerra…

Soy un presidente en guerra…

El título de esta columna es una frase que conmovió a la comunidad internacional y que tuvo la misma resonancia en el que redacta estas líneas. Vayamos a los antecedentes, primero del autor: Volodímir Zelenski . Como casi todo el mundo lo sabe, literalmente, es el presidente de Ucrania; según la página oficial de su oficina, es abogado egresado de la Universidad Nacional de Kiev. Desde los 17 años se dedicó al ambiente artístico interpretando papeles protagonistas en películas, programas de televisión y espectáculos humorísticos. La revista Time , en marzo de 2022, le realizó una entrevista e hizo un amplio reportaje, en éste menciona brevemente su carrera histriónica, pero hacen especial énfasis en el programa que la catapultó a lo que posteriormente lo convertiría en un líder de masas, se llamaba Servant of the People (El Sirviente de la Gente), en el cual interpretaba a un profesor de historia de preparatoria que se manifestaba en contra de la corrupción en cada uno de sus episodios. Es esto, como lo mencionaba, lo que lo posiciona para poder contender por el más alto cargo político de su país. Como es de todos conocido, el 24 de febrero de 2022 Rusia inició la invasión a gran escala de Ucrania, con lo que empezó una guerra que ha dejado una historia de pérdidas y destrucción. El diario El Independiente de Kiev publicó el 5 de febrero pasado, a tres años del inicio de la guerra, que tristemente el país había perdido 45,100 soldados y existían 390,000 heridos en batalla, de los cuales, la mayoría regresan al campo de acción. No obstante, existen datos no confirmadosde que el número oscila entre 73,000 y 140,000 soldados muertos. Por si los datos funestos no fueran suficientes, la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos registró el fallecimiento de 13,883 y 35,548 civiles heridos, en Ucrania. Del otro bando, la historia no es mejor, según datos no verificados, se menciona en distintos sitios que la cifra de soldados rusos muertos se estima entre 190,000 y 350,000; los heridos oscilan entre 6000,000 y 700,000. Otro número importante de considerar es el de efectivos por cada uno de los ejércitos, del ucraniano son alrededor de 1.320 millones, mientras que del ruso son aproximadamente 900 mil. En el momento del inicio de la invasión Zelenski fue requerido para evacuar la capital, situación a la que se negó rotundamente, no sólo eso, cambió de imagen y empezó a vestir con ropa de la milicia. Se dice que su estadía en la capital del país e imagen conformó el símbolo de resistencia nacional. Al inicio de la guerra, según la misma revista Time , se documentó que estuvo en el campo de batalla, situado en trincheras donde francotiradores habían matado a tres soldados ucranianos dos semanas antes. El presidente ucraniano ha mantenido su estilo austero y enfocado en lo que representa la defensa de su nación, lo que ha significado al interior de Ucrania una identificación con su máximo líder político. En febrero, Zelenski fue recibido en la Casa Blanca por su homólogo de los Estados Unidos, Donald Trump . La intención, se menciona en el ámbito internacional, era diversa: desde redefinir la relación bilateral entre ambos países tras el regreso de Trump al poder, discutir sobre al apoyo militar y financiero de Estados Unidos a Ucrania, hasta poner alto a la guerra, dado que el presidente estadunidense había ofrecido en campaña terminarla. Es en dicha reunión que Trump pregunta, en un tono sarcástico y con la intención de evidenciar la falta de solemnidad y formalidad que el propio presidente de EU consideraba debía tener para su oficina y la figura presidencial: ¿Acaso no tienes un traje? A lo que su interlocutor respondió: “Me pondré un traje de etiqueta cuando termine la guerra… No estoy jugando a las cartas… Soy un presidente en guerra”. Lo anterior, en la narrativa mundial, lo posicionó como un líder que priorizaba a su nación y su defensa sobre cualquier otro supuesto formalismo. Esperemos que las próximas conversaciones dirigidas a la obtención de un acuerdo de paz lleguen a buen puerto y esta lamentable e irracional guerra termine de una vez por todas, en ésta, como en toda clase de violencia, nadie gana y todos pierden. Columnista: Juan Jose Serrano Imágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0

Jude Law, sin miedo a Vladimir Putin

Jude Law, sin miedo a Vladimir Putin

Jorge Santamaría La imagen del presidente de Rusia, Vladimir Putin, está totalmente asociada con el miedo, la represión y las repercusiones, o ¿por qué lo primero que le preguntaron a Jude Law, encargado de interpretar al mandatario soviético en El mago del Kremlin habría sido si temió alguna reacción en su contra? No tuve miedo de ninguna repercusión”, dijo durante la conferencia de prensa dedicada al filme, cuya premier se vivió en la edición 82 del Festival Internacional de Cine de Venecia, “es decir, no lo digo ingenuamente, pero me sentí completamente seguro en las manos de Olivier Assayas, nuestro director, el libreto y el hecho de que la historia estaría siendo contada de forma inteligente, con diferentes matices y mucha consideración”, agregó. El mago del Kremlin narra cómo un productor televisivo, Vadim Baranov (personaje ficticio inspirado en Vladislav Surkov, un estratega clave en el gobierno de Putin e interpretado por Paul Dano), asciende como el asesor más importante del presidente Vladimir Putin, logrando moldear estrategias de poder para la campaña del mandatario. El libreto se trata de una adaptación de la novela del escritor italiano Giuliano da Empoli, quien también asistió a la alfombra roja en el encuentro cinematográfico canalero. Además de tener la presencia de Alicia Vikander, Tom Sturridge y Jeffrey Wright, entre otros actores rusos. No se trataba de buscar la controversia de la controversia sólo porque sí, es decir, es un personaje con mucha historia por detrás. Y realmente jamás fue nuestra intención determinar la personalidad o ideología de alguien”, redondeó el actor, de 52 años. Se trata de la primera vez que un actor interpreta al presidente Vladimir Putin para un proyecto del cine. Así que para lograr un parecido considerable con el político, Jude Law se sometió a una sesión de maquillaje, utilizó peluca y practicó muchas de las expresiones y ademanes del presidente ruso, sin olvidar la preparación de judo, pues el presidente era cinta negra y octavo dan de la especialidad (la Federación Internacional de Judo lo despojó en 2022 de sus títulos por la decisión de invadir Ucrania). Es increíble lo que puedes lograr con una peluca”, bromeó durante su intervención, “lo complicado para mi preparación fue que el rostro público que vemos de él en los medios de comunicación dice muy poco, así que hay un termino para él: El hombre sin rostro . Parece que usa una máscara, así que es comprensible que Olivier quisiera que yo interpretara escenas con cierta emoción, entrando en conflicto por intentar mostrar muy poco. Diría que se convirtió en una obsesión cada vez que intentaba buscar material reciente”, agregó. Putin no ha expresado opinión alguna sobre este filme, en cambio, un portavoz del Kremlin sí lo hizo: “Él es uno de los dirigentes más experimentados del planeta. Difícilmente podemos sobreestimar su influencia en los asuntos internacionales, así que es bastante natural que varios países del mundo se interesen en él”. Assayas también estuvo presente en la rueda de prensa, un poco más discreto, pero ayudando a Jude Law en la explicación de quién es Vladimir Putin y qué es lo que representan en este largometraje esperado en Venecia. Necesitaba a un actor que entendiera la complejidad y los matices del personaje, que tuviera la libre opción de recrear desde dentro una parte lo que creyera que es Vladimir Putin”, intervino el cineasta francés, quien hace su debut en un filme de habla inglesa. Naturalmente vinieron las preguntas más políticas por parte de los reporteros, sobre todo porque recientemente se cumplieron los tres años de la invasión a Ucrania. ¿Crees que Rusia es el líder mundial actualmente? No, es decir, entiendo la pregunta, porque la película trata en gran medida sobre cómo se inventó la política moderna del siglo XXI, y parte de ese mal surgió a partir del ascenso de Vladimir Putin en Rusia. Todo cambió radicalmente, especialmente para las personas de mi generación (tiene 70 años). Lo que está pasando ahorita es aterrador, en especial porque no hay una respuesta concreta para entender todo lo que sucede”, agregó Olivier. Sablazo a Trump Wright, fiel a su discurso siempre contestatario, opinó que la película le hizo comparar la situación rusa con lo sucedido en Estados Unidos y también entrar en alerta sobre los peligros del autoritarismo contemporáneo. Aunque jamás dijo el nombre del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, Jeffrey Wright ha criticado el accionar del líder republicano y en una ocasión lo comparó con el ya fallecido ocultista y asesino serial Charles Manson. Hemos tenido impulsos hacia el fascismo, la autocracia y todo tipo de pecados. Pero lo que también hemos tenido, desde el principio, incluso dentro del marco de los pecados originales de Estados Unidos y lo grotesco, fue la idea de que podíamos ser mejores y aspirar a algún tipo de perfección utópica. Si eso se pierde, como pasa actualmente, entonces nos convertimos en lo que vemos en esta película”, dijo. Con información de AFP Aquí podrás acceder a noticias en tiempo real Conoce lo más viral en Facebook Trending Lee a los columnistas de Excélsior Opinión clm Contenidos Relacionados: Jude Law, sobreviviente de Star Wars; hoy habrá dos episodios disponibles Jude Law utilizó 'perfume putrefacto' para interpretar al rey Enrique VIII Filtran el personaje de Jude Law en la serie Skeleton Crew

El dato clave del Informe

El dato clave del Informe

En el primer Informe de Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum , habrá cifras, láminas y balances. Pero el dato clave del día no estará en el atril por elemental decoro republicano: 75% de aprobación, según el promedio de encuestas de PollsMX. No es solo una cifra: es capital político. Resume capacidad de gobierno, margen de negociación y poder de relato para el segundo año. En la 4T, escuchar no es cortesía: es método y mandato. Encuestas, consultas, censos y monitoreo territorial operan como brújula de prioridades. Por eso la aprobación funciona como permiso social para avanzar: convierte el “qué quiere la gente” en plan de gobierno. El contexto internacional ayuda a dimensionar el dato. En el seguimiento global de Morning Consult (agosto), Sheinbaum se ubica en el tercio alto de aprobación: por encima de Donald Trump (47%), Lula da Silva (46%), Pedro Sánchez (34%), Keir Starmer (27%) o Emmanuel Macron (17%), y sólo por debajo del grupo puntero encabezado por Narendra Modi y Nayib Bukele . En un mundo donde la media se mueve entre 30 y 40%, sostener niveles tan altos es una rareza con efectos políticos. En México, además, la vara se mantiene elevada desde 2018, (mal)acostumbrándonos a niveles de aprobación atípicamente altos. Aun así, llegar al Informe con 75% importa por dos razones sencillas: mandato y disciplina. Mandato, porque la aprobación no solo mide humor: habilita decisiones complejas siempre que se traduzcan en beneficios medibles (seguridad que se siente, empleos bien pagados, servicios que funcionan). Disciplina, porque si una estrategia sostiene un respaldo tan alto, no se improvisa: se cuida el rumbo y se blinda la gobernabilidad. ¿Qué explica ese nivel? Ejecución con método y marco claro. La promesa de prosperidad compartida se articula hoy como “cooperación sin subordinación” en un entorno global de proteccionismo comercial y riesgos de seguridad. Cuando la coyuntura aprieta (tan solo la semana del 25 al 31 de agosto, la declaración de culpabilidad de Ismael El Mayo Zambada y la pelea viral entre dos senadores), la respuesta ha sido regresar al núcleo estratégico y sostenerlo. Esa consistencia —más que la ocurrencia— estabiliza percepciones. La cifra no debería —ni necesita— convertirse en eslogan durante el acto protocolario. Pero conviene registrar la señal: con 75%, el gobierno tiene espacio para ejecutar y, a la vez, la obligación de convertir aprobación en experiencia ciudadana: medicamentos en hospitales, educación de calidad, trámites más simples, certeza en precios y tarifas. Las tres pruebas inmediatas para renovar ese capital son obvias: seguridad que se percibe en las colonias, empleos bien pagados y una agenda con EU que preserve el comercio y la cooperación sin ceder soberanía. Para quien mira la política como si fuera mercado, piense en esto como un diferencial de liderazgo: en un tablero de mandatarios con 30–40% de respaldo, una presidenta en el tercio alto global y con mayoría amplia en casa atrae aliados, forma coaliciones y ordena la conversación. Si ese diferencial se sigue invirtiendo en resultados tangibles, el capital se renovará; si no, se depreciará. La presidenta Sheinbaum tiene claro que el momento clave de rendición de cuentas será la aduana electoral de 2027, que incluye un ejercicio de revocación de mandato y la renovación de la Cámara de Diputados. Llegar a ese momento con una aprobación superior al 70% puede hacer toda la diferencia. Mientras tanto, el dato manda, y hoy dice que Sheinbaum llega más fuerte a su Informe que cualquiera de sus antecesores. ¿Cuál es la tarea pendiente? Pasar del dato al resultado sin perder el oído en la gente. Ahí donde la comunicación deja de ser estética y se vuelve política; ahí donde las encuestas —bien usadas— no son aplauso, sino brújula. Columnista: gustavo.rivera Imágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0

La porra del porro

La porra del porro

La política mexicana se noroñizó, se acorrientó, se vulgarizó. El bufonesco personaje es tan sólo la punta de un enorme iceberg que flota en el mar de incompetencia en el que se está ahogando la nación. No llegó por méritos, ni por una trayectoria política, se agandalló un puesto, simple y sencillamente, porque el macuspano repartió dignidades como si fueran suyas, dando premios de consolación a quienes no tuvieran la “dicha” de ser ungidos para ser su tapadera. No es que fuera mejor, sino que el doble AA y Monreal son menos que él, en el gusto de la turba, del populacho, ese que aplaude a quienes no representan otra cosa que al crimen organizado, el cual, lamentablemente, controla las mayorías, bien, a billetazos, o teniéndolas contra la pared a punta de pistola; cobro de piso, y dominio territorial. Hace rato que las elecciones son una grotesca farsa, el organismo electoral fue encabezado durante años por ingenuos personajes que aún piensan que alguna transparencia o confiabilidad rindieron, cuando es claro que la feria de las actas se controló por las mafias del poder. Hoy, los que llegaron de la mano de los distintos cárteles lo saben, y, por eso, estiman que es urgente el hacer cirugía mayor, impidiendo que algún cartel rival les gane la partida. La estulticia de la oposición impidió reprobar a Noroña quien, en abierto conflicto de interés, convocó a una reunión para discutir un asunto propio que, evidentemente, no es competencia de la Permanente, menos aún, se encuentra en el catálogo de las causales de desafuero. No fue la primera vez, sino la enésima, que uso la cobarde e indecente práctica de abalanzarse sobre su interlocutor, profiriendo todo tipo de improperios. Pero, al empujar, ahora se la voltearon. Es claro que fue el instigador, el provocador, el origen de los empujones. En cualquier estado de derecho eso convierte al triste evento en una riña. Una más, de las que protagonizó diciendo que es un luchador social, claro, sin causa, ya que insultar y denostar no lo es. No sólo escupe al que tiene enfrente, sino que suele dar puntapiés y rodillazos a quienes le cuestionan, para quitárselos de encima, salvo si le aventajan en talla, como aquellos luchadores profesionales, a los cuales rehuyó. Lastimó a funcionarios, legisladores, policías y a cuanto sujeto tuvo el infortunio de estar a su paso. Si es capo, o no, en Tepoztlán, o sólo un invasor más, ya se sabrá. El guarro de verde que tiene en nómina dio el alto, pero no el ancho. Terminó en el piso, a donde seguro antes se arrastró para lograr un bien pagado puesto, que consiste en cargar un joystick. Deben tener cuidado al atacar, ya que recordamos que ellos, a diferencia de Castro , Ortega , Chávez y Maduro , no provienen de una insurrección militar, sino de un movimiento porril, de una gresca en la que los holgazanes hicieron a las autoridades universitarias plegarse a sus caprichos, obteniendo, sin pagar, ni estudiar, licenciaturas y no sé qué más privilegios. Es falso que en México existieran políticos de izquierda, sólo hubo fallidos aspirantes que no lograban acomodarse en la burocracia dorada, tan es así, que, al llegar al poder, los seudo comunistas rápidamente muestran el cobre, haciendo, vistiendo y derrochando como el más facho de los fachos, porque en realidad es lo que son, autoritarios e irrespetuosos de las leyes y del derecho, los cuales, para nuestra desgracia, han abolido. Solo con el sucio apoyo del narco alcanzaron la ansiada meta. Se acabó el tiempo y el dinero. Hoy, no debe la residenta informarnos que imagina haber hecho, sino qué piensa hacer en la enorme crisis que toca a la puerta de los mexicanos. Columnista: Gabriel Reyes Orona Imágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0

La democracia está en crisis

La democracia está en crisis

No es una novedad en el mundo que las repúblicas democráticas fallen y tengan que evolucionar a otras formas de gobierno hasta regresar para volverse a descomponer. Pero es quizá momento de aprender qué limites deben imponerse a la libertad y a la democracia. Para ello, siempre es importante volver a ciertas preguntas esenciales que hay que recordar. ¿Para qué se inventó el Estado? La respuesta es para la protección de los individuos y familias, tanto de otros grupos como de individuos, desde el mismo grupo. Para ello se han probado a lo largo de miles de años distintas maneras de gobernar. Nadie sabe cuál es la mejor, pero como dijo Churchill , ésta puede ser la menos mala. Discrepo, creo que al señor Churchill le faltó conocer a los partidos políticos hispanoamericanos y a sus líderes, tal vez hubiera cambiado de opinión. La democracia moderna se ha basado en tres principios fundamentales, la igualdad de los individuos ante la ley y la de la tolerancia y protección a las minorías. El problema que ha surgido bajo esto es que se deja la cancha libre para plantear la batalla política, donde, sin duda, el tramposo tiene las de ganar. El sistema abierto y sin restricciones de la democracia actual permite la competencia entre una persona honesta y honorable contra una que engaña, usa recursos de dudosa procedencia y fuera de la ley, inventa problemas y enemigos porque el fondo es ganar el puesto. Entonces, tener a las mejores personas haciendo un sacrificio personal para conducir al Estado ya no es una realidad. Bajo esta tesitura, ¿es el mejor camino? Durante el último cónclave, que siempre es muy interesante, alguien preguntó en X ¿estaremos viendo la mejor manera de formar un Estado? Tienes a 133 hombres, casi todos con doctorado en teología, derecho o filosofía escogiendo al mejor líder, ¿hace más sentido al garantizar la selección de los mejores? Me pareció interesante la reflexión porque no es menor. ¿Hoy la política en el mundo tiene a los mejores miembros de la sociedad? No. De hecho, hay una crisis en los partidos para atraer jóvenes a la política. Diego Fernández de Cevallos ha sido muy enfático en pedir más participación a los jóvenes de bien. Pero el actual estado de la democracia en México y el mundo ha generado pantanos donde ya pocos quieren meterse. O te comes o te manchas. Aristóteles en su obra Política habla y describe las distintas formas puras de gobierno que existían hace dos mil quinientos años. La monarquía, que es cuando una persona actúa en beneficio de todos, es idónea cuando el monarca es una persona justa y virtuosa. La aristocracia, que es el gobierno de pocos, selectos por sus virtudes y capacidades para gobernar al resto, es ideal en un sistema meritocrático. La Politeia o república, donde todos participan vía democráticamente, es idónea en una sociedad que trabaja para el bien de todos y no de un grupo. Pero también Aristóteles identificó que estas tres formas de gobierno se pueden corromper descomponiendo su objetivo y esencia. La historia le dio la razón; la monarquía corrompida se convierte en tiranía ( Marco Aurelio vs . Cómodo ), la aristocracia corrupta de vuelve en una oligarquía (muchas dinastías europeas) y la democracia cuando se corrompe se convierte en Politeia corrupta o demagogia (Venezuela y Nicaragua). Hoy todos salimos a defender la democracia como un ideal, pero paramos poco para saber si estamos frente a una Politeia corrupta y si no vale la pena reestructurar nuestro sistema para poner restricciones de entrada y de operación a los políticos actuales, que garantice el gobierno de los mejores. Ya se ha hecho en otras formas de gobierno. Las monarquías básicamente han desaparecido y las que existen en Occidente tienen restricciones que fueron contramedidas para evitar que la forma pura se convirtiera en corrupta. ¿Nos gobiernan los mejores? ¿Deben tener derecho de votar o ser votados todos los ciudadanos por igual? ¿Debería haber requisitos mínimos de formación y educación para votar y ser votado? ¿Deben tener derecho a voto quienes más se benefician del Estado en términos de recursos? ¿No es esto un conflicto de interés? En mi opinión el mundo está en plena Politeia corrupta. Columnista: Luis F. Lozano Olivares Imágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0