Pedro Sánchez felicita a Rosalía por su nuevo disco: «Has colocado a España en la cima de la música mundial»

Pedro Sánchez felicita a Rosalía por su nuevo disco: «Has colocado a España en la cima de la música mundial»

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , ha felicitado este domingo por la tarde a la cantante Rosalía por el «deslumbrante lanzamiento» de su nuevo disco, 'Lux', a través de redes sociales. Estas palabras llegan después de que la crítica tanto nacional como internacional se haya rendido al nuevo trabajo de la artista catalana. «Has colocado a España en la cima de la música mundial con el debut más exitoso de una artista hispanohablante femenina en Spotify, llegando a ser ayer la tercera artista más escuchada de toda la plataforma», ha escrito el líder del Ejecutivo en su perfil de X, antes Twitter. La cantante de San Esteban Sasroviras publicó 'Berghain' , el sencillo principal del álbum 'Lux', el pasado 27 de octubre como adelanto del disco. En la canción, Rosalía, que arranca al más puro estilo soprano, cuenta con la colaboración de la islandesa Björk y del productor estadounidense de música electrónica experimental Yves Tumor. Una semana antes la música catalana anunció el lanzamiento de 'Lux' para el 7 de noviembre con una aparición por sorpresa en la madrileña plaza de Callao. Sin embargo, 48 antes de la publicación del disco, las canciones se filtraron a través de redes sociales . El nuevo álbum está profundamente inspirado en la mística femeninia, y la artista no dudo en hablar de Dios y de espiritualidad de manera central y explícita. Para ello, emplea 13 idiomas : español, catalán, inglés, latín, siciliano, portugués, francés, ucraniano, árabe, mandarín, alemán, hebreo y japonés.

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Algunas cadenas de supermercados ya han empezado a buscar espacios en sus tiendas para colocar las futuras máquinas de depósito o para habilitar zonas de almacenamiento. Y los fabricantes de refrescos, que van a ser los primeros afectados por la nueva normativa, trabajan en nuevas etiquetas, en el desarrollo de materiales más sostenibles "y en campañas informativas para la ciudadanía, porque van a ser ellos, los consumidores, quienes deberán aprender que determinados envases van a poder retornarse al supermercado, como alternativa al contenedor amarillo", explica Beatriz Blasco, directora general de la Asociación de Fabricantes de Bebidas Refrescantes (Anfabra). La implantación en noviembre de 2026 del nuevo sistema de devolución, depósito y retorno de envases, el bautizado con las siglas SDDR, lleva de bólido al sector de la alimentación, que estima que, solo de entrada, le va a suponer una inversión de entre 400 y 600 millones de euros.

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Algunas cadenas de supermercados ya han empezado a buscar espacios en sus tiendas para colocar las futuras máquinas de depósito o para habilitar zonas de almacenamiento. Y los fabricantes de refrescos, que van a ser los primeros afectados por la nueva normativa, trabajan en nuevas etiquetas, en el desarrollo de materiales más sostenibles "y en campañas informativas para la ciudadanía, porque van a ser ellos, los consumidores, quienes deberán aprender que determinados envases van a poder retornarse al supermercado, como alternativa al contenedor amarillo", explica Beatriz Blasco, directora general de la Asociación de Fabricantes de Bebidas Refrescantes (Anfabra). La implantación en noviembre de 2026 del nuevo sistema de devolución, depósito y retorno de envases, el bautizado con las siglas SDDR, lleva de bólido al sector de la alimentación, que estima que, solo de entrada, le va a suponer una inversión de entre 400 y 600 millones de euros.

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Algunas cadenas de supermercados ya han empezado a buscar espacios en sus tiendas para colocar las futuras máquinas de depósito o para habilitar zonas de almacenamiento. Y los fabricantes de refrescos, que van a ser los primeros afectados por la nueva normativa, trabajan en nuevas etiquetas, en el desarrollo de materiales más sostenibles "y en campañas informativas para la ciudadanía, porque van a ser ellos, los consumidores, quienes deberán aprender que determinados envases van a poder retornarse al supermercado, como alternativa al contenedor amarillo", explica Beatriz Blasco, directora general de la Asociación de Fabricantes de Bebidas Refrescantes (Anfabra). La implantación en noviembre de 2026 del nuevo sistema de devolución, depósito y retorno de envases, el bautizado con las siglas SDDR, lleva de bólido al sector de la alimentación, que estima que, solo de entrada, le va a suponer una inversión de entre 400 y 600 millones de euros.

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Algunas cadenas de supermercados ya han empezado a buscar espacios en sus tiendas para colocar las futuras máquinas de depósito o para habilitar zonas de almacenamiento. Y los fabricantes de refrescos, que van a ser los primeros afectados por la nueva normativa, trabajan en nuevas etiquetas, en el desarrollo de materiales más sostenibles "y en campañas informativas para la ciudadanía, porque van a ser ellos, los consumidores, quienes deberán aprender que determinados envases van a poder retornarse al supermercado, como alternativa al contenedor amarillo", explica Beatriz Blasco, directora general de la Asociación de Fabricantes de Bebidas Refrescantes (Anfabra). La implantación en noviembre de 2026 del nuevo sistema de devolución, depósito y retorno de envases, el bautizado con las siglas SDDR, lleva de bólido al sector de la alimentación, que estima que, solo de entrada, le va a suponer una inversión de entre 400 y 600 millones de euros.

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Algunas cadenas de supermercados ya han empezado a buscar espacios en sus tiendas para colocar las futuras máquinas de depósito o para habilitar zonas de almacenamiento. Y los fabricantes de refrescos, que van a ser los primeros afectados por la nueva normativa, trabajan en nuevas etiquetas, en el desarrollo de materiales más sostenibles "y en campañas informativas para la ciudadanía, porque van a ser ellos, los consumidores, quienes deberán aprender que determinados envases van a poder retornarse al supermercado, como alternativa al contenedor amarillo", explica Beatriz Blasco, directora general de la Asociación de Fabricantes de Bebidas Refrescantes (Anfabra). La implantación en noviembre de 2026 del nuevo sistema de devolución, depósito y retorno de envases, el bautizado con las siglas SDDR, lleva de bólido al sector de la alimentación, que estima que, solo de entrada, le va a suponer una inversión de entre 400 y 600 millones de euros.

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Fabricantes y supermercados prevén un gasto extra de 600 millones por el sistema que les obligará a almacenar los envases usados

Algunas cadenas de supermercados ya han empezado a buscar espacios en sus tiendas para colocar las futuras máquinas de depósito o para habilitar zonas de almacenamiento. Y los fabricantes de refrescos, que van a ser los primeros afectados por la nueva normativa, trabajan en nuevas etiquetas, en el desarrollo de materiales más sostenibles "y en campañas informativas para la ciudadanía, porque van a ser ellos, los consumidores, quienes deberán aprender que determinados envases van a poder retornarse al supermercado, como alternativa al contenedor amarillo", explica Beatriz Blasco, directora general de la Asociación de Fabricantes de Bebidas Refrescantes (Anfabra). La implantación en noviembre de 2026 del nuevo sistema de devolución, depósito y retorno de envases, el bautizado con las siglas SDDR, lleva de bólido al sector de la alimentación, que estima que, solo de entrada, le va a suponer una inversión de entre 400 y 600 millones de euros.