Recomendar un libro de viajes: Roma, destino y espejo del alma
Recomendar un libro de viajes es una tarea peligrosa, casi un acto de fe. No es lo mismo aconsejar a quien viaja por primera vez que a quien ya ha hecho del viaje un modo de estar en el mundo. Las ciudades tienen múltiples rostros, y el libro que ilumina a unos puede extraviar a otros. Cada viajero lleva consigo un mapa invisible: sus lecturas previas, sus carencias, su educación estética, sus heridas, su curiosidad. Por eso, cuando alguien me pregunta qué debería leer antes de viajar a Roma, dudo, titubeo, incluso me incomodo. Recomendar un libro de viajes -sobre todo si el destino es Roma-equivale a ofrecer un espejo, sabiendo que el reflejo dependerá tanto del cristal como de... Ver Más