Navidad: tradiciones heredadas y nuevos ritos creados en casa

Navidad: tradiciones heredadas y nuevos ritos creados en casa

En casa siempre hemos celebrado la Epifanía por encima de cualquier otro advenimiento o entrega de regalos y presentes en Navidad. Como dice mi hijo: «somos muy fans de los Reyes Magos». Es una tradición que, tanto el Hombre del Renacimiento como yo, mantenemos desde la infancia y tratamos de arraigar en nuestra familia. Sin embargo, en los últimos años, adaptándonos a los nuevos tiempos y a los deseos de nuestros pequeños, aprovechamos la llegada de Santa Claus para sorprendernos con algún pequeño detalle.

La guerra de los Strauss

La guerra de los Strauss

La preocupación familiar cuando uno de los hijos anuncia que quiere dedicarse a la música no es algo de aquí y de ahora. Ha ocurrido en todas las épocas y en las mejores familias, incluso en las musicales, preocupadas por la supervivencia de sus vástagos. Cuando el hijo abandona una idea tan descabellada, todos felices. Pero si la cabezonería, o el amor por la música, es superior, solo queda la aceptación o el enfrentamiento. Hoy y por estas fechas tan próximas al tradicional Concierto de Año Nuevo les voy a hablar de la disputa que mantuvieron por este motivo los miembros de la familia musical vienesa por excelencia: los Strauss.

‘El extranjero’

‘El extranjero’

Estética y elegante adaptación de la novela homónima de Albert Camus. Lo fácil sería comparar. Sin embargo, cada texto (literario/cinematográfico) posee vida propia. François Ozon, director con una filmografía tan extensa como ecléctica, penetra sin miedo en el absurdo de ese personaje hierático y escéptico que no encuentra otra razón para justificar su asesinato que los efectos de las altas temperaturas. La muerte del otro, de un árabe, por parte de un francés en la Argelia de los años treinta, un tipo que nos recuerda al Ripley de Patricia Highsmith, interpretado por Benjamin Voisin -que parece recién salido de una película de Robert Bresson-, desde el comienzo del filme se presenta como alguien fuera de lugar, alguien a quien aparentemente no afecta ni siquiera la muerte de su madre, incapaz de mostrar sentimiento alguno, tampoco ante la mujer con quien mantiene una relación amorosa (encarnada en la magnética Rebecca Marder), podría representar lo inexplicable, incluso para quienes no pueden entender lo ocurrido durante el juicio a que se verá abocado. El silencio será fundamental en la personalidad del personaje, infranqueable. Ni siquiera cuando la vida está en juego. Solo saltará como un resorte ante la presencia del sacerdote que acude a su celda para prestarle asistencia cuando se acerque su final.

Tras ‘3 de 40’

Tras ‘3 de 40’

O sea, tras asistir a la obra de teatro 3 de 40. Tengo que reconocer que hacía mucho tiempo que no veía una obra de teatro teatro. Sólo había tenido la mala fortuna y el mal gasto de tiempo, expectativas y dinero, de encontrarme con sucedáneos espurios. Pero tras asistir a 3 de 40, he satisfecho, por fin, esa necesidad. Porque el texto, de Paco Rodríguez Orozco, es una auténtica lección de cómo se construye un drama, conflicto tras conflicto, clímax tras clímax, generándose, resolviéndose, volviéndose a generar, hasta el todo definitivo, cuando el espectador se queda absorto ante qué giro conclusivo va a tener la historia, gracias al excelente equilibrio entre lo dramático, lo trágico y lo cómico que se logra con la interpretación de tres actrices plenas: Gema Jiménez (Pepa), Carmen Fierro (Reme) y Cristina Marabotto (Lola). Estas mujeres, palabra a palabra, tensión a tensión, escena a escena, realizan el prodigio de poner en vivo, y al nivel del público, una historia que, en apariencia, sólo serían letras, palabras, renglones en unos cuantos folios; darle volumen existencial a lo que, sobre un papel, parecería nada. El reparto de la acción está muy equilibrado: cada personaje y su historia son protagonistas en su drama y, al mismo tiempo, las tres actrices se pasan el protagonismo, apoyando y realzando el de las otras dos. Hay escenas que parecen un monólogo, como si sólo existiese esa historia, como si fuese una obra de teatro en sí misma; otras escenas están montadas en una forma coral, tan activa, que las tres actrices se multiplicaran mucho más allá que esas tres mujeres. Es prodigioso comprobar, minuto a minuto de la obra, con qué pocos elementos se puede construir un teatro total de tres vidas, en su pasado, su presente y su futuro, ahora, que tan sometidos nos tienen a los deslumbrantes recursos escénicos. Autor, actrices… y el tercer apoyo de la obra: escenografía y dirección a cargo de Francisco García Torrado. El sello tan personal de este actor, profesor, director es inconfundible, porque nos muestra otra característica de la obra de arte: su enraizamiento en el alma de lo popular, el habla, las esencias, las tradiciones de un colectivo humano. Y no me refiero a lo popular localista, sino a lo popular universal, que trasciende más allá de un lugar y un tiempo. Pero falta el cuarto apoyo. Escritor, actrices, director han cumplido con su cometido, ¡y bien que han cumplido!: ¡el inmenso trabajo de vocación teatral que sostiene esta obra! El apoyo que falta es el de los organismos públicos, que no aprovechen tanto esfuerzo, y que esta obra no se represente más. Sería un buen regalo para estas fiestas. Pero…

Cartagena Negra convoca el III premio Philip Marlowe

Cartagena Negra convoca el III premio Philip Marlowe

Cartagena Negra, las Jornadas de Literatura Negra, Policiaca y de Misterio, ha convocado la III edición del premio de novela Marlowe, un galardón que pone en marcha en marcha junto a la editorial Dokusou, que pertenece al grupo Quiero Ese Libro, y con quien ha firmado un convenio de colaboración. La iniciativa, que cuenta con el impulso del Ayuntamiento de Cartagena, dará la posibilidad al autor de la obra ganadora de publicar su propuesta, y se le entregará un premio dotado con 500 euros.

Evelyn Piñero: música como herencia

Evelyn Piñero: música como herencia

Los recuerdos musicales de Evve se tejen a través de las canciones en cintas de cassette que evocan y celebran el amor incondicional y la gratitud, creando vínculos eternos. La música como lenguaje universal convierte instantes cotidianos en tesoros imborrables; este no es sino el resultado de cantar junto a su madre desde muy chiquitita las canciones que sonaban en la radio. Una aliada, la radio, que acompaña a la nueva miembro de mi banda hasta el día de hoy.

Utilitarismo

Utilitarismo

Thorndike habla de un experimento hecho en 1934, en el que se pedía a voluntarios, unos empleados y otros no, por qué cifra mínima harían algo desagradable o sufrirían cierto daño. 51 cuestiones variadas, que iban desde estar un año sin probar el azúcar, el tabaco, el alcohol y la cafeína, a comerse un gusano vivo de quince centímetros, escupir en un crucifijo, dejarse arrancar un incisivo superior o comerse 115 gramos de carne humana cocinada, tanto a escondidas (36) como anunciándolo en la primera página de un periódico de Nueva York (37). La gente con empleo pedía verdaderas barbaridades. La gente sin empleo sopesaba seriamente la ganancia. Si han leído Los Miserables recientemente, recordarán que Fantina vendía los incisivos por un napoleón de oro cada uno. La gente que no lo necesita deja de hacer las cosas que no la hacen feliz, y la que sí lo necesita va poniéndole precio a las cosas, según su necesidad y su cabeza. Los hay que pagan por hacer lo que otros sólo harían cobrando, pero en general, a partir de ciertos niveles de incomodidad, somos como un cacharrito de Falgas, que para que se mueva hay que echarle una moneda. Esta cosa utilitarista -¿me vale más el dinero que el daño?- la usan los políticos para tragarse su sapo diario y seguir gobernando, las actrices de Onlyfans, los carteristas que debaten en el pasillo del juzgado, las familias que comparamos precios y nutriescores y los seguidores de Jeremy Bentham, que dio con algunas teclas, aunque también dispuso, y le hicieron caso, que a su esqueleto le pusieran una réplica de cera de su cabeza, lo vistieran y lo expusieran en su universidad. Allí sigue.

Los futuros hoteles que se construirán en Córdoba acercarán la oferta a las 9.000 plazas

Los futuros hoteles que se construirán en Córdoba acercarán la oferta a las 9.000 plazas

Córdoba capital cuenta, según la última Encuesta de ocupación hotelera del Instituto Nacional de Estadística (INE), con 83 hoteles, que suman más de 3.800 habitaciones y arrojan cerca de 8.000 plazas a la oferta turística de la ciudad. Esa oferta podrá verse incrementada en los próximos años con unas 1.200 plazas más de cuajar los proyectos en cartera (y de mantenerse los establecimientos actuales), lo que llevaría la disponibilidad en torno a las 9.000.