Un derbi de máxima exigencia para despedir el año en Son Moix

Un derbi de máxima exigencia para despedir el año en Son Moix

El mejor partido posible para abrochar un año especial. El Palau d'Esports de Son Moix acogerá este domingo (12.00 horas) un derbi capital, un partido de alto voltaje que cruzará, por primera vez en la segunda planta del baloncesto español, los caminos de Fibwi Mallorca y Palmer Basket. Un duelo de máxima exigencia para levantar los pies del suelo. Porque si los de Pablo Cano necesitan volver a ganar para reforzar su discurso y mantenerse en el vagón de cabeza, los de Juan Ignacio Díez de Acharán están obligados a hacerlo para suavizar su volcánico inicio de temporada y creer otra vez en si mismos.

Albatera celebra los 375 años de la hermandad de su patrona

Albatera celebra los 375 años de la hermandad de su patrona

La Hermandad de la Santísima Virgen del Rosario de Albatera celebra 375 años con unos actos conmemorativos que arrancan este domingo con una solemne eucaristía en la ermita de la Virgen del Rosario, en la que se celebrará también el 50 aniversario de la bendición de la ermita, que tuvo lugar el 28 de diciembre de 1975 por el entonces obispo Pablo Barrachina, tras el traslado definitivo de la imagen.

Suspenden el espectáculo de Navigalia este sábado por las lluvias y tormenta previstas sobre Sevilla

Suspenden el espectáculo de Navigalia este sábado por las lluvias y tormenta previstas sobre Sevilla

El Ayuntamiento de Sevilla ha suspendido las sesiones previstas para la tarde de este sábado del espectáculo audiovisual navideño Navigalia, a cuenta del aviso de tormentas y lluvia intensa previsto para la jornada. De este modo, y ante las adversidades meteorológicas, el Consistorio ha cancelado las sesiones previstas de este popular espectáculo navideño, que estaba previsto para las 18.45, 19.40, 20.35, 21.30 y 22.25 horas; y que continúa el resto de la Navidad. El evento, titulado Misión Regalo y de 23 minutos de duración, proyecta imágenes de aspectos relacionados con Sevilla como personajes ilustres de la ciudad, como Bécquer, Velazquez, La Roldana o Rodrigo de Triana; siendo posible admirarlo desde el Muelle de la Sal. Los usuarios que reservaron entradas para este día verán devueltos los 2 euros de sus entradas.

Cuento de Navidad

Cuento de Navidad

El domingo 21 comenzó oficialmente el invierno astronómico . Qué frío hacía ese día en Madrid. Caía del cielo aguanieve cuando volvía conduciendo del hotel en el que están alojadas cuatro personas con quienes había tomado el aperitivo en mi barrio, al que regresaba. Iba en un coche de una amiga y vecina, que me lo presta en las ocasiones en las que el transporte público, que es el que uso por defecto junto a mis piernas, no es una opción factible. Llevaba una sillita de seguridad y un alzador instalados detrás; una segunda sillita, que es un trasto enorme, la desmonté y guardé previamente en casa porque sobraba para ese viaje. Mis pasajeras –una adulta y tres niñas entre 4 y 9 años– y yo no nos podíamos comunicar más que con gestos, sonrisas y caricias . Solo se escuchaba la voz, también femenina, del navegador. Veníamos las cinco de tomar un aperitivo “de traje” en un espacio muy acogedor, todo para nosotras, calentito y limpio, que reunió a más de cien personas de todas las edades, la mayoría, vecinos y vecinas de mi barrio o “forasteros” conectados y muy pendientes siempre de las cosas bonitas que en él ocurren. Completaban el aforo nuestras invitadas, familias incompletas de niños y niñas palestinas gravemente enfermas que están siendo tratadas en nuestra red pública de hospitales tras una u otra de las evacuaciones que el Gobierno ha organizado para poder atenderlas aquí. Familias que han de completarse con los miembros que aún están en el infierno, instalarse aquí y convertirse, ojalá más pronto que tarde, y si ellas quieren, en nuestras nuevas vecinas, ciudadanos y ciudadanas madrileñas. Las ONG y asociaciones encargadas día a día del bienestar de las familias refugiadas nos explicaron al equipo de locales las complejidades de un proceso de atención que es largo y un tanto descoordinado . Nos interesamos por él, por lo que podíamos nosotras, como vecinas, hacer para que el tránsito a la normalidad, al arraigo, sea lo más rápido y cuidadoso posible para todas ellas. Yo ya lo sabía, pero reconfirmé que los barrios tienen alma, que son las personas que en ellos viven y los espacios en los que se materializan físicamente, que los definen y los condicionan. Personas y espacios. Personas que constato que albergan muchas ganas e ideas de hacer “cosas bonitas” en comunidad, pero son ganas contenidas en gran medida por la desaparición de los pocos espacios confortables y asequibles en los que desplegarlas que antes había en el barrio y que ya no, porque las Administraciones los malvenden e incluso regalan a los de siempre, o simplemente clausuran para un deterioro predestinado. Las cosas bonitas no se hacen solas, no pasan solas; hay que hacerlas, hacer que pasen. Por fortuna, pasan muchas, aunque desafortunadamente mucha gente las desconoce , o eso me parece a mí, que hablo con mucha y muy diversa a diario a pie de calle. Conversaciones cotidianas que me ayudan a percatarme de lo mal informadas que estamos, especialmente de lo más cotidiano que ocurre muy cerca. El alma de los barrios, que en algunos puede encontrarse apagada, precisa de un relevo generacional para preservar y continuar, como hicieron nuestros mayores y coetáneos, la memoria, la historia y el futuro de nuestros espacios de convivencia , de nuestros barrios. Las ganas e ideas pueden desvanecerse si desaparecemos los vecinos, si, por ejemplo, acabamos reemplazadas por turistas, visitantes, nómadas digitales y “residentes” fake de alta rotación. Alguien que está de paso –por vacaciones, por trabajo, incluso por alguna modalidad de estudio–, aunque pernocte en nuestra comunidad de vecinos, no es vecino. Y no conoce, porque no los usa, el estado de los servicios públicos esenciales del barrio, como el polideportivo municipal cerrado a cal y canto más de un mes porque falta una pieza de Alemania para arreglar la caldera; o los tres centros de mayores huérfanos de actividades dirigidas por incompetencias administrativas del Ayuntamiento; o la insuficiencia de fondos de préstamo de la biblioteca pública. Como todo eso le es ajeno porque está de paso, es natural que no sea algo a lo que decida dedicarle tiempo ni interés. Y eso está bien. No lo cuestiono. El problema es que, al estar de paso, este barrio no es para él o ella su casa, y no vota aquí. Y entonces pienso: ¡Que se vaya a un hotel! Pues esto os cuento... Me despido con enormes deseos de que no cerremos nunca nuestros ojos y almas ante las atrocidades insoportables , las injusticias flagrantes y las desigualdades que parece que, aun pudiendo, no queremos resolver, como nuestra inmensa pobreza infantil. Por un 2026 repleto de casas asequibles para vivir, de tasas turísticas allá donde no existen aún, y de autonomía energética para todos y todas. _____________ Verónica López Sabater es economista y consejera de la Cámara de Cuentas de Madrid.

Fallece Amelia del Castillo, la primera mujer que fue presidenta de un club de fútbol y la madre de nuestra querida Gemma Santos

Fallece Amelia del Castillo, la primera mujer que fue presidenta de un club de fútbol y la madre de nuestra querida Gemma Santos

En la tarde de este sábado, los Deportes de la Cadena COPE hemos conocido el fallecimiento de Amelia del Castillo, la primera mujer que fue presidenta de un club de fútbol y madre de nuestra querida compañera Gemma Santos. Amelia fundó en 1963 el Club Atlético Pinto y actualmente daba nombre al campo de fútbol del club que presidió hasta 1975, cuando se vio obligada a dimitir por el alcalde de la ciudad, quien la amenazó con crear otro club si no se marchaba. Su figura fue fundamental en el fútbol de una época marcada por el machismo y la discriminación. En aquellos años la Federación prohibía a las mujeres ser jugadoras, entrenadoras o árbitras. Pero hace un mes el Ayuntamiento de Pinto aprobó por unanimidad otorgarle el título de Hija Predilecta. "Rendimos homenaje a una mujer que cambió la historia de nuestra ciudad, que cambió la historia del fútbol. Un ejemplo para las mujeres y hombres de Pinto y toda España. Una mujer que nos ha enseñado que con esfuerzo, tesón y pasión se alcanzan metas que parecen imposibles", eran las palabras del Alcalde de Pinto, Salomón Aguado, que le impuso la medalla.

Grandes sorpresas y (mayores) decepciones cinematográficas de 2025

Grandes sorpresas y (mayores) decepciones cinematográficas de 2025

Hollywood no es otra cosa que una maquinaria para fabricar relatos de orden global . La hegemonía estadounidense se ha construido a través de ellos. Algo que parece difícil si sus películas no llegan adonde tienen que llegar ni ganan el dinero que deberían ganar . Así que lo primero que hay que destacar de la taquilla internacional de 2025 es la presencia de dos producciones ajenas a EEUU en sus primeros puestos. Ambas, asiáticas . Quizá la política “ pivot to Asia ” que querían seguir tanto republicanos como demócratas también buscaba evitar escenarios así. La japonesa Guardianes de la noche: La fortaleza infinita , con unos 664 millones de dólares, ha culminado en el cine un fenómeno larvado en las plataformas de streaming . El anime original, al igual que hasta cierto punto Las guerreras K-Pop —el único film con un impacto cultural real en la larga historia de Netflix, algo de lo que pudo presumir al poco de adquirir Warner Bros. —, ilustra el ascenso a las grandes ligas de industrias antaño subsidiarias entre la constelación de potencias aliadas de EEUU. Una a la que no pertenece China, como sabemos. Y es justamente China, a falta de consumarse el destino de Avatar: Fuego y ceniza , la que ha logrado liderar el ránking. Con sus 2.150 millones de dólares, Ne Zha 2 es la producción animada más taquillera de la historia. Es algo que duele en EEUU, que sobre todo duele en Disney . La Casa del Ratón solía tener asegurado este mercado. Ahora el sello de calidad de su animación se difumina entre todos esos remakes de acción real que embarran su legado. Lilo y Stitch ha ganado otra millonada , en efecto. Lo que ha servido para olvidar la debacle de Blancanieves , así como para que DreamWorks se una a esta tendencia —el remake de Cómo entrenar a tu dragón , otra tragedia clónica— sin atreverse a creer que su motor creativo ya no tiene de qué avergonzarse frente a Disney. Teniendo ambas animales antropomórficos, Los tipos malos 2 es bastante mejor que Zootrópolis 2 . Solo que Zootrópolis 2 ha sido un taquillazo , claro. Disney conserva el liderazgo económico, atada a propiedades intelectuales que no desfallecen e incluso apuntan a un cambio generacional: Una película de Minecraft y Five Nights at Freddy’s 2 conectan con los adolescentes de una forma que Jurassic World no puede —si bien El renacer ha sido lo más exitoso del verano—, y cada vez menos el cine de superhéroes. 2025 también ha sido el año en que estos personajes de cómic han dejado de ser el patrón oro del blockbuster . Tiene lógica que e l nuevo Superman , entonces, haya llamado la atención no tanto por que alguien se crea que el nuevo Universo DC de James Gunn va a algún lado, como por ser un film bonito e ingenuo que rebusca en las esencias. Que, vaya, se esfuerza en demostrar que los superhéroes siguen siendo necesarios . No le faltan razones y basta reparar en quién es el presidente estadounidense: un Donald Trump al que fue inevitable vincular el Hulk Rojo de la última Capitán América . Esta película de Marvel presentó a un presidente con problemas de control de la ira que terminaba destruyendo la Casa Blanca. El film se había rodado antes de que Trump renovara legislatura (fue un accidente), pero es la mayor muestra de audacia política de Marvel Studios en toda su existencia. Y tampoco es que Thunderbolts* o Los Cuatro Fantásticos: Primeros pasos fueran mucho mejores. Todo lo expuesto hasta ahora nos habla más de números y muestras que de una auténtica sintomatología cinematográfica. El triunfo de Ne Zha 2 y Zootrópolis 2 no se evidencia más que a sí mismo, no da una medida de por ejemplo el estado de la animación internacional. Que, a tenor de joyas como la letona Flow o la australiana Memorias de un caracol , goza de muy buena salud. De forma equivalente, la legitimidad de Hollywood no depende únicamente de los taquillazos. Está ese cine adulto , ese cine que aúna viabilidad comercial con respeto crítico, y que a lo largo de 2025 ha brillado ahí donde las diversas regurgitaciones de IP desdeñaban intentarlo siquiera. Es una gran noticia, entonces, que Los pecadores y Weapons —dos películas que se apoyan en el terror para juguetear con otros géneros y construir fenomenales espectáculos populacheros — hayan atraído tanto público, si bien al ser producciones de Warner dan la impresión de que solo engordaron los ceros en que pudo estar valorada la empresa cuando Netflix presentó su oferta. También es de Warner la película que mayor unanimidad crítica ha generado este año. Una batalla tras otra es la película más aclamada con diferencia de 2025, y merece la pena preguntarse por qué. El declive cultural y económico de EEUU, acompasado por la deriva fascista de su gobierno , infecta el circuito de Hollywood. Le otorga una cualidad depresiva a los que debieran ser sus grandes estandartes — Wicked: Parte II es un bajón con respecto al musical del año pasado, mientras que la crítica distópica de Mickey 17 ha sido superada por la realidad—, al tiempo que una curiosa valentía . El cine adulto de 2025 ha querido estar al tanto de las noticias . Eddington y Bugonia han diseñado cámaras de eco para sostener que en el pensamiento conspiranoico está la clave del auge neorreaccionario. Caza de brujas ha dado el MeToo por superado con ademán derrotista, mientras Materialistas ha alertado contra la deshumanización de las relaciones sentimentales. Algunas películas han funcionado mejor, otras peor, pero todas han coincidido en que el gran problema de fondo es la desactivación de todos esos relatos que hubieran podido darle sentido a nuestras vidas no hace tantos años. No podemos creer en el progreso, ni en el amor, ni en la justicia social . Ahí entra justo la calurosa recepción de Una batalla tras otra . Lo nuevo de Paul Thomas Anderson intenta hacer acopio de optimismo. Frente a modelos de cine adulto ya francamente agotados —el biopic ha tenido un año de lo más plano, entre The Smashing Machine con Dwayne Johnson suplicando por un Oscar o Springsteen: Deliver Me From Nowhere despojándose de la coralidad que había hecho tan estimulante a A Complete Unknown —, Una batalla tras otra recupera la energía maníaca necesaria para transmitir que Hollywood puede seguir siendo vanguardia de algo. Por supuesto lo hace con las carencias típicas de su tradición. Sarcasmo, insistencia en la mirada masculina y, sobre todo, algo que no deja de ser una derrota: asumir que viene tocando dar el relevo, que solo nuestros hijos pueden sacarnos de esta . Si para eso hay que fiarse de chavales como Ainara, ciertamente estamos en problemas . La protagonista de Los domingos es una víctima más de esa sensación de futuro cancelado que recorre el Norte global. Porque, naturalmente, EEUU no está solo en su crisis de imaginarios. Fuera del alcance de sus tentáculos más obvios hay otros cines que insisten en denunciar las injusticias del presente —el rumano Radu Jude con Kontinental ‘25 , el iraní Jafar Panahi ganando en Cannes con Un simple accidente poco después de que otra película de su compatriota Mohammed Rasoulof también estremeciera, La semilla de la higuera sagrada —, mientras hay quienes por oposición ensayan una continuidad, y profundizan en estas preguntas . Es el caso de España. La falta de certezas en el progreso genera un repliegue hacia sistemas alternativos de creencias, nunca superados del todo. Una conducta que ha sido especialmente fácil de rastrear en el cine de 2025. La inestabilidad geopolítica ha derivado en historias que podrían haberse contado más o menos igual durante la Guerra Fría —caso de Una casa llena de dinamita con la carrera nuclear o la última Misión imposible , aunque aquí fuera la IA la posible responsable de la destrucción mutua asegurada—, mientras que la precariedad socioeconómica nos ha llevado irremisiblemente a la preocupación espiritual. También ha habido de eso en EEUU —la última Puñales por la espalda — solo que el cine español se ha mostrado especialmente permeable. Las dos películas españolas que más conversación han dado son Los domingos y Sirat , volcadas ambas en esta cuestión. Mientras que Los domingos sostiene que la vida en la socialdemocracia contemporánea ha conducido a un vacío del que la Iglesia católica puede aprovecharse fácilmente —sobre todo por su arraigo institucional y sentimental dentro del Estado español—, Sirat acude a un tipo de espiritualidad algo más forastera . Quizá por eso ha medrado tanto en la carrera de premios internacional: su invocación orientalista de las raves parece tan exótica en Europa como lo parece en EEUU. También en España, aunque en nuestro caso se deba al desdén generalizado hacia la problemática del Sahara Occidental ( en oportuno segundo plano dentro del film ). Oliver Laxe y Alauda Ruiz de Azúa han conectado con el espíritu de los tiempos. Su cine se refleja en esas películas de Hollywood que quieren ponerse presentistas, mientras desde otros rincones de la industria patria se siguen perfeccionando los modelos narrativos tradicionales (¿hollywoodienses?): Los tigres o Mi amiga Eva nos recuerdan lo importante que no deja de ser, simplemente, escribir buenos personajes. Maspalomas o Sorda inciden en cómo la diversidad de dichos personajes puede conducir a otros hallazgos, mientras Extraño río y La buena letra llaman la atención (aunque de forma muy distinta) sobre las limitaciones estéticas y políticas de nuestro entramado productivo. ¿Adónde se dirige el cine, entonces? Adonde siempre se ha dirigido, hacia adonde va la época . Con lo que su futuro es inevitablemente incierto. Inevitablemente sus películas se equivocarán, ahondando en el abismo nihilista o cerrándose aún más sobre sí mismas. Una situación que lo más seguro es que vaya a prolongarse, así que volviendo por última vez a EEUU no queda sino agradecer que unos pocos viejos maestros rechacen darse por vencidos. Spike Lee con Del cielo al infierno . Kelly Reichardt con The Mastermind . Jim Jarmusch con Father Mother Sister Brother . Suyas son las mejores películas del año , quizá porque son películas capaces de trascender la época.

Migración y multirreincidencia, el marco de las derechas sacude la política catalana

Migración y multirreincidencia, el marco de las derechas sacude la política catalana

Cataluña arrastró durante años la etiqueta de ser un oasis donde no tenía cabida la ultraderecha. Pero en apenas unos meses su tablero político se ha visto totalmente sacudido por el crecimiento espectacular en las encuestas de Aliança Catalana , a la vez que también sube en los sondeos Vox. Todo ello ha contribuido a una posición todavía más dura para competir por parte tanto de Junts y del Partido Popular de Cataluña en un escenario en el que el eje independentismo versus unionismo ha dejado de canalizar el debate público. Y en estas semanas hay dos temas, alentados por las derechas especialmente, que monopolizan las conversaciones políticas y mediáticas: la migración y la multirreincidencia. Y es que la migración es el principal caldo de cultivo del crecimiento de Aliança, lo que ha hecho que el discurso duro y xenófobo se adueñe del arco conservador catalán. Empezando por Junts, que trata de reconquistar el terreno político con posiciones antiinmigración y buscando conseguir las competencias para la Generalitat, lo que arrastró a un pacto con el PSOE, que fue duramente criticado por los socios progresistas de Pedro Sánchez. Pero ese discurso extremo ahora lo trata de capitanear el Partido Popular durante estos días a través del alcalde de Badalona, Xavier García Albiol. En la ciudad catalana se vive una situación de tensión después de que durante la semana pasada los Mossos d’Esquadra desalojaran por orden judicial el edificio del instituto B9 , lo que dejó en la calle a alrededor de 400 personas, en su mayoría inmigrantes subsaharianos, y sin solución habitacional en pleno diciembre. El Ayuntamiento de Badalona, competente en materia de servicios sociales, se ha negado a dar cobijo a los desalojados en centros o albergues. Ello ha provocado un fuerte choque con la Generalitat de Cataluña , capitaneada por Salvador Illa, que ha buscado soluciones temporales junto a entidades y la Iglesia para atender a los migrantes, muchos de ellos todavía acampados bajo puentes. García Albiol se niega a dar ayuda porque, en su opinión, resulta “inviable” tanto “conceptualmente” como económicamente porque costaría, según sus cálculos, unos 672.000 euros al mes. Ha alentado este discurso tanto en medios de comunicación como en las redes sociales: "Estas personas van a ser vulnerables siempre, porque han entrado en España de forma irregular. No van a poder trabajar ni tener un contrato de trabajo, y no van a poder tener un alquiler". El pasado domingo se vivió una imagen impactante cuando una protesta vecinal impidió que algunos de los desalojados pudieran entrar a dormir en la iglesia de la Mare de Déu. Hasta la Iglesia ha mostrado su horror por lo que está sucediendo. El arzobispo de Tarragona, Joan Planellas, hizo esta reflexión: "Cuando una determinada parroquia ofrece unas estancias, que haya manifestantes que se nieguen a dejar entrar a la gente… ¿Esta es la manera de hacer las cosas en este país? ¿Nos hemos vuelto locos?". Durante su discurso este viernes por la noche, Salvador Illa lanzó este mensaje: “Precisamente la Navidad nos recuerda aquello que no podemos perder nunca: nuestros valores humanos. ¿Qué nos queda si no actuamos con humanidad? Humanidad significa acoger e integrar a las personas que lo necesitan, significa defender nuestro estado del bienestar para garantizar una educación y una sanidad públicas para todos, significa garantizar la vivienda como un derecho, significa ofrecer ayudas sociales a quienes más lo necesitan y también significa garantizar la dignidad, la seguridad y la convivencia en todos nuestros barrios. Sin esta humanidad, sin esta solidaridad, no se puede construir ningún país ni ninguna sociedad”. “La respuesta a las necesidades y retos de Cataluña no es culpar a las personas que menos tienen o a quienes son diferentes. Haremos una Cataluña mejor para todos con política útil y con políticas públicas responsables, con soluciones al servicio de las personas. De todas las personas”, argumentó el también líder de los socialistas catalanes. Desde Génova 13 se está respaldando de manera rotunda a García Albiol en su postura respecto al desalojo, mientras que el Gobierno central ha tachado de racista la actitud de los populares. La nueva portavoz del Ejecutivo y ministra de Inclusión, Migraciones y Seguridad Social, Elma Sai z, indicó este viernes en TVE que el alcalde “está dejando, de manera inhumana, dormir en la calle a personas solamente por cuestiones de su origen. Las derechas están condicionadas por ese aumento imparable de Aliança , que ha hecho de la migración su principal base para el crecimiento electoral. En el último sondeo del CEO (el CIS catalán), el partido de Sílvia Orriols ya está disputándole a Junts la tercera posición con entre 19 y 20 escaños, por detrás del PSC (38-40) y de ERC (22-23). Y, además, Vox (13-14) estaría por delante del PP (12-13). El otro gran asunto que domina la política catalana alentado por la derecha es la multirreincidencia , que se ha convertido en un asunto nuclear tanto para Junts como para el Partido Popular. Los de Carles Puigdemont, además, están consiguiendo atraer al PSOE, dentro de su presión para no derribar la legislatura , en la modificación legislativa que se está estudiando en el Congreso de los Diputados. Los socialistas han permitido desbloquear la proposición de ley presentada por Junts en marzo del año pasado y han favorecido que se encarrile votando a su favor en las fases de ponencia y comisión durante este mes de diciembre, con un bloque en el que se integran los posconvergentes, el PP, Vox y el PNV. En un tema clave en el tablero catalán, ERC se ha abstenido, mientras que ha causado un gran enfado entre los diputados de Sumar, Podemos y de EH Bildu. El texto que tiene entre sus manos el Congreso conllevará reformas en el Código Penal y en la Ley de Enjuiciamiento Criminal. Por ejemplo, el castigo del hurto podrá ampliarse a una pena de prisión de uno a tres años si concurren circunstancias como haber sido condenado ejecutoriamente por otros tres delitos menos graves.

Retos tras el #MeToo en política o cómo lograr que las mujeres no se sientan excluidas en estos espacios

Retos tras el #MeToo en política o cómo lograr que las mujeres no se sientan excluidas en estos espacios

El caso Salazar que estalló en el corazón del PSOE no fue una excepción . La violencia contra las mujeres, independientemente de las siglas que le den cobijo, no suele serlo. A lo largo de las semanas se han ido sucediendo otros muchos testimonios en los que distintas mujeres señalaban comportamientos machistas, actitudes degradantes y acoso sexual por parte, presuntamente, de algunos líderes socialistas de peso, pero también a manos de dirigentes políticos de otros partidos . La acumulación de casos tiene un efecto inmediato sobre las mujeres: la desafección y el arrinconamiento . Las preguntas son muchas: ¿cómo construir espacios políticos libres de violencia?, ¿cómo persuadir a las chicas jóvenes para que no se desvinculen de la militancia política? Son algunas de las preguntas que se hace también Andrea Fernández , diputada socialista. "Ninguna mujer desea estar en espacios donde hay violencia sexual", se apresura a apuntar a preguntas de este diario. Sin embargo, la autocrítica requiere de una mirada larga: más allá de las violencias que puedan anidar en las formaciones, "las estructuras de los partidos políticos siguen siendo profundamente patriarcales ". En ese contexto, "los espacios de decisión e influencia reales están copados por hombres y son esos hombres los que coptan y reparten en función, generalmente, de lógicas de lealtad", analiza la parlamentaria. Romper con esas dinámicas no sólo "es muy difícil para las mujeres", sino que además "suele llevar asociado un coste personal y político muy alto". A muchas no les merece la pena ni siquiera dar el paso de intentarlo. El CIS publicó hace un año un estudio sobre participación política, en el que ofrece algunas nociones sobre los sesgos de género y edad en lo que respecta a la militancia e inquietudes políticas de la población. Las brechas entre los perfiles que pertenecen a un partido político y participan activamente en él, son notables: los jóvenes son quienes menos participan en formaciones políticas, con la sola excepción de los mayores de 65 años. Y los varones lo hacen en mayor medida que las mujeres. También Cristina Hernández , militante socialista y directora del Instituto de las Mujeres, se ha puesto estos días en la piel de las mujeres jóvenes con vocación política que estén observando con desasosiego la oleada de violencia sexual en distintos partidos. "Es comprensible que las noticias sobre acoso generen inquietud", concede. La violencia machista, añade, "es estructural y atraviesa todos los espacios de la sociedad , también los partidos políticos" pero el "verdadero riesgo", a su juicio, "no es que estos casos se conozcan, sino que se oculten o se minimicen". Beatriz Gimeno , exdiputada de Podemos en la Asamblea de Madrid, confía en que los casos no siembren desmovilización, aunque sí percibe un "derrumbe de la idea de ejemplaridad" que suele impregnar a los partidos, especialmente los progresistas. Se produce ahora una quiebra de "la idea de que los partidos son espacios ejemplares", reconoce al otro lado del teléfono, pero la exparlamentaria no cree que tenga un impacto destacable en las chicas jóvenes. "Eso que sucede en los partidos también ocurre en las oficinas, en los deportes y en la cultura", espacios a los que las jóvenes no renuncian. "Ahora hemos constatado que la política es otro mundo en el que imperan las mismas lógicas ", reflexiona. El MeToo en política que viene a evidenciar "una cuestión estructural: ese acoso forma parte de la masculinidad tradicional que sigue existiendo", clama Gimeno. Y afecta, añade, a hombres de derechas y de izquierdas . Si el año pasado cerró con la dimisión del exdiputado Íñigo Errejón , este remata con los casos de acoso en el panorama nacional, pero también con las imágenes que vinculan a líderes intelectuales y políticos como Noam Chomsky, Bill Clinton o Donald Trump con el pederasta Jeffrey Epstein. Todo ello, prosigue Gimeno, tiene que ver con "la construcción de la masculinidad" que no se ha visto "menoscabada por la teoría feminista". Porque, en muchas ocasiones, los hombres sí han sido capaces de asumir el discurso feminista, "pero siguen teniendo las mismas prácticas". Sucede así a pesar de los esfuerzos escenificados en los últimos años por hacer que el feminismo permee en las organizaciones políticas. Lo sabe bien la propia Gimeno. Podemos fue una de las organizaciones emergentes que hace una década introdujo en la conversación el reto de feminizar la política , entendido de una forma polisémica: no sólo bastaba con una mayor presencia femenina, sino también con introducir el feminismo como praxis política . Aquello, por muy ambicioso que fuera, fracasó. "No se ha conseguido", reconoce Gimeno. Sencillamente porque "el ámbito de la política no es diferente" a los otros y por tanto se puede asumir "un principio teórico", pero para hacerlo "estructural tienes que cambiar, precisamente, la estructura y a los hombres ". Si ellos "construyen su identidad a partir de prácticas patriarcales, es imposible que haya un cambio real", afina la exparlamentaria. Coincide Laura López , secretaria de la Federación de Mujeres Jóvenes . A su entender, la principal tarea para los partidos es la "feminización de la política, pero eso les atañe también a ellos". Para empezar, los hombres "tienen que ser capaces de perder el lugar" que hasta el momento les estaba reservado. Hoy ya no es una anomalía que los varones integren el discurso de la feminización en política, pero siguen sin renunciar a sus espacios de poder, analiza la activista. Hernández sí entrevé un primer paso esperanzador: "Que hoy se denuncien y se aborden públicamente” los casos de acoso “ no es un signo de deterioro democrático , sino de avance”. Significa que hay mujeres que “ya no están dispuestas a callar y organizaciones que se ven interpeladas a cambiar, a ser mejores y a aprender de los errores". Hernández cree que la política "mejora cuando se señalan las violencias y se actúa frente a ellas". Y en ese sentido, el mensaje –también para las chicas jóvenes– no debe dejar lugar a dudas: "La política también es nuestro espacio y a la vista está que necesita más feminismo y más feministas ". En ese proceso, sostiene la directora del Instituto de las Mujeres, la alianza intergeneracional entre mujeres es clave: "La política es una carrera de relevos. Nada de lo que hoy disfrutamos en términos de derechos habría sido posible sin mujeres que antes dieron un paso al frente". En ese escenario, hilvana, "entrar en política es también una forma de cambiarla desde dentro" porque "quienes sobran son los machistas". Si bien los partidos continúan sin ser espacios atractivos para ellas, lo cierto es que las mujeres sí han encontrado otras muchas formas –más amables, más seguras, más agradecidas– de canalizar sus inquietudes políticas . Según el mismo estudio del CIS, la situación es diametralmente opuesta en otras esferas como los espacios ecologistas, donde son los jóvenes y las mujeres quienes más esfuerzos dedican a la militancia. Las agrupaciones estudiantiles son las favoritas de los más jóvenes, mientras que las mujeres optan en mayor medida por involucrarse en organizaciones culturales, de ayuda social y de voluntariado. Las mujeres, por tanto, no se sienten interpeladas por las formaciones políticas al uso. Pero sí sienten suyos otros frentes desde donde también es posible hacer política. Espacios que no están necesariamente libres de violencia, ni de reproducir dinámicas de poder marcadas por sesgos de género, pero que tienden a poner en práctica formas más democratizadas, horizontales e inclusivas de hacer política. Son terrenos donde hay un "funcionamiento que tiende a ser menos jerárquico, más participativo y a reproducir unas formas donde tradicionalmente las mujeres se sienten más cómodas", concede Gimeno. Pero esas formas de funcionamiento, advierte, no afectan de manera "profunda al comportamiento masculino". "Lo hemos visto y lo hemos padecido", lamenta. "Es una cuestión casi de estructura personal", agrega al otro lado del teléfono, relacionada con la "construcción de las subjetividades masculinas" porque los hombres, al fin y al cabo, "viven en un mundo que les alimenta a ser así ". El cambio, por tanto, "tiene que ser desde fuera y desde dentro", pero es ingenuo pensar que será inmediato. "Será complicado y muy lento", pronostica. López sugiere un punto de partida en base a la propia experiencia: los espacios no mixtos. "Es importante que dentro de los partidos haya espacios no mixtos , exclusivos para las mujeres. Todas las chicas jóvenes que quieran militar deberían poder apoyarse en otras mujeres y saber que existen redes para hacerlo", desliza. En las filas socialistas, las mujeres feministas tienen claro cuáles son los elementos irrenunciables para ser capaces no sólo de reparar el daño, sino también para transformar la estructura desde dentro. "Democratización y transparencia", perfila Fernández . "Los partidos políticos son instituciones vitales para el funcionamiento de nuestra democracia", pero lo cierto es que "la forma en que funcionan en su vertiente organizativa" es todavía "muy cerrada y opaca", lo que a su juicio "genera dinámicas que no son positivas en muchas ocasiones". Faltan, dibuja la parlamentaria socialista, "espacios de deliberación, más participación ciudadana y una gestión del talento y de los liderazgos más igualitaria, consciente y transparente", pero también un "cambio en cuanto a la ética orgánica". "Tenemos la responsabilidad fundamental de abrir camino, sostenerlo y hacerlo más seguro ", subraya Hernández. Y eso implica "no mirar hacia otro lado ante el machismo, creer a las mujeres, exigir responsabilidades y transformar las organizaciones para que sean espacios libres de violencia". También, añade, tender la mano a las mujeres jóvenes. "Cada feminista que entra en política apuntala un poco más a la democracia", zanja.

El peligro oculto en tu cocina que usas a diario: así se convierte en un nido de bacterias

El peligro oculto en tu cocina que usas a diario: así se convierte en un nido de bacterias

El estropajo de la cocina, una herramienta de uso diario en todos los hogares, es también uno de los mayores focos de contaminación y riesgos para la salud. Aunque parezca inofensivo, su contacto constante con restos de comida, grasa y humedad lo convierte en un caldo de cultivo ideal para las bacterias, que pueden pasar a los platos y cubiertos que utilizamos cada día. La ingeniera en alimentos Montse Meléndez (@monalimentos) advierte sobre la importancia de mantener este utensilio en condiciones óptimas para evitar la contaminación cruzada. Una de las peores prácticas, según la experta, es dejar el estropajo sumergido en agua con jabón, ya que esta mezcla de humedad y residuos orgánicos acelera la proliferación de microorganismos. Para garantizar una higiene real, no basta con enjuagar el estropajo después de usarlo. Es necesaria una desinfección profunda que elimine los microorganismos invisibles. Meléndez es clara en su recomendación: “La esponja de lavar los platos se debe desinfectar una vez a la semana”. Este simple hábito es fundamental para prevenir malos olores y, sobre todo, la propagación de bacterias. La experta comparte varios métodos sencillos y eficaces para realizar esta tarea. “Puedes desinfectarla en el microondas metiéndola húmeda por un minuto, hirviéndola por cinco minutos o con una solución desinfectante”, explica. Cualquiera de estas opciones es válida: el microondas es rápido, siempre que el estropajo no contenga partes metálicas; hervirlo es una alternativa universal, y las soluciones desinfectantes son una opción sin calor. Después de cada uso, y especialmente tras la desinfección, el secado es un paso crucial. Meléndez aconseja: “Deja tu esponja en un lugar seco y sin residuos de alimentos para evitar que se desarrollen bacterias y malos olores”. Un ambiente ventilado dificulta que los microorganismos vuelvan a proliferar. Aunque se mantenga una rutina de limpieza estricta, ningún estropajo es eterno. La recomendación general es cambiarlo “cada dos a cuatro semanas”, dependiendo siempre de la frecuencia de uso y del material con el que esté fabricado. Superar este tiempo, aunque visualmente parezca estar en buen estado, eleva el riesgo de contaminación. Hay señales inequívocas de que ha llegado la hora de desecharlo. El mal olor persistente incluso después de limpiarlo es el primer aviso. Otros indicadores claros son la aparición de manchas oscuras o moho, una textura que se deshace o una superficie que se siente viscosa, señal de un biofilm bacteriano imposible de eliminar. La higiene en la cocina también depende del método que se sigue al fregar. Para evitar transferir grasa y suciedad de un utensilio a otro, la experta propone una técnica sencilla. “Vamos a lavar de lo menos a lo más sucio, para no ensuciar lo que esté menos sucio”, detalla. El orden correcto, según su consejo, es “empezar por los vasos, luego cubiertos, platos y, al final, sartenes y ollas”. Los vasos suelen tener menos grasa, por lo que se lavan primero para no engrasar la esponja. Al final se dejan las ollas y sartenes, que acumulan la suciedad más difícil. Un apunte final de gran importancia es el tratamiento de los utensilios que han estado en contacto con alimentos crudos. Meléndez subraya que “si utilizaste alguna tabla o cuchillo para carne cruda, lo recomendable es dejarlo hasta el final para evitar la contaminación cruzada”. Este gesto minimiza el riesgo de transferir bacterias peligrosas a otras superficies o alimentos.

El peligro oculto en tu cocina que usas a diario: así se convierte en un nido de bacterias

El peligro oculto en tu cocina que usas a diario: así se convierte en un nido de bacterias

El estropajo de la cocina, una herramienta de uso diario en todos los hogares, es también uno de los mayores focos de contaminación y riesgos para la salud. Aunque parezca inofensivo, su contacto constante con restos de comida, grasa y humedad lo convierte en un caldo de cultivo ideal para las bacterias, que pueden pasar a los platos y cubiertos que utilizamos cada día. La ingeniera en alimentos Montse Meléndez (@monalimentos) advierte sobre la importancia de mantener este utensilio en condiciones óptimas para evitar la contaminación cruzada. Una de las peores prácticas, según la experta, es dejar el estropajo sumergido en agua con jabón, ya que esta mezcla de humedad y residuos orgánicos acelera la proliferación de microorganismos. Para garantizar una higiene real, no basta con enjuagar el estropajo después de usarlo. Es necesaria una desinfección profunda que elimine los microorganismos invisibles. Meléndez es clara en su recomendación: “La esponja de lavar los platos se debe desinfectar una vez a la semana”. Este simple hábito es fundamental para prevenir malos olores y, sobre todo, la propagación de bacterias. La experta comparte varios métodos sencillos y eficaces para realizar esta tarea. “Puedes desinfectarla en el microondas metiéndola húmeda por un minuto, hirviéndola por cinco minutos o con una solución desinfectante”, explica. Cualquiera de estas opciones es válida: el microondas es rápido, siempre que el estropajo no contenga partes metálicas; hervirlo es una alternativa universal, y las soluciones desinfectantes son una opción sin calor. Después de cada uso, y especialmente tras la desinfección, el secado es un paso crucial. Meléndez aconseja: “Deja tu esponja en un lugar seco y sin residuos de alimentos para evitar que se desarrollen bacterias y malos olores”. Un ambiente ventilado dificulta que los microorganismos vuelvan a proliferar. Aunque se mantenga una rutina de limpieza estricta, ningún estropajo es eterno. La recomendación general es cambiarlo “cada dos a cuatro semanas”, dependiendo siempre de la frecuencia de uso y del material con el que esté fabricado. Superar este tiempo, aunque visualmente parezca estar en buen estado, eleva el riesgo de contaminación. Hay señales inequívocas de que ha llegado la hora de desecharlo. El mal olor persistente incluso después de limpiarlo es el primer aviso. Otros indicadores claros son la aparición de manchas oscuras o moho, una textura que se deshace o una superficie que se siente viscosa, señal de un biofilm bacteriano imposible de eliminar. La higiene en la cocina también depende del método que se sigue al fregar. Para evitar transferir grasa y suciedad de un utensilio a otro, la experta propone una técnica sencilla. “Vamos a lavar de lo menos a lo más sucio, para no ensuciar lo que esté menos sucio”, detalla. El orden correcto, según su consejo, es “empezar por los vasos, luego cubiertos, platos y, al final, sartenes y ollas”. Los vasos suelen tener menos grasa, por lo que se lavan primero para no engrasar la esponja. Al final se dejan las ollas y sartenes, que acumulan la suciedad más difícil. Un apunte final de gran importancia es el tratamiento de los utensilios que han estado en contacto con alimentos crudos. Meléndez subraya que “si utilizaste alguna tabla o cuchillo para carne cruda, lo recomendable es dejarlo hasta el final para evitar la contaminación cruzada”. Este gesto minimiza el riesgo de transferir bacterias peligrosas a otras superficies o alimentos.

Necesitamos la poesía

Necesitamos la poesía

El balance del año que se va resulta muy negativo . No es la primera vez que ocurre. La cultura puede recordar otras épocas de la historia en las que unas reacciones oscuras pusieron en crisis los valores fundados por el humanismo o las promesas de justicia y felicidad sostenidas por la razón ilustrada. A principios del siglo XX, también la poesía contemporánea tuvo que dar respuesta a la quiebra ética que sufrieron palabras como tecnología y progreso. Pienso en el viaje a Nueva York de Federico García Lorca en 1929, cuando la ciudad norteamericana representaba ya el espacio literario de la Metrópoli que durante años había cumplido París. La arquitectura moderna se llenó de humo y contaminación . Compañero de viaje de Fernando de los Ríos, su maestro en el socialismo humanista, García Lorca se encontró con un mundo dominado por huracanes de monedas furiosas, sin nadie capaz de repartir el pan y el vino, con unas multitudes manipuladas, un mar lleno de cadáveres a causa de las guerras y una sociedad conducida hacia el racismo y el machismo. La Segunda Guerra Mundial estaba al acecho. El 2025 pasa de largo con un horizonte marcado también por las amenazas y el desamparo. Hemos intentado no acostumbrarnos a la violencia que día a día marcó la vida en Gaza, Ucrania, las costas de Venezuela y Nigeria . Hemos intentado no caer en la indiferencia ante la injusticia para seguir defendiendo el valor de la democracia, aunque algunos manipuladores del derecho a la libertad hayan convertido las buenas causas en una excusa para robar petróleo, hacer negocios en bolsa o intentar establecer nuevas reglas comerciales en el mundo. Hemos comprobado que el patriotismo ruso puede legitimar la barbarie y la identidad judía puede justificar un genocidio. Hemos asistido al ascenso de la extrema derecha en Europa, apoyada por un presidente de los EEUU que se ha puesto sin pudor al servicio de los huracanes de monedas furiosas , confundiendo la libertad con la ley salvaje del más fuerte y el espacio público con un circo virtual de representaciones impudorosas. Es el balance triste de 2025, y lo hemos visto día a día. Seguro que hay argumentos sociológicos y análisis racionales que nos permitirán buscar una respuesta y salir de este tiempo oscuro. Pero el triste final de año que vivimos me invita ahora a buscar la poesía. Recuerdo a Federico García Lorca y repito la palabra amor contra la violencia implacable y la humillación de los seres humanos. En el “Grito hacia Roma”, la poesía se enfrentó a las lenguas militares , a las cadenas forjadas para apresar a los niños que estaban por nacer y a los teléfonos de diamante que daban órdenes sin escrúpulos. La poesía se acercó a las personas desgarradas por el hambre y la sed, a las mujeres ahogadas en aceites minerales, a los adolescentes que debían ocultar bajo las almohadas su beso prohibido y a los cuerpos que se abrían la ropa en espera de una bala. La poesía levantó la voz para repetir amor, amor, amor. El poeta se sintió desamparado, una palabra herida en un mundo ajeno, pero no quiso traicionarse a sí mismo, ni esconder junto a la multitud los valores en los que creía. Sobre la dinamita y los cuchillos, entre la nieve y el fuego, quiso gritar la palabra amor, amor, amor, porque estaba convencido de que la palabra amor es la raíz de la convivencia y porque ninguna avaricia comercial, ningún espectáculo de negociantes, ningún cacique, iba a hacerle olvidar el valor de las palabras y la única verdad digna a la hora de pensar el mundo: queremos que se cumpla la voluntad de la tierra, que da sus frutos para todos.