El Fundación Cajasol Andalucía sufre un serio correctivo en Lugo (3-0)

El Fundación Cajasol Andalucía sufre un serio correctivo en Lugo (3-0)

Dura derrota del Fundación Cajasol Andalucía en su visita a Lugo . Las nazarenas no desplegaron su juego en ningún momento y un pequeño atisbo de remontada en el tercer set fue tumbado con un parcial de cinco a cero para cerrar la victoria el Arenal Emevé por 3-0. Segundo revés consecutivo en la Liga Iberdrola q ue obliga a las de Ricardo Torronteras a puntuar en los próximos encuentros para mantenerse entre los cuatro primeros clasificados. Empezó el Arenal Emevé golpeando con un 5-2 de parcial en el que sólo Alejandra Pérez consiguió puntuar. Maguilaura Frías puso el balón en el suelo para acortar diferencias y paliar un inicio de set algo dubitativo en ataque. Apretaron las nazarenas y se pusieron por delante (9-10) por primera vez en el encuentro y la igualdad volvió a la cancha. Torronteras lo paró con 16-14 y un parcial de tres a cero en contra. Poco a poco fueron las locales imponiendo un mayor ritmo de bola con más contundencia y mejor distribución hasta cerrar el set (25-19). Tampoco empezó de la mejor manera la segunda manga. Un parcial de 5-2 abría el marcador con un Fundación Cajasol Andalucía que no era capaz de frenar a las locales y que se mostraba algo inoperante en ataque . Subieron el nivel las de Torronteras y pusieron el iguales a nueve puntos a base de garra y fuerza. Sin embargo, encajó entonces un parcial de 16-4 para que el Arenal Emevé cerrase el set con suma facilidad (25-13). Se diluyó por completo el equipo con falta de precisión en recepción, que complicó demasiado el ataque nazareno. No quedaba otra que reaccionar y buscar la épica. Y empezó bien, con un primer tiempo perfectamente ejecutado por Leticia Delagrammatikas y un bloqueo de Alejandra Pérez. Pronto pusieron la igualdad las locales a seis puntos gracias a un buen bloqueo. Maguilaura Frías, al saque, daba aire al equipo hasta el 6-11 complicando muchísimo la recepción del Arenal Emevé y el bloqueo con Leticia y Alejandra funcionaba. A partir de ahí volvió la igualdad y la calidad de Portero, Brugge y Clark salió a relucir. El 11-14 seguía dando ventaja a las nazarenas, que conseguían salir de rotación a pesar del buen hacer del bloqueo lucense. Y el 15-18, con un primer tiempo de Delagrammatikas, parecía poner tierra de por medio para llevarse el cuarto set, pero nada más lejos de la realidad porque el Arenal Emevé igualó el encuentro a 18 puntos. El 20-23 dejaba el set a tan sólo dos puntos, pero llegó entonces el cortocircuito en el ataque nazareno y cinco puntos consecutivos de las locales cerraban el partido y el contundente 3-0. El Fundación Cajasol Andalucía recibirá el próximo sábado (18 horas) al actual campeón de Liga Iberdrola, el CV Heidelberg , en el pabellón Francisco de Dios Jiménez (Los Montecillos).

El Fundación Cajasol Andalucía sufre un serio correctivo en Lugo (3-0)

El Fundación Cajasol Andalucía sufre un serio correctivo en Lugo (3-0)

Dura derrota del Fundación Cajasol Andalucía en su visita a Lugo . Las nazarenas no desplegaron su juego en ningún momento y un pequeño atisbo de remontada en el tercer set fue tumbado con un parcial de cinco a cero para cerrar la victoria el Arenal Emevé por 3-0. Segundo revés consecutivo en la Liga Iberdrola q ue obliga a las de Ricardo Torronteras a puntuar en los próximos encuentros para mantenerse entre los cuatro primeros clasificados. Empezó el Arenal Emevé golpeando con un 5-2 de parcial en el que sólo Alejandra Pérez consiguió puntuar. Maguilaura Frías puso el balón en el suelo para acortar diferencias y paliar un inicio de set algo dubitativo en ataque. Apretaron las nazarenas y se pusieron por delante (9-10) por primera vez en el encuentro y la igualdad volvió a la cancha. Torronteras lo paró con 16-14 y un parcial de tres a cero en contra. Poco a poco fueron las locales imponiendo un mayor ritmo de bola con más contundencia y mejor distribución hasta cerrar el set (25-19). Tampoco empezó de la mejor manera la segunda manga. Un parcial de 5-2 abría el marcador con un Fundación Cajasol Andalucía que no era capaz de frenar a las locales y que se mostraba algo inoperante en ataque . Subieron el nivel las de Torronteras y pusieron el iguales a nueve puntos a base de garra y fuerza. Sin embargo, encajó entonces un parcial de 16-4 para que el Arenal Emevé cerrase el set con suma facilidad (25-13). Se diluyó por completo el equipo con falta de precisión en recepción, que complicó demasiado el ataque nazareno. No quedaba otra que reaccionar y buscar la épica. Y empezó bien, con un primer tiempo perfectamente ejecutado por Leticia Delagrammatikas y un bloqueo de Alejandra Pérez. Pronto pusieron la igualdad las locales a seis puntos gracias a un buen bloqueo. Maguilaura Frías, al saque, daba aire al equipo hasta el 6-11 complicando muchísimo la recepción del Arenal Emevé y el bloqueo con Leticia y Alejandra funcionaba. A partir de ahí volvió la igualdad y la calidad de Portero, Brugge y Clark salió a relucir. El 11-14 seguía dando ventaja a las nazarenas, que conseguían salir de rotación a pesar del buen hacer del bloqueo lucense. Y el 15-18, con un primer tiempo de Delagrammatikas, parecía poner tierra de por medio para llevarse el cuarto set, pero nada más lejos de la realidad porque el Arenal Emevé igualó el encuentro a 18 puntos. El 20-23 dejaba el set a tan sólo dos puntos, pero llegó entonces el cortocircuito en el ataque nazareno y cinco puntos consecutivos de las locales cerraban el partido y el contundente 3-0. El Fundación Cajasol Andalucía recibirá el próximo sábado (18 horas) al actual campeón de Liga Iberdrola, el CV Heidelberg , en el pabellón Francisco de Dios Jiménez (Los Montecillos).

Pobre canica

Pobre canica

La Historia demuestra que el miedo puede conseguir que se encuentre deseable hasta lo más estúpido; por ejemplo, la guerra nuclear Hay viajes que pueden ser el último, y no sólo para una persona, sino para una nación, una civilización, un planeta entero. En general, suelen estar entre lo real y lo inventado, como tantas cosas; pero también hay viajes del todo inexistentes y, por lo visto, son más peligrosos de la cuenta cuando los turistas de la alucinación son las máquinas: por ejemplo, los varios cientos de misiles intercontinentales de la Unión Soviética que supuestamente salieron de aventura un 9 de noviembre de 1979. Como se sabe, la humanidad estuvo a un tris de desaparecer aquel día por un error de una computadora del Comando de Defensa Aeroespacial de EEUU (NORAD, por sus siglas en inglés) y, aunque la chapuza se recuerde más por la película Juegos de Guerra –y el sinfín de películas que alimentó, empezando por la saga de Terminator –, lo cierto es que nos salvamos de milagro. Cuatro años después, un nuevo error de nuestras más inteligentes amigas artificiales se topó in extremis con la inteligencia natural y el sentido común del teniente general soviético Stanislav Petrov, quien decidió que la Tierra no iba a ser una brasa porque a un satélite y otro ordenador se le hubieran cruzado los cables de mala manera. De no haber sido por su intervención, la gran “canica azul” de la fotografía de la sexta misión del Apolo 17 habría terminado convertida en un tzompantli (muro de cráneos azteca) descomunalmente mayor que el que describe Andrés de Tapia (1497–1561) en su famosa y breve Relación de algunas cosas , que apenas tenía –afirma el militar y cronista– “ciento treinta y seis mil cabezas”. Hizo bien Peter Anthony al rodar un documental sobre el ya fallecido héroe de Vladivostok y ponerle el título de El hombre que salvó el mundo y, desde el campo de la novela, tampoco erró Eduardo Sguiglia al utilizarlo como eje de ese viaje por la experiencia de la URSS que es La redención del camarada Petrov. No sé cómo se acabó llamando “incidente del equinoccio de otoño” a ese incidente en concreto, con la cantidad de incidentes que coinciden con equinoccios y solsticios. Dudo que alguien tuviera sentido del humor y se acordara de cierto poema de Charles Tomlinson –de nombre similar– donde se narra la bárbara invasión de un ejército de osos que acaban abatidos por los carabinieri; más que nada, porque los osos no eran rusos; pero creo que, si alguna vez ocurre lo que nadie quiere, será por un vulgar fallo o porque todo se gasta en algún momento, como el “viejo hopi hacedor de muñecas” del poeta británico en Una muerte en el desierto , a quien se presenta la Parca mientras saca “a un burro a golpes/ de su trozo de tierra” ( Poemas. Cuadernos Hispanoamericanos, n.º 545). De hecho, lo más improbable es lo que venden siempre los propagandistas de la escalada de armamentos: que un enemigo externo pulse el botón rojo y provoque una excursión de las dos mil cabezas nucleares que se mantienen operativas, es decir, con las maletas preparadas y el vuelo a punto. Ahora bien, la historia demuestra que el miedo puede conseguir que se encuentre deseable hasta lo más estúpido. Como definición de nuestra especie, “animal racional” roza la ingenuidad en comparación con “animal de costumbres”; pensar cuesta más que seguir rutinas y, si los malos hábitos se extienden en exceso, etcétera, etcétera. En mi opinión, no estamos en la época de las alucinaciones por casualidad. Cuando los Bush y compañía se inventaron términos de guardería infantil como “eje del mal” y “guerra contra el terror”, quien más y quien menos pensó que el Pentágono había bajado el sueldo a sus guionistas de cine; ahora, la mayoría de las secciones internacionales de los medios están abarrotadas de lobos feroces persiguiendo a Caperucita, con el agravante de que, si acaso, la realidad tiende a estar más cerca del Érase una vez de José Agustín Goytisolo (no se anden con tonterías: busquen su Poesía completa ). Esa es la “nueva seriedad” y, si en ella cabe una disparatada Invasión de los ultraokupas que destruye un paraíso de humildes rentistas, por qué no va a caber un sano y civilizado Hongo Atómico. Sin ánimo de ser macabro, el aniversario del error del NORAD no es el único de importancia histórica que se cumple este domingo: el 9 de noviembre de 1965, un activista del progresista Catholic Worker Movement (Roger Allen LaPorte) se inmoló ante la sede de la ONU en protesta por la guerra de Vietnam, donde EEUU no llegó a usar armamento nuclear porque Lyndon B. Johnson se enteró a tiempo de los planes del general Westmoreland. Desde luego, no seré yo quien defienda la inmolación como forma de protesta; me parece que vivir es más útil que morir, y que lo es todavía más tratándose de personas que trabajan por el prójimo; pero, aunque sean manifestaciones excepcionales, hay algo profundamente esclarecedor en el hecho de que ese fuego pasara en poco más de cincuenta años del sacrificio de personas como Allen LaPorte y Alice Herz a la quema de mendigos y casas de inmigrantes. Como afirma un conocido refrán, para semejante viaje no hacían falta alforjas. En espera de las alegrías civilizatorias que nos pueda deparar el futuro inmediato, les recomendaré tres libros de viajeros de claras intenciones militares –las dos primeras, contra el imperio otomano– que, sin embargo, y a diferencia del tipo de información que se ha generalizado en nuestros días, son también ejemplares en el respeto y conocimiento del contrario, además de ser grandes obras en los tres casos: La embajada a Tamorlán (1406), de Ruiz González de Clavijo; El viaje de Turquía (1558), atribuido últimamente a López de Gómara o Bernardo de Quirós (el médico de Felipe II, no el dramaturgo del Siglo de Oro) y, por supuesto, ya que mencioné al principio a Andrés de Tapia, la imprescindible Historia verdadera de la conquista de Nueva España , de Bernal Díaz del Castillo, que no se publicó hasta 1632. Al leerlos, se tiene la impresión de que no es su cultura política general la que está entre 600 y 400 años por detrás de la que juega con misiles nucleares, sino al revés. Menos mal que siempre habrá un Petrov decidido a salvar la canica azul.

Lucerna en 48 horas: guía para descubrir una de las ciudades más bonitas de Suiza en un fin de semana

Lucerna en 48 horas: guía para descubrir una de las ciudades más bonitas de Suiza en un fin de semana

Entre montañas, puentes y reflejos en el agua, Lucerna combina historia y encanto suizo a orillas del lago de los Cuatro Cantones. Un destino perfecto para una escapada rápida con sabor a queso y chocolate Qué ver en Gijón en 48 horas: un fin de semana entre sidra, mar y calles llenas de vida Lucerna, capital del cantón del mismo nombre, creció junto al lago de los Cuatro Cantones y el río Reuss. Su ubicación la convirtió desde la Edad Media en un punto clave de comercio entre el norte y el sur del país. Hoy mantiene su trazado antiguo, sus puentes cubiertos y su aire tranquilo. Y, además, tiene el tamaño perfecto para disfrutarla en un fin de semana. Llegar es muy sencillo: basta con volar a Zúrich y tomar un tren directo que, en apenas 40 minutos, nos deja en pleno centro. Desde allí todo está cerca: el lago, las murallas, las plazas y las montañas que se asoman al fondo. Estamos en Suiza y eso ya nos avisa de que los precios no van a ser precisamente bajos, pero la calidad de los servicios, la belleza del entorno y lo pintoresco del lugar, hacen que la experiencia lo valga. Kapellbrücke y Wasserturm, auténticos símbolos de Lucerna. Viernes por la tarde: primeras vistas junto al río Lo primero es dejar la maleta en el alojamiento. Dormir en el centro histórico es lo más cómodo, pero si el presupuesto es ajustado, los barrios de las afueras funcionan muy bien gracias a una red impecable de autobuses y trolebuses. Después, la idea es salir sin rumbo fijo y dejarse llevar por el río Reuss. Allí espera el Puente de la Capilla (Kapellbrücke, del siglo XIV), el gran símbolo de Lucerna, con sus vigas de madera y sus pinturas del siglo XVII que narran escenas de la ciudad. A su lado, la Torre del Agua (Wasserturm, construida alrededor de 1300), que sirvió como prisión, archivo y torre de defensa. El conjunto, sobre todo al atardecer, es el mejor retrato de Lucerna. Para cenar, lo ideal es hacerlo en alguno de los restaurantes del Rathausquai o la Mühlenplatz, con vistas al agua. Es buen momento para probar una fondue de queso, servida en el clásico caquelon de cerámica, con pan y encurtidos, o una raclette, otro plato típico donde el queso fundido se acompaña de patatas cocidas y cebollitas en vinagre. Y de postre, por supuesto, cualquier cosa que implique chocolate suizo. La muralla de Musegg, en Lucerna. Sábado por la mañana: el corazón medieval El centro histórico de Lucerna es pequeño y perfecto para recorrer a pie. Calles empedradas, fuentes de agua potable, fachadas pintadas y plazas llenas de historia. En Weinmarkt, Hirschenplatz o Kornmarkt las casas parecen recién salidas de un cuento. En el Ayuntamiento (Rathaus), de piedra y madera, se concentran muchos curiosos, igual que en el puente Spreuerbrücke, más corto y menos concurrido que el de la Capilla, pero igual de fotogénico. Entre paseo y paseo, un café o una parada para ver escaparates ayudan a saborear el ambiente de la ciudad. Lucerna no tiene el ritmo frenético de otras urbes europeas, y eso es parte de su encanto. Antes del mediodía, la Mühlenplatz vuelve a ser una buena opción para comer algo rápido, ahora con luz. Un rösti, esa especie de tortilla crujiente de patata, o una porción de Älplermagronen, un gratinado de pasta, patata, queso y cebolla muy típico de la Suiza Central, son elecciones acertadas. Monumento del león moribundo de Lucerna. Sábado por la tarde: museos y murallas El Museo del Transporte de Suiza (Verkehrshaus) merece toda una tarde, pero de camino desde el centro es fundamental aprovechar y desviarse a conocer el monumento al león moribundo, tallado en la roca en recuerdo de los guardias suizos caídos durante la Revolución Francesa en 1792. Tras una rápida parada, verás que el Verkehrshaus es uno de los más completos de Europa: trenes, teleféricos, coches, aviones, barcos, simuladores y hasta una zona dedicada al espacio. Lo ideal es comer pronto para tener tiempo, porque cierra a las 17h y es fácil perder la noción de las horas dentro. Si viajas con niños verás que es perfecto, pues se puede tocar, jugar y aprender sin parar en cada uno de sus espacios Cuando el museo cierra ya es casi de noche, y es buen momento para acercarse a las murallas de Musegg, que rodean parte del casco histórico. Se conservan nueve torres, cuatro de ellas visitables entre abril y noviembre. Desde lo alto, las vistas del lago y los tejados son magníficas, pero aunque no puedas subir el paseo exterior vale igualmente la pena porque la iluminación se cuida con mimo. Para la cena, de nuevo el río es el mejor aliado. En la zona de Rathausquai junto al Kapellbrücke se encuentran locales acogedores donde probar especialidades suizas. El Luzerner Chügelipastete, un volován relleno de carne en salsa blanca, es típico de la ciudad. También los quesos de la región, como el Sbrinz, fuerte y aromático, o el Bratkäse, que se puede servir caliente y ligeramente tostado. El Museo de Transportes de Lucerna. Domingo por la mañana: entre iglesias y montañas El domingo puede ofrecer dos planes muy distintos, ambos igual de tentadores. Opción 1: ciudad y lago La mañana puede empezar con la visita a la iglesia de San Leodegario, una de las más representativas del Renacimiento suizo, o la de los Jesuitas, junto al río. Después, un paseo nos puede llevar al Jardín de los Glaciares, donde se pueden ver formaciones rocosas talladas por el hielo hace miles de años. Después, toca acercarse al lago de los Cuatro Cantones: sus paseos están llenos de bancos, cisnes y vistas perfectas para las fotos. Si el tiempo acompaña, hay antiguos barcos de vapor que nos pueden llevar a conocer la ciudad desde el agua. Opción 2: el monte Pilatus La alternativa es pasar la jornada en las alturas. Desde Lucerna se puede tomar un barco temprano hasta Alpnachstad, donde comienza el tren cremallera más inclinado del mundo, con un 48% de pendiente. En media hora alcanza los 2.132 metros del Monte Pilatus. Arriba hay miradores, rutas señalizadas y un tobogán alpino a mitad de bajada de 1.350 metros de longitud. Las vistas del lago y de los Alpes suizos son espectaculares. El regreso se hace en el Dragon Ride, un teleférico panorámico que baja hasta Kriens, y después en bus hasta Lucerna. Si el vuelo de regreso a casa nos deja margen, este sería sin duda el plan perfecto para este día. Aunque si se busca una alternativa más tranquila, el Monte Rigi es otra excelente opción. Si decidimos quedarnos en la ciudad, el Rathausquai vuelve a ser el sitio ideal para comer. Si optamos por las montañas, podemos comer en un restaurante en las alturas o llevarnos el pícnic en la mochila. La iglesia de los Jesuitas, a orillas del río Reuss. Domingo por la tarde: despedida Con el tiempo justo antes de regresar a Zúrich, aún podemos dar un último paseo por el casco antiguo o hacer una parada en alguna tienda local para llevar chocolate o queso de recuerdo. Los trenes hacia Zúrich salen cada poco, así que la vuelta es sencilla. Cuando llega el momento de decir adiós, verás que Lucerna se despide igual que nos recibió: tranquila, elegante y con el rumor del río de fondo. Un fin de semana basta para conocerla, pero siempre deja la sensación de que aún queda mucho por descubrir, y disfrutar.

Las organizaciones humanitarias advierten que la deportación de menores argelinos que plantea el PP en Balears es ilegal

Las organizaciones humanitarias advierten que la deportación de menores argelinos que plantea el PP en Balears es ilegal

Los conservadores plantean la devolución de casi 300 personas pese al precedente de Ceuta que el Tribunal Supremo anuló El Supremo rechaza la petición del Govern balear del PP de suspender los traslados de menores no acompañados La Fiscalía está tramitando, en estos momentos, una petición del Gobierno de Argelia para repatriar a siete adolescentes que llegaron en septiembre en una embarcación recreativa a Eivissa. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunció que el Ministerio Público tramita expedientes de devolución de siete menores, de entre 14 y 17 años, después de que sus padres hayan “solicitado el ejercicio de la patria potestad”. En su visita a Argelia, Marlaska se entrevistó con el ministro del Interior del país norteafricano, Said Sayoud, quien aseguró que la información detallada sobre la situación de los menores estaba en manos de las autoridades españolas. Se trata de un caso excepcional, dado que Balears tutela a otros 298 menores argelinos a los que nadie reclama. Sin embargo, está siendo utilizado por las autoridades del archipiélago balear para reclamar el retorno de todos los menores argelinos —lo cual es ilegal, según la jurisprudencia dictada por el Tribunal Supremo — sin explicar cuál es la situación de cada uno de ellos, ni concretar cuál es el fundamento técnico o jurídico para justificar tal deportación colectiva. Marga Prohens (PP), presidenta del Govern, afirmó que había que repatriar también a los otros 298 menores a su país de origen, después de que se hiciera pública la tramitación que lleva a cabo la Fiscalía. La Conselleria de Bienestar Social del Govern no ha respondido a la consulta sobre cuál sería la argumentación técnica o jurídica para justificar la deportación de los 298 menores argelinos tutelados por las administraciones del archipiélago balear. Según la presidenta balear, la totalidad de los menores no acompañados, bajo tutela de los consells insulares, tienen “contacto permanente con sus padres”. Por este motivo, dijo desconocer “por qué el Gobierno argelino ha solicitado la devolución de estos siete menores ‘con nombre y apellidos’ y no la de los otros más de 300”. “Donde tienen que estar los menores, siempre que se pueda, es con sus padres”, afirmó Prohens y añadió que por estas razones se solicitaba que la repatriación fuera “total”. En su opinión, la reunión mantenida entre Marlaska y su homólogo argelino estaba rodeada de “oscurantismo y dudas sobre la gestión de la política migratoria”. elDiario.es ha preguntado al Ministerio del Interior en qué consiste este procedimiento de repatriación. “El asunto no es competencia del Ministerio del Interior. Durante su visita a Argel, el ministro del Interior solo mencionó el procedimiento iniciado por la Fiscalía, que es la responsable de coordinar todas las actuaciones y analizar la documentación remitida por las autoridades argelinas, como así explicó Grande-Marlaska en su comparecencia”, han respondido las fuentes consultadas. Por cuestiones de agenda, tampoco ha podido responder la Fiscalía, a la que se le consultaba cuáles son las circunstancias por las cuales se puede iniciar un expediente de devolución. Fuentes del Ministerio de Juventud e Infancia, que dirige Sira Rego, explican a este diario que los dos casos consultados son distintos. En el primero, el de los siete menores argelinos, las familias han pedido “la patria potestad de sus hijos”. Se trata de un precepto “contemplado legalmente” que el Estado español tiene que atender, indican. Es decir, “en este caso no se trata de menores en situación de desamparo, como sí es el caso del resto de niños tutelados por las comunidades autónomas”, señalan. Las mismas fuentes afirman que el Govern es conocedor de esta situación, pero que trata de “generar confusión entre la población sobre unas situaciones y otras”. “Recordamos al Govern de Balears que es una obligación legal la tutela digna de los y las menores en situación de desamparo, y que sus intentos por tratar de evitar esta responsabilidad tienen un componente racista muy preocupante”, lamentan. Aumento en la llegada de pateras Como consecuencia de la ausencia de vías legales y seguras para migrar, la ruta balear se ha consolidado como una de las principales para llegar a Europa desde países norsaharianos. A inicios de octubre de este año se han registrado 5.909 llegadas de personas a las costas del archipiélago balear, según datos conjuntos del Ministerio del Interior y la Delegación del Gobierno . Este número supera ligeramente las 5.882 personas que llegaron el año pasado, una cifra que supone un 158,3% más que en 2023, según el informe de Seguridad Anual de 2024. El documento, elaborado por el Ministerio del Interior, agrupa las llegadas dentro de un marco de control fronterizo y securitario. Entre las personas adultas también se encuentran menores, que en la mayoría de los casos están en una situación de desamparo, lo que obliga al Estado a asumir su tutela legal. En España, las competencias en materia de protección de menores corresponden a las comunidades autónomas, aunque en el caso balear están transferidas a los consells insulares de cada una de las cuatro islas. El reto que esto representa para las administraciones públicas —que necesitan más recursos para atender las llegadas debido a la falta de planificación y recursos en el sistema de acogida—, no les exime de su responsabilidad legal con los menores, tal como recuerdan tres organizaciones especializadas consultadas por elDiario.es: CEAR, Plataforma de la Infancia y Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía. El Estado debe garantizar la tutela de los menores Mauricio Valiente, director general de CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado), explica a elDiario.es que el hecho de que los menores puedan vivir en su entorno familiar es la primera consideración que hay que tener en cuenta, pero que también prima tanto su opinión como su interés superior. “La reagrupación familiar es un derecho del menor. Lo que pasa es que detrás puede haber una expulsión”, afirma Valiente. En el caso de los siete menores argelinos llegados a Eivissa, cuyos expedientes tramita la Fiscalía, indica que se tienen que cumplir varias garantías. Que los menores vivían en un entorno familiar, que la familia los está reclamando y que no hay una situación de excepcionalidad que haya provocado su salida. Esto último, sin embargo, tiene un margen de interpretación “muy grande”. “¿Cuándo se rompe el derecho a la vida en familia? Cuando hay una situación de explotación o persecución. El Estado de acogida tiene que valorar las circunstancias concretas de cada caso”, valora Valiente. Además, habría que escuchar también a los menores para conocer “qué ha motivado su salida”. “Es una situación un poco excepcional que hayan llegado en embarcaciones recreativas. Hay que estudiar cada caso concreto. En última instancia, los jueces españoles tienen que revisar la situación de estos menores en caso de que se acordara esa reagrupación familiar”, argumenta. Almudena Escorial, responsable de Incidencia Política de la Plataforma de la Infancia, afirma a este diario, como Valiente, que hay que “analizar el interés superior de cada niño”, es decir, individualmente. Lo ejemplifica así: si unos padres reclaman a su niña, pero quisieran casarla, habría que tener en cuenta su bienestar por encima de la voluntad de sus progenitores. “Aunque lo reclamen, si los derechos de esa niña —o su vida— corren peligro, en ningún caso se debería proceder a esa reagrupación familiar a su país de origen”, asegura Escorial. La experta en derechos de la infancia insiste también en que hay que analizar cada caso individualmente. Por tanto, no es posible expulsar colectivamente a 298 menores. Así, cree que el hecho de que una familia reclame a ese niño o niña es un indicio de que va a estar bien, y de que se van a asegurar sus derechos, pero hay que analizar que no haya ninguna circunstancia que impida que esa situación se vaya a dar satisfactoriamente. “En todo este proceso es importante que se escuche al niño o niña porque puede dar claves sobre si es aconsejable o no la repatriación”, sostiene Escorial y añade que la legislación contempla que para que se den esas garantías el menor también tiene derecho a representación legal. En el caso de estos siete expedientes, la experta advierte de que la Fiscalía podría descubrir que a lo mejor no es recomendable que alguno de ellos vuelva a su país de origen. En todo este proceso es importante que se escuche al niño o niña porque puede dar claves sobre si es aconsejable o no la repatriación Almudena Escorial — Responsable de Incidencia Política de la Plataforma de la Infancia “No se puede hacer”, insiste Escorial cuando se le pregunta sobre si se puede devolver a casi 300 menores a su país de origen. En este sentido, recuerda la devolución ilegal de menores desde Ceuta a Marruecos en 2021 . “El Supremo se ha pronunciado clarísimamente y ha habido sentencias de todo tipo. No se puede devolver de manera colectiva sin analizar individualmente cada caso”, advierte la experta. E insiste en que de nada sirve que haya un acuerdo de repatriación con el país de origen. Es decir, primero hay que localizar a la familia, después se abre un expediente, el niño o niña accede a un abogado, hay que escucharle y tener en cuenta su opinión, analizar el caso y, finalmente, tomar la decisión. “Es complejo”, concluye. Fuentes complementarias de la Plataforma de la Infancia señalan a este diario que el retorno al país de origen solo es una solución duradera aceptable cuando se cumplen tres requisitos: coincide con el interés superior del niño; se puede asegurar el bienestar y la seguridad del menor en su país de origen y se respetan las garantías que exige la legislación (la ley de extranjería y su reglamento, así como la ley de protección jurídica del menor). Plataforma de la Infancia señala que el retorno al país de origen solo es una solución duradera aceptable cuando se cumplen tres requisitos: coincide con el interés superior del niño; se puede asegurar el bienestar y la seguridad del menor en su país de origen y se respetan las garantías que exige la legislación Por otro lado, tanto Valiente como otros expertos consultados recuerdan que las relaciones entre España y Argelia no son buenas. De hecho, no existen acuerdos bilaterales de devolución de migrantes entre ambos países. “Me extrañaría mucho que hubiera familiares identificados reclamando al resto de menores”, reconoce el director general de CEAR e insiste en que las comunidades autónomas tienen la obligación de ejercer la tutela en el marco de la ley. “Desconozco las peculiaridades de la administración balear y los consells insulares, pero eso es un tema menor. Quien tiene la tutela no puede renunciar a ella. Mezclar un caso con el otro no tiene ningún sentido”, opina. Valiente se refiere al caso de los siete menores reclamados por sus progenitores a diferencia de los otros 298 niños y niñas a los que nadie reclama. En la misma línea se ha expresado Ana Rosado, investigadora de la Frontera Sur en la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA). “Para que se dé esa repatriación a los países de origen tiene que existir un consentimiento expreso del menor y que los padres o la institución que tenga su tutela den su consentimiento y así se produzca esa repatriación”, asegura Rosado. La investigadora recuerda que España tiene que comprobar y garantizar que el sistema argelino es adecuado para esa acogida. Rosado, como Escorial, también recuerda la devolución ilegal de menores desde Ceuta a Marruecos en 2021 . “Están vulnerando los derechos de la infancia de una manera sistemática. El principio de protección y no discriminación les da igual, para ellos prima la condición de persona extranjera”, lamenta la experta. Desconozco las peculiaridades de la administración balear y los consells insulares, pero eso es un tema menor. Quien tiene la tutela no puede renunciar a ella. Mezclar un caso con el otro no tiene ningún sentido [los siete menores reclamados por sus progenitores y los otros 298 niños y niñas a los que nadie reclama] Mauricio Valiente — Director general de CEAR El PP pide la devolución de los menores argelinos El Consell Insular, donde gobierna el PP con mayoría absoluta, anunció el 27 de octubre la inversión de 1,2 millones de euros con el objetivo de garantizar “la cobertura inmediata y adecuada” de la atención de los menores no acompañados que llegan a Eivissa. “La propuesta responde a la necesidad de dotar de recursos extraordinarios a un servicio que se encuentra en una situación límite como consecuencia del crecimiento continuado e imprevisible de llegadas”, afirmó la institución insular. En ese mismo comunicado, el Gobierno local pide a la Delegación del Gobierno en Balears que amplíe los trámites de repatriación iniciados para siete menores de origen argelino y los haga extensivos a los 77 menores argelinos que se encuentran bajo su tutela. Además, el Consell Insular insiste en que la situación de los centros de acogida es “insostenible” y que es necesaria una actuación “inmediata y coordinada” con el Gobierno para “garantizar una respuesta justa y equilibrada entre territorios”. elDiario.es ha preguntado al Consell Insular cuál es la argumentación técnica o jurídica que justifique el retorno de los otros 77 menores a Argelia, teniendo en cuenta que la institución ibicenca asume la tutela legal de los menores que se encuentran en situación de desamparo. “Precisamente que con estos siete se haya iniciado un procedimiento de repatriación por parte de Argelia significa que ese procedimiento existe y exigimos que se aplique”, responden las fuentes consultadas. “Son menores y deben estar con sus padres”, añaden. Carolina Escandell (PP), consellera de Bienestar Social del Consell Insular, explicó el 18 de julio que Eivissa registra una ocupación del 231,25% en cuanto a las plazas específicas para menores migrantes. Es decir, se han multiplicado por cuatro en el último año. “Estas cifras son insostenibles y demuestran que el sistema de acogida en Eivissa está en situación límite”, opinó. La consellera del ramo reivindicó que el Consell Insular se compromete firmemente con la protección de los derechos de la infancia y adolescencia, pero quiso advertir también que esta responsabilidad “solo se puede ejercer con garantías si se dispone de una financiación estable, una planificación coordinada” y mayor coordinación institucional. La ley permite el reparto de migrantes La respuesta que exige el Consell Insular en cuanto a una actuación “inmediata y coordinada” con el Gobierno para “garantizar una respuesta justa y equilibrada entre territorios” ya existe, como ha recordado Mauricio Valiente, director general de CEAR, a este diario. Se trata del Decreto-ley 2/2025, de 18 de marzo, de medidas urgentes para la garantía del interés superior de la infancia y la adolescencia ante situaciones de contingencias migratorias extraordinarias. Es decir, la normativa que aprobó el Gobierno para la creación del sistema obligatorio de reparto de menores migrantes en situaciones de emergencia. La modificación de esta ley permite sacar adelante un sistema de reparto para las comunidades que acojan a un número de menores que multiplique por tres su capacidad de acogida. Según explicó Ángel Víctor Torres, ministro de Política Territorial, el acuerdo permitía que las comunidades autónomas, a través de la Conferencia Sectorial, tengan la posibilidad de modificar dichos criterios y los requisitos del acuerdo si así lo dictaminan de forma unánime. “En tanto en cuanto se tiene acuerdo, si una comunidad autónoma, sea cual sea, multiplica por tres su capacidad ordinaria de acogida, esa región se podrá declarar ‘en contingencia migratoria’. Esa comunidad trasladará su situación para que se activen los mecanismos marcados por este decreto-ley”, afirmó. Este mecanismo es, precisamente, el que recuerda Valiente que tienen las comunidades autónomas para afrontar situaciones como la de Balears. Cuando se sobrepasa la capacidad de atención de menores, incide, “se pueden repartir entre otras comunidades autónomas”. “El PP se ha negado a desarrollarlo [el acuerdo] pero es una ley. Hay un mecanismo legal previsto”, insiste el director general de CEAR. El presidente del Consell Insular d’Eivissa, Vicent Marí (PP), quiere derogar esta ley. Según explicó, su Ejecutivo apoya la estrategia acordada por el conjunto de instituciones de las Illes Balears (donde el PP gobierna con Vox como socio principal, menos en Eivissa y Formentera) que incluye la presentación de un recurso legal contra el decreto-ley que regula la acogida de menores migrantes y la petición de su suspensión cautelar. Reclamó, además, más colaboración de Frontex para “frenar la ruta balear” y exigió al Estado “más medios de seguridad y una actuación en origen, especialmente, con Argelia”. “Quien tiene las competencias para poder frenar esta crisis debe actuar de una vez”, concluyó.

El talento huye ante los síntomas de desmantelamiento del único centro de investigación agrario de la Xunta

El talento huye ante los síntomas de desmantelamiento del único centro de investigación agrario de la Xunta

Media docena de ingenieros abandonan de modo "voluntariamente forzoso" el CIAM de Mabegondo y denuncian la "situación insostenible" de las instalaciones, con las que Medio Rural defiende un "compromiso absoluto" La crisis anunciada en las zonas que ardieron en Galicia: la ceniza que arrastra la lluvia deja a los vecinos sin agua potable La alerta la encendió la carta despedida de seis ingenieros, casi todos con más de quince años de experiencia en el Centro de Investigacións Agrarias de Mabegondo (CIAM). Este miércoles, suscribían un comunicado en el que anunciaban una marcha que definían como “voluntariamente forzosa” ante el “desmantelamiento planificado” por parte de la Xunta del centro público de referencia en el noroeste estatal, una instalación con casi 150 años de historia. La CIG, el primer sindicato de Galicia y mayoritario también en la administración autonómica, habla con tristeza de “profecía autocumplida” tras un lustro de avisos sobre la “nefasta gestión” de una Consellería, que está provocando la “fuga de talentos” y la “pérdida de más de un siglo de conocimiento”. Medio Rural, por su parte, defiende el “compromiso absoluto” con el futuro del centro y, eso sí, evita valorar el “clima” de trabajo existente, del que lo hacen directamente responsable. Los seis investigadores firmantes –María Bande, María Isabel García, Adrián Botana, Álvaro García, Roberto Besteiro y Santiago Crecente– abandonaron el CIAM en un concurso de traslados de funcionarios de la Xunta, en la escala de ingenieros agrónomos, al que se apuntaron debido a la situación “insostenible” del centro y el futuro “totalmente incierto para la investigación agraria” en Galicia. “La grave falta de cobertura de plazas que sufre el CIAM desde hace años arrastra muchas dificultades para ejercer la labor investigadora, en la medida en que muchas líneas de investigación eran unipersonales” algo que “dificulta enormemente el acceso a proyectos competitivos, donde normalmente se requieren grupos de investigación consolidados con varias personas”. También denuncian que “las jefaturas de departamento están desapareciendo, sin explicación ninguna al personal del centro”. Narran situaciones en las que los propios investigadores tuvieron que abordar tareas de campo para “poder mantener los proyectos en marcha, o simplemente para que los animales tuvieran los cuidados básicos, pues el personal de campo se encontraba sobrepasado por el trabajo”. Irene Sánchez forma parte de ese personal de campo. Esta oficial de segunda trabaja desde 2006 con las vacas de leche. Como delegada de la CIG, es testigo directo de lo que denuncian sus ya excompañeros. Es ella la que lamenta su “profecía autocumplida” al referirse a un “maltrato laboral” que, está segura, se hace “a conciencia para que marchemos”. La pirámide invertida del CIAM Según explica, Agacal (la Axencia Galega de Calidade Alimentaria) está viendo cómo su relación de personal toma forma de pirámide invertida. “El capítulo 1, de presupuesto para gastos y personal, es cerrado: cuando quieren nombrar puestos directivos y de libre designación, no se pueden inventar el dinero”. Pero si los trabajadores se van, esa plaza se amortiza y ese sueldo puede destinarse a puestos nombrados a dedo. En concreto, la CIG denuncia que, desde 2021 –cuando se aprobó la “chapucera” relación de puestos de trabajo– se han retirado 450.000 euros destinados a plazas de personal investigador y de campo para trasladarlo a “engordar la pirámide invertida de altos cargos”. “Nos están maltratando laboralmente a propósito. Hay personas que han presentado denuncias por acoso porque la estrategia es que nos vayamos en los concursos de traslados” que no se convocaban desde hace 12 años. “Yo soy personal de campo y voy a participar, como el 90% de los compañeros que están fijos. Tenemos entre 15 y 30 años de experiencia en investigación y nos vamos a marchar a otras consellerías en las que no hay ese maltrato” y en las que sabe que, por su mismo trabajo, cobrará “entre 190 y 270 euros más”. Eso, dice, es lo que les pasó a los seis investigadores que firmaron el manifiesto, personas “que querían quedar en el centro pero decidieron no hacerlo”. La consecuencia, que “después de recibir la transferencia del conocimiento de 30, 40 o 50 años de investigación, ahora se van a trabajar a otros centros donde no podrán aplicarlo y llegará para sustituirlos gente joven que no tendrá de quién aprenderlo”. Esa sangría de talento se vivió antes en el otro centro de investigación dependiente de Medio Rural, el de Lourizán, centrado en el campo forestal. “Un montón de científicos se fugaron para el CSIC”. Y una vez vaciado de trabajadores públicos, llega la segunda parte de esa “estrategia”: la privatización. Sánchez considera que en investigación es algo “bastante fácil”, ya que la mayoría del dinero que financia los proyectos procede de la Unión Europea y sus controles fiscales “están destinados a saber que se cumplió aquello para lo que solicitaste los fondos, pero no se meten en si la gestión es pública o privada”. Por eso, da por hecho que, cuando marchen, serán sustituidos con personal “sin formación ni trayectoria, no cualificado” y, no menos importante, “sin los derechos laborales que tenemos nosotras”. La Xunta no valora el “clima de trabajo” La carta de los investigadores no se quedaba sólo en su situación personal, sino que retrataba la “preocupante” presencia en el CIAM de equipaciones de campo y laboratorio “totalmente obsoletas”. Relataba cómo “recientemente se produjo un accidente laboral grave con una máquina que no se encontraba en condiciones adecuadas” que “desembocó en que se precintara una parte importante de la maquinaria del centro que tampoco cumplía”. La sala de ordeño del CIAM, que data del año 1994, quedó “totalmente anticuada respecto de los sistemas modernos ya implantados en las explotaciones del rural” y las cuadras “muy antiguas”, “no cumplen con las medidas de bienestar animal”. El escrito acaba denunciando “una gestión autoritaria desde instancias de Agacal”, con “una asignación de los recursos interesada y poco clara”. Por eso, aseguraron verse abocados a la marcha porque “el estímulo para seguir en el CIAM era muy bajo” ante una situación de “desmantelamiento” que la Xunta niega. “El compromiso de la Consellería do Medio Rural con los centros de investigación y formación dependientes de la Administración es absoluto, tal y como demuestran las inversiones realizadas y las previstas”, aseguró una portavoz por correo electrónico en respuesta a esta redacción. En su respuesta, manifestó que los prespuestos autonómicos del año 2026 incluyen una partida para “terminar el Banco de Germoplasma del CIAM” y dar “los primeros pasos para la implantación de un nuevo laboratorio de seguridad biológica de nivel 3, principalmente para el estudio y control de enfermedades bacterianas y virológicas en el ámbito ganadero”. Además, recordó que durante 2025 “alrededor del 79% de las inversiones con fondo propio de la Axencia Galega da Calidade Alimentaria se destinaron al CIAM”. “Es lo que le corresponde, porque es el único centro de investigación agrario público de Galicia”, responde con sorna Irene Sánchez. La CIG recuerda que, en el período 2021-2024, quedaron sin ejecutar 10 millones de euros de sus presupuestos. En lo que no quiso entrar la Consellería fue en la valoración del “clima de trabajo en el centro, dado que se apela a la profesionalidad de todos y cada uno de los trabajadores”. “El personal que envía ese escrito, efectivamente participó en el concurso de traslados y escogió voluntariamente otro destino fuera del CIAM”, un proceso que enmarca “dentro de la normalidad de cualquier administración pública”. Más de un siglo de historia El CIAM es el heredero de la Granja Agrícola Experimental creada en Monelos –hoy, un barrio de A Coruña– en 1888. La construcción de la actual avenida de Alfonso Molina, la gran vía de acceso a la ciudad, hizo que se trasladase a un municipio vecino, primero al de Bergondo, en Guísamo y, en la década de los sesenta, a Abegondo, donde ocupa una superficie de más de 200 hectáreas. En ese tiempo, nunca perdió el “espíritu público de modernizar y dinamizar el agro gallego”, cuenta Sánchez quien repasa el conocimiento y los materiales acumulados desde hace más de un siglo. “Allí se puede montar un museo”. En la transición, el Gobierno pidió un préstamo al Banco Mundial –“similar al que se solicitó para el rescate bancario”– con el objetivo de poner en marcha “la base del mundo agroganadero en el Estado”. Se escogieron entonces puntos geográficos de referencia climática para la instalación de centros de élite. Para el noroeste cantábrico, escogieron Mabegondo. “Arrancó a tope de presupuesto, 2.000 metros cuadrados de laboratorio y tres investigadores muy inteligentes que viajaron por todo el mundo para impregnarse de conocimiento”. A su vuelta, pusieron en marcha las tres líneas que todavía hoy existen: vegetal, producción anima y maquinaria. En los 80, las competencias se transifirieron a la Xunta a la que ahora, “sobre todo desde 2021”, los profesionales señalan como responsable de ese “ataque” que los investigadores sacaron a la luz con su carta. “La escribieron para que quede constancia de que no se van porque quieren”, sentencia Sánchez. “Querían seguir dedicándose a la investigación pública, pero aquí no pueden más y se van a otros centros administrativos”. Como ella misma tiene intención de hacer.

Fernando Franco: “Soy alérgico a las películas que dan una tesis sobre un tema. Me gusta dar espacio al espectador”

Fernando Franco: “Soy alérgico a las películas que dan una tesis sobre un tema. Me gusta dar espacio al espectador”

El director incomoda con su nueva película, 'Subsuelo', un thriller que adapta la novela del mismo nombre y donde aborda temas como la violencia, la culpa y la mentira ‘Predator: Badlands’ trae la infantilización total de la saga al gusto de Disney Fernando Franco debutó como director con una película tan contundente como La herida (2013). Una ópera prima que sacudió en el Festival de San Sebastián , donde compitió por la Concha de Oro y por la que ganó el Goya a la Mejor dirección novel. Pero antes ya se había convertido en uno de los montadores más importantes del cine español. Desde entonces no ha abandonado ninguna de las dos labores, pero no las mezcla. Él no monta sus largometrajes, pero sí lo hace para nombres como Isaki Lacuesta o Pablo Berger. Ahora estrena su nueva película, Subsuelo, en la que, sin renunciar a sus señas de autor, se introduce en el thriller oscuro adaptando la novela del mismo nombre de Marcelo Luján. Un filme incómodo sobre la relación enfermiza de dos hermanos gemelos y la relación de poder que uno ejerce sobre la otra tras una tragedia que les involucra a ambos. Un caballo de Troya, como lo describe, para hablar de temas como la familia, la culpa o la mentira. La película es una adaptación de la novela de Marcelo Luján, ¿propuso adaptarla o le llegó como encargo? Yo soy un lector bastante ávido en general, y leí sobre la novela porque había ganado el premio Dashiell Hammett en la Semana Negra de Gijón. No es que yo esté todo el rato leyendo novelas de género, ni muchísimo menos, pero el género negro siempre me ha interesado. Leí una breve sinopsis, pero no con el ánimo particular de adaptarla. De repente me encontré con una serie de elementos interesantes. Hablaba de la familia como la punta del iceberg de algo. Y llevaba tiempo queriendo hacer alguna incursión en el género. Había otros factores que me resultan atractivos, como la fragmentación temporal, que era algo en lo que nunca había trabajado… Había una serie de elementos que me resultaron interesantes para trabajar a partir de ellos. ¿Esta incursión en el género era un reto, una forma de probar cosas nuevas intentando ser personal? Sí, hay algo de reto siempre. En cada película siempre intento adentrarme en algo que no haya hecho antes y probar. El género, desde siempre, es como un vehículo que se presta mucho a utilizarlo como un caballo de Troya para hablar de otras cosas. Ya en mi película anterior La consagración de la primavera , que no es que fuese una película de género, ni mucho menos, pero sí que me preocupé por introducir algunos elementos que quizá iban en la órbita de, digamos, una comedia romántica o un drama romántico. Un envoltorio asumible por el público, pero que te permite hablar, como en aquel caso, de cuestiones que tenían que ver con la sexualidad de una persona que tiene una discapacidad. La familia es la unidad para hablar de la sociedad, de los grandes temas que hay fuera. En Subsuelo laten temas como la culpa. El tema de la culpa, por supuesto, está presente en la película. El tema de la mentira también. Yo intento concentrarme en el retrato de cosas muy específicas. Desde mi primera peli. En La herida yo no quería hacer una película sobre el trastorno límite de la personalidad, sino sobre un personaje concreto que vive con ello. Y en este caso también, para mí, es el retrato de una familia muy concreta. No estoy queriendo decir, ni mucho menos, que la familia en general como institución sea como esta, pero sí que creo que hay algo extrapolable. La familia es una institución que, casi todos nos relacionamos desde ella, pero que al final solo se ve la punta del iceberg y debajo hay muchas más cosas, y eso me interesaba. Esos conceptos de mentira, de culpa… son muy actuales, y políticos incluso. No hay a priori una idea de hacer una tesis sobre la culpa. Yo soy muy alérgico a las películas que presentan una tesis. Me gusta que me dejen cierto espacio como espectador para relacionarme con ella. Entonces intento no hacerlo yo cuando hago cine. Al final, obviamente, la película hace su vida. Cada uno ve cosas, pero no tenía esa ambición, digamos, más grande, de construir una tesis sobre la culpa, ni mucho menos. Hay también una pregunta flotando, cómo se corta la espiral de violencia, que en este caso puede ser sexual. ¿Solo se puede acabar con otro acto de violencia? Eso fue una cosa que nos planteamos mucho y es diferente a lo planteado en la novela y surge bastante del trabajo con los propios intérpretes, porque yo consideraba que el final que tenía la novela, que ahí funcionaba muy bien, no lo iba a hacer en la película. A base de hablar y de intentar entender la situación del personaje y la olla a presión en la que vive, pensamos en cómo salir de ahí. Hubo mucho diálogo, tanto con Julia Martínez, por supuesto, como con Diego Garisa, con Nacho Sánchez y también con Bego (Begoña Arostegui), que firma el guion conmigo. De hecho fue de ella la idea de que el final vaya con el personaje de ella. Momento del rodaje de 'Subsuelo', la nueva película de Fernando Franco ¿Diría que es su película más turbia? No hay una intención deliberada de hacer una película turbia. La novela ya tiene algo de eso, es innegable. Incluso va más allá. Aunque igual no lo pueda parecer, hay un trabajo de contención. Imagino que ha tenido que pensar en cómo plasmar en escena esos abusos. Cómo trasladar esa turbiedad con su puesta en escena o hasta qué punto hacerlo o no. Es algo que me he planteado mucho, y es algo que siempre me planteo en mis películas. Siempre me encuentro en esa tesitura. Por ejemplo, en La herida tenía un personaje que se autolesionaba, ¿cómo ruedas esto, cómo lo retratas? Porque si lo dejas completamente fuera de campo parece que estás queriendo obviar algo que es muy importante, como que estás mirando hacia otro lado, pero tampoco quieres estetizarlo, espectacularizarlo ni explotarlo, ¿dónde está la línea? En La consagración tenía que decidir si mostrar una erección de un personaje con parálisis cerebral. Pero si no lo muestras, ¿lo van a creer? En esta película la pregunta era, ¿hasta dónde muestro? Es una cosa que hablamos mucho. Hay que desplegar algo para que la gente entienda lo que está pasando, y quizás luego recurrir al fuera de campo, al sonido, a otra serie de cosas. Otra cosa es que luego haya gente que considere que me quedo corto o que me excedo. Pero, desde luego, sí que hay una reflexión de intentar estar en un punto en el que te mueves como un funambulista, intentando no caerte en ninguno de los dos lados. Los dos hermanos protagonistas los interpretan dos actores, a priori, desconocidos, ¿era una decisión deliberada? No. Cuando trabajo con Arantxa Vélez y con Paula Cámara, que son las directoras de casting, yo siempre les digo: que sean buenos. Me da igual que sean más famosos o menos. Entonces el casting que hacemos es completamente abierto. Vemos tanto a gente profesional más conocida como a gente que no lo son, y al final pasa que tienes un match de repente con cada uno de ellos por separado y luego, cuando los imaginas juntos y los juntas realmente, ves que funcionan. Si encuentras a dos intérpretes tan buenos como ellos, y encima son caras nuevas para el público, eso es como un win win. El año pasado Variety sacó una noticia sobre un proyecto suyo sobre Lorca, ¿sigue en pie? Sí. Yo después de esta peli he hecho otra película y estamos con su postproducción. Se titula La luz y la protagoniza Alberto San Juan, pero lo que mencionas es un proyecto real que está en marcha y que tiene ya la ayuda del ICAA. La idea es que vamos a rodar el año que viene.

Multa de 2.250 euros por usar su apartamento en La Gomera como segunda residencia y no destinarlo al turismo

Multa de 2.250 euros por usar su apartamento en La Gomera como segunda residencia y no destinarlo al turismo

Pese a que el Gobierno canario anunció que se cancelaban estas sanciones, siguen las multas a los propietarios por vivir en zonas turísticas, por no dedicarlos a esta actividad o no cederlos a un explotador El Supremo estudiará si un propietario de un apartamento puede alquilarlo en Canarias por su cuenta al margen del explotador turístico 2.250 euros. Es la propuesta de multa que les ha llegado a los propietarios de un apartamento en La Gomera por no destinarlo al turismo. Viven en Tenerife y usan su vivienda para pasar fines de semana y a veces largas temporadas, ya que en La Gomera tienen arraigo familiar. Una de las propietarias explica que se siente “indefensa” ante la Ley Turística en la que se ampara la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias para sancionarles, ya que compró esta propiedad con unas expectativas de disfrute o de que puedan usarlo sus hijos en un futuro incluso para residir, como han hecho otros conocidos suyos. “Te ves en una situación de indefensión porque has hecho un esfuerzo para comprar esta propiedad con unas expectativas de disfrute más que de otra cosa y es una inversión para el futuro de tus hijos”, explica. El expediente de sanción le llegó a estos propietarios recientemente, bastantes meses después del decreto de marzo con el que el Gobierno canario anunciaba la suspensión de las sanciones a los propietarios en zonas turísticas que no lo dedicaban a este fin y residieran en sus apartamentos o no lo cedieran a un explotador turístico. Los propietarios esperan que se haga justicia y finalmente no tengan que pagar y van a batallar por ello. Los propietarios prefieren salvaguardar su nombre, el nombre del complejo y el municipio donde se encuentra. No obstante, este periódico ha tenido acceso al expediente y en la propuesta de sanción se recoge que, en respuesta al requerimiento del Servicio de Inspección, los titulares manifestaron que hacen “uso de su casa como segunda vivienda”. Y se considera que se ha incumplido “el deber de atenerse al uso establecido por el planeamiento y la del inmueble construido en ella según la licencia obtenida en el momento de su edificación”, que era el de dedicarlo a la actividad turística en modalidad extrahotelera en lugar de dedicarlo “al uso residencial”. En el informe de Inspección se sostiene que “ni los propietarios ni el Ayuntamiento han acreditado que se haya consolidado el uso residencial que se está realizando ni que el mismo esté permitido por el planeamiento ni por la licencia”. Para la determinación de la sanción se ha tenido en cuenta que la infracción originaria es “muy grave” conforme al tipo infractor del artículo 75.14 de la Ley de Ordenación del Turismo de Canarias: “Se consideran infracciones muy graves a la disciplina turística el incumplimiento del deber de atenerse al uso establecido por el planeamiento, destinando un establecimiento turístico de alojamiento a usos residenciales”, siendo no obstante, considerada como “grave” por aplicación de lo dispuesto en el artículo 76.18 del mismo texto legal, que señala que “constituyen infracciones graves a la normativa turística las infracciones tipificadas como muy graves que por razón de su intencionalidad, naturaleza, ocasión o circunstancias no deban considerarse como tales”. Por todo ello, se propone como sanción 2.250 euros para estos propietarios. La afectada explica a este periódico que no va a pagar la multa y que va a recurrir hasta última instancia. “Lo que yo tengo es una vivienda, yo no tengo una plaza alojativa” “Cuando compramos ponía un contrato de explotación turística pero era de mutuo acuerdo renovarlo o no y en las escrituras no pone que estés limitado a ese uso de por vida”, apunta. “No dice que la vivienda tenga uso exclusivo turístico”, insiste. La propietaria multada subraya que en su complejo hay personas que han alquilado a médicos y otros profesionales que han venido a La Gomera a trabajar por temporadas y que los han alquilado y que hay otras casuísticas. Recuerda que hasta la Ley Turística de 2013 no se ponía esta limitación de que no se puede residir en las zonas consideradas turísticas. “Los propietarios estamos desamparados de alguna manera porque además, cuando compramos, no compramos una plaza alojativa. Hay otros complejos en los que no hay división horizontal y compras un porcentaje dentro del edificio, pero nosotros compramos en estos casos una vivienda determinada”, asegura. “Lo que yo tengo es una vivienda, yo no tengo una plaza alojativa, tengo una escritura y tengo una vivienda”, insiste. Un goteo constante de multas Desde la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias han explicado a este periódico que el decreto ley de medidas urgentes relativas al deber de atenerse al uso turístico, que fue aprobado por el Consejo de Gobierno el pasado 17 de marzo, lo que dice es que se suspenden las sanciones por un plazo de tres años y a petición del interesado. Además, remarca que se realizará en los municipios que hubieran iniciado los procedimientos de especialización de usos del suelo. No obstante, no disponen de un listado de cuántos son ni de cuáles son los municipios que han iniciado esa especialización y matizan que los expedientes individuales no se pueden comentar por protección de datos. La presidenta de la Plataforma de Afectados por la Ley Turística, Maribe Doreste, recuerda que cuando se anunció ese decreto ella aseguró que “insultaba a la inteligencia y que era un decreto mentiroso”. “El artículo 3 de este decreto, quien lo lee lo sabe, no suspende las multas”, añade. “¿Por qué? ¿Qué dice el artículo 3? Que nosotros tenemos que ir al ayuntamiento a solicitar un cambio de uso. Y que si lo solicitamos en tres años se paralizan las multas, pero no significa que el uso te lo concedan, sino que hay un stand-by. Eso es lo que dice el decreto”, resume. “¿Cómo vamos a ir nosotros a solicitar algo que ya tenemos? Si nosotros tenemos un uso residencial consolidado y legal, ¿para qué tenemos que ir al ayuntamiento a solicitar un cambio de uso? Si voy al ayuntamiento y solicito un cambio de uso, es una trampa. ¿Por qué? Porque estoy diciéndole que yo soy turístico y que estoy declarándome turístico y que quiero que me lo cambies a residencial. Luego, si yo me declaro que tengo un uso turístico eso es haber afirmado que mi uso era un uso que no era legal y mi uso residencial”, insiste. “Como el cambio de uso es por parcela, no es por apartamento o bungaló, ¿cómo vamos a ponernos de acuerdo los propietarios de una parcela si tenemos intereses enfrentados? ¿Y por qué metes a los propietarios de una parcela cuya convivencia ha existido durante más de 50 años de forma pacífica, pudiendo convivir sin haber tenido ningún tipo de problema de convivencia? ¿Por qué los metes en esa situación? ¿Para qué? ¿Para favorecer qué?”, se cuestiona. “Lo que nosotros decimos es lo que está detrás de todo esto, que es el favorecer el modelo turístico extrahotelero, el de siempre, ese que es caduco, trasnochado y obsoleto”, incide Doreste, que apunta que cada día en el BOE llegan nuevas resoluciones con sanciones a propietarios por residir o no dedicar sus viviendas en zonas turísticas a esa actividad. Multas que rondan los 2.250 euros como la de estos propietarios de La Gomera y que les colocan en la incertidumbre.

"La guerra es un negocio": los mercenarios colombianos que entrenan a niños soldados de Sudán

"La guerra es un negocio": los mercenarios colombianos que entrenan a niños soldados de Sudán

Un soldado mercenario relata los lucrativos contratos, el asedio de la ciudad sudanesa de El Fasher y el entrenamiento de niños para "ir a morir" Claves - Una guerra de atrocidades (y olvidada): qué está pasando en Sudán y por qué la última ofensiva rebelde es importante Al principio, a los mercenarios colombianos curtidos por décadas de guerra en la selva, el conflicto de Sudán les parecía lento. “En Sudán duermen por las noches, ni siquiera dejan a alguien en seguridad porque todo el mundo se va a la cama”, dice Carlos, uno de los cientos de colombianos contratados para luchar en el país africano. “Los colombianos somos diferentes, estamos acostumbrados a otro tipo de guerra”. Cuando él y sus compañeros colombianos llegaron al frente, siguieron adelante en la oscuridad adentrándose cada vez más en territorio enemigo. “Y entonces empezaron a producirse muchos más combates y muchas más muertes”, dice. Carlos llegó a Sudán a principios de 2025, casi dos años después de que comenzara la brutal guerra civil entre el Ejército y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF). Según representantes de la ONU, el conflicto ha sumido a Sudán en una de las peores pesadillas humanitarias de la historia reciente: 150.000 asesinados, según algunas fuentes; mujeres y niñas violadas y secuestradas y casi 13 millones de sudaneses obligados a huir de sus hogares en la mayor crisis de desplazamiento forzado del mundo. El pasado jueves, las RSF anunciaron su “conformidad” con una tregua humanitaria en Sudán propuesta por EEUU, Egipto, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos. Sudán, un país dividido EGIPTO Río Nilo Darfur CHAD ERITREA Jartum El Fasher ETIOPÍA SUDÁN DEL SUR Ejército / Grupos aliados RSF / Grupos aliados Otros grupos aliados GRÁFICO: IGNACIO SÁNCHEZ. FUENTE: CRITICAL THREATS PROJECTS AT THE AMERICAN ENTERPRISE INSTITUTE Sudán, un país dividido EGIPTO Río Nilo Darfur CHAD Jartum ERITREA El Fasher ETIOPÍA SUDÁN DEL SUR Ejército / Grupos aliados RSF / Grupos aliados Otros grupos aliados GRÁFICO: IGNACIO SÁNCHEZ. FUENTE: CRITICAL THREATS PROJECTS AT THE AMERICAN ENTERPRISE INSTITUTE El Fasher, capital de Darfur del Norte, ha caído en manos de las RSF tras 18 meses de asedio. Cientos de miles de personas han estado atrapadas en esta ciudad devastada donde no ha entrado ningún tipo de ayuda durante más de un año y medio, y los niños se han visto obligados a comer langostas y pienso para animales. El Fasher es el lugar al que fueron enviados los colombianos que luchan para las RSF. “La guerra es un negocio”, dice Carlos. La participación de los mercenarios salió a la luz en 2024, cuando el medio bogotano La Silla Vacía publicó una investigación sobre la contratación de más de 300 exsoldados colombianos en Sudán, provocando una inédita disculpa por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia. El trabajo de los colombianos no termina en el campo de batalla. Los combatientes admiten haber entrenado a niños soldados de Sudán y hay fotos de ellos operando en Zamzam, el mayor campo de desplazados forzosos de Sudán. En abril, las RSF arrasaron Zamzam en una de las peores masacres de esta guerra, según la ONU. Mataron a entre 300 y 1.500 personas. “Hemos sido testigos de un doble crimen con nuestros propios ojos: el desplazamiento forzado de nuestro pueblo a manos de las RSF y ahora la ocupación del campo por mercenarios extranjeros”, dijo Mohamed Khamis Douda, portavoz del campo de refugiados de Zamzam (en Darfur), al periódico The Sudan Tribune. El papel de Emiratos Árabes Unidos Todas las miradas están puestas en Emiratos Árabes Unidos. Desde hace tiempo, el país ha sido acusado de armar y respaldar a las Fuerzas de Apoyo Rápido, y de contratar a los mercenarios usando empresas privadas de seguridad. Emiratos ha negado sistemáticamente las acusaciones. Algunos colombianos que filtraron información dicen haber sido engañados y que les dijeron que su misión era proteger instalaciones petroleras en Emiratos. Carlos sí sabía que iba a la guerra, pero no sabía dónde. Lo único que le habían dicho es que era en África. Su viaje comenzó con exámenes médicos en Bogotá, donde firmó un contrato de 2.600 dólares al mes. Según él, después lo llevaron en avión a Etiopía pasando por Europa. Luego, a una base militar emiratí en Bosaso (Somalia) y luego a Nyala, la ciudad de Sudán que se ha hecho conocida por ser un centro de mercenarios colombianos. Entrenando a niños Carlos, que pide permanecer en el anonimato para hablar con libertad, reconoció que su primera misión fue entrenar a reclutas sudaneses, la mayoría de los cuales eran niños. “Los campamentos tenían miles de reclutas, algunos adultos, pero sobre todo niños, muchísimos niños”, dice. “Son niños que nunca han empuñado un arma; les enseñamos a manejar rifles de asalto, ametralladoras y lanzagranadas; después, eran enviados al frente; los entrenábamos para ir a morir”, añade. Describe el entrenamiento de los niños como “horrible y una locura”. “Por desgracia, así es la guerra”, agrega. La unidad de Carlos terminó siendo destinada a la sitiada ciudad de El Fasher, el campo de batalla más duro del país. Los combatientes de las Fuerzas de Apoyo Rápido levantaron un muro de 32 kilómetros en torno al perímetro la ciudad, ejecutando a los que intentan escapar de allí. Carlos muestra a La Silla Vacía y The Guardian fotos y vídeos de los mercenarios colombianos en Sudán, algunos de ellos facilitados por sus compañeros. En una de las fotografías es posible ver a los reclutas tumbados en el suelo boca abajo, algunos con rifles en las manos. Dos adolescentes posan para la cámara haciendo el signo de la victoria con los dedos. En un vídeo un hombre dispara su ametralladora a través de un agujero en la pared de un apartamento en ruinas. En otro, compartido por otro mercenario colombiano, un hombre carga y dispara un mortero en las afueras de El Fasher. En una tercera grabación, unos mercenarios con marcado acento colombiano hablan en medio de un intenso tiroteo sobre un compañero que parece haber sido herido. “No sé si está muerto, porque no pudimos verlo”, dice uno en español. “¿Quién viene a ayudar a sacarlo?”. El mercenario señala a un grupo de combatientes sudaneses agolpados cerca de él. “Vosotros, vosotros, vosotros, pueden ayudarnos aquí, darle apoyo a estos hombres; vamos a hacer una retirada en silencio para sacar a este tipo”, se le escucha decir antes de una imagen del grupo llevándose a un hombre herido frente a casas llenas de agujeros de bala. De Colombia a otros países Se cree que Colombia es uno de los mayores exportadores de mercenarios del mundo . El conflicto civil que ha vivido el país durante décadas generó un excedente de combatientes con experiencia, muchos de ellos entrenados por el Ejército estadounidense. “Colombia tiene más de medio siglo de historia de conflicto activo. No es solo que sus soldados hayan recibido un entrenamiento muy bueno, sino que han estado en el campo de batalla en situaciones muy complicadas y están preparados para el combate”, dice Elizabeth Dickinson, analista superior para Colombia en el centro de estudios International Crisis Group. El uso de mercenarios colombianos se intensificó en torno a la década de 2010, dice el experto en mercenarios Sean McFate, cuando los excombatientes del país centroamericano eran contratados para proteger la infraestructura petrolera de Emiratos. Sus funciones fueron cambiando durante la guerra de Yemen. “Emiratos Árabes Unidos envió a muchos mercenarios colombianos a matar hutíes [rebeldes], y lo lograron”, explica. Desde entonces, los mercenarios colombianos han aparecido una y otra vez en las noticias. En julio de 2021, dentro del equipo que asesinó al entonces presidente de Haití, Jovenel Moïse, había 18 pistoleros colombianos. En Irak y en Afganistán han luchado exmilitares colombianos. Ahora también en Ucrania: el ministro de Relaciones Exteriores de Colombia comunicó en noviembre de 2024 que unos 500 compatriotas habían viajado allí para luchar contra las fuerzas rusas. Carlos era uno de ellos. Tras dos años en las tropas ucranianas, se fue. “Ucrania se estaba complicando, había más bajas, más avances del enemigo; así que me fui y acepté este trabajo de mercenario en África”, dice. “No sabía absolutamente nada sobre el trabajo, solo que era en África”. Para los países que los contratan, los mercenarios tienen la ventaja de que es posible negar la vinculación con ellos cuando se trata de eludir el derecho internacional o de violar sistemáticamente los derechos humanos. “Cuando los capturan o los matan, son repudiados”, asegura McFate. El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se ha comprometido a terminar con la contratación de mercenarios colombianos, algo que considera “un comercio de hombres convertidos en mercancías para matar”. Pero la desaparición de esta práctica no parece fácil, teniendo en cuenta las dificultades que los excombatientes colombianos suelen tener para reintegrarse en la sociedad de su país y el incentivo económico que se les ofrece. Un soldado junto a un helicóptero en Colombia. Según Dickinson y McFate, el problema también radica en el sistema militar colombiano. La mayoría de los soldados profesionales se ven obligados a jubilarse alrededor de los 40 años, con pensiones insuficientes y pocas opciones de reciclaje profesional. “Si entras a los 18 años y trabajas durante 20 años, ni siquiera tienes 40 cuando te jubilas, te quedan 15 o 20 años de servicio activo”, explica Dickinson. “La estructura de apoyo para los militares retirados colombianos es deficiente, especialmente si se compara con la oferta que estas otras organizaciones ponen sobre la mesa”. Pero Dickinson también advierte que “las empresas de defensa privadas” ya no se limitan a los soldados retirados de Colombia. “Cada vez más están reclutando a personas en servicio activo de lugares donde los soldados lo pasan muy mal, en condiciones difíciles”, dice. “Envían folletos por WhatsApp ofreciendo miles de dólares por mes”. En su opinión, se trata de “una pérdida enorme” para el Ejército. “El Gobierno colombiano los entrena con un nivel muy alto y luego la industria de defensa privada se los quita”. Carlos es uno de los que abandonaron las fuerzas armadas de Colombia tras un servicio de poco más de cinco años. También se ha ido de Sudán, alegando problemas con el pago. Junto a él renunciaron 30 compatriotas, “pero al mismo tiempo llegaban vuelos con otros 30”. En el mundo, los mercenarios habían desaparecido casi por completo del campo de batalla durante la mayor parte del siglo XX. Pero el negocio está resurgiendo rápidamente, según McFate. “Es la profesión más antigua del mundo, estamos volviendo a algo medieval, donde los superricos pueden convertirse en superpotencias”, dice. La visión de Carlos sobre su trabajo es igual de pesimista. “No es un trabajo honesto, no es un trabajo legal, lo haces por dinero”. Este artículo fue escrito en colaboración con La Silla Vacía. Traducción de Francisco de Zárate.

Los poetas palestinos que dan voz a quien sufre el genocidio en Gaza: “Es un grito que sale de debajo de los escombros”

Los poetas palestinos que dan voz a quien sufre el genocidio en Gaza: “Es un grito que sale de debajo de los escombros”

Una treintena de escritores participan en una antología para "romper el silencio y la omisión que se ha hecho sistemáticamente de la identidad cultural palestina" Entrevista - Michael Barenboim, violinista: “El genocidio es un intento de borrar el pasado, el presente y el futuro de los palestinos” Muchas han sido las veces que se ha reflexionado sobre para qué sirve la poesía, un dilema que toma más importancia cuando uno mira a su alrededor: ante el genocidio que Israel comete en Gaza , ¿qué pueden hacer los versos? ¿Cuán relevantes son las palabras ante las balas y la destrucción? Son preguntas a las que intentan dar respuesta los poetas palestinos que, incluso en medio de la devastación, reivindican la necesidad de contar, de dejar registro y de nombrar el dolor a través del arte. Así lo constata la escritora Mona Almsaddar (Gaza, 1995) a elDiario.es: “Sabemos que un poema no va a hacer que no haya este genocidio ni que sigamos sufriendo esta injusticia, pero es una forma de expresar lo que sentimos”. Con el fin de hacer llegar la voz gazatí al resto del planeta, Almsaddar ha sido una de las encargadas fundamentales de dar vida al libro Gaza. Poemas contra el genocidio (Ediciones del Oriente y del Mediterráneo), una antología que reúne a una treintena de poetas que reflejan la lucha, el sufrimiento y la esperanza de quienes sufren el genocidio. Se trata de una obra que en España traduce Ignacio Gutiérrez de Terán, experto en Estudios Árabes e Islámicos, y que se ha presentado a través de recitales en la madrileña Casa Árabe. “Nuestra poesía es un grito que sale de debajo de los escombros a lo que ha sido convertido Gaza”, explica Mona Almsaddar, que ha servido de intermediaria con los participantes del poemario. Entre los autores, además de Almsaddar, también se encuentra Fatena Al Ghorra (1974), referente en el feminismo palestino. Regresó a Gaza a visitar a su familia el 4 de octubre de 2023, tras quince años de estancia en Bruselas como refugiada, y obtuvo la nacionalidad en el país en 2016. Tras ser desplazada desde la ciudad de Gaza a diversas localidades dentro de la Franja con sus padres, logró salir con ellos rumbo a Bruselas, evacuados por la diplomacia belga. Como periodista de profesión, la artista alerta que “ha habido una intención clara desde el principio de evitar la entrada de periodistas extranjeros, sobre todo occidentales”. La poeta Mona Almsaddar “La poesía sirve para hablar de estos asuntos y, sobre todo, para desenmascarar el objetivo de toda esta política”, señala Fatena Al Ghorra, que indica que en la Franja “no solo te impiden informar, sino que dan una imagen falsa de lo que es la realidad que ellos mismos han contribuido a crear”. “Hacen que, cuando los periodistas entren o se asomen, aunque sea desde el exterior, vean una realidad que no es la de Gaza”, indica a este periódico. Ella lo ejemplifica con la “imagen de que la gente ahora mismo come en Gaza”: “Están dando cosas como alimentos ricos en grasas para que la gente de fuera crea que se está comiendo algo, pero lo que la gente necesita son proteínas, vitaminas, verduras, frutas”. Uno de los poemas de Fatena Al Ghorra, El narrador, él lo contó , reza lo siguiente: “Escribe con trazos rojos en las piedras menos rugosas para que, quien venga tras de ti, aprenda a leer”. La autora, activista feminista , insiste en el poder generacional de los versos: “Esto es una cadena continua. Yo hablo para quien viene después, porque yo a su vez vine después de alguien que me dejó escrito algo sirviéndome de gran utilidad”. Además, la poeta afirma que, en el genocidio en Gaza, “no hay duda de que es la mujer quien sostiene la resistencia”. “En muchas sociedades se distribuye el papel de que quienes luchan son los hombres y las mujeres están en la retaguardia, pero Gaza ha resistido gracias a las mujeres”, dice. La poeta Fatena Al Ghorra “Las mujeres han sido las que han adoptado el papel de sostener los núcleos familiares, de soportar toda la carga, de buscar alimentación, de mantener a la familia y a todos sus congéneres con vida y también de apoyar de todas las formas posibles esa lucha de la resiliencia día a día, de apoyar a la gente que está luchando”, explica Fatena Al Ghorra. La artista alude a todos los prejuicios que hay en torno a las mujeres palestinas, cuando el machismo es una lacra que afecta a todos los países sin excepción. “No todas las culturas son iguales. ¿Por qué hay esa tendencia a ver lo que tiene que hacer el resto en función del prototipo que ha creado Occidente, en concreto una sociedad capitalista?”, cuestiona la poeta. Por su parte, el también escritor Waddah M. Abujami, originario del campamento de Jan Yunis, reclama la necesidad de la obra después de que la voz palestina haya sido silenciada durante décadas. “Es una manera de romper ese silencio y esa omisión que se ha hecho sistemáticamente de la identidad cultural palestina y de desmitificar la versión sionista tradicional de que los palestinos no tienen una cultura ni tienen un ánimo poético ni un gran espíritu literario”, apunta el autor, defendiendo así “una cultura muy dada a crear cultura a través de las palabras”. “Se ha convertido en un refugio el que aislarse frente a los bombardeos, los desplazamientos y el genocidio”, cuenta a este periódico. El poeta Waddah M. Abujami Cuando alguien escucha a los artistas recitar sus poemas, o incluso con la mera lectura de los mismos, se percibe también el deseo de que un futuro mejor es posible, de que no todo está perdido. “La resistencia o la capacidad de hacer frente a todo lo que está pasando no es una cuestión de elección. No tenemos otro remedio”, explica Waddah M. Abujami. “No solo al ciudadano gazatí, pues al propio poeta de Gaza no le queda otra que resistir porque es la única forma de mantenerse con vida. Estamos ante una guerra de exterminio”, destaca. Asimismo, como persona que hace arte, el escritor declara que “cualquier persona, ya sea un artista o no, debería pensar que es lícito posicionarse del lado de esta gente que está sufriendo”. Recientemente, figuras de gran importancia en la cultura nacional como Rosalía han sido acusadas de no utilizar su plataforma para condenar el genocidio que comete Israel. Waddah M. Abujami indica que, “si uno analiza lo que es la cuestión palestina, se dará cuenta de que hay un pueblo que está sufriendo una persecución y a quien se le está arrebatando su vida, su tierra y su cultura”: “Lo que yo le digo a esta gente, que siendo artistas o creadores se supone que deberían tener un sentimiento humano especial, y que no adopta ninguna postura o que se ponen de perfil, es que lo hacen desde un punto de vista de la cobardía. Están en la zona gris de la realidad”. La poeta Doha Alkahlout “Cuando te posicionas a favor de un asunto justo pero que, a la vez, es polémico porque va en contra de la corriente de pensamiento general y, sobre todo, del gran poder, muchas veces no lo haces por falta de convicciones, sino por miedo”, agrega el poeta, “porque piensas que puedes perder tu trabajo, tu público, tu influencia, que no te van a volver a llamar para una exposición, un concierto o un recital, que te van a dejar de publicar...”. “Eso significa que valoras mucho más unos aspectos muy concretos y, al mismo tiempo reducidos, que este gran objetivo que es el de estar con la gente que sufre. Todos somos parte de la misma humanidad”, reivindica Waddah M. Abujami. Por otro lado, la artista palestina Doha Alkahlout, quien también está presente en el poemario, es profesora de lengua árabe y tiene 28 años. Su familia es originaria de la aldea de Naalia, destruida en las razias de las milicias sionistas en 1948. En su poema La voz de la guerra escribe: “Qué bien se desmorona la memoria, qué bien se llora en las capitales del mundo”. “Comprendo que es muy difícil para alguien que está fuera [de Gaza] comprender todo el dolor, el desgarro y la destrucción que estamos sufriendo”, dice la autora al respecto. “Es imaginable porque ni nosotros mismos en algunos momentos podemos asumir todo esto que estamos padeciendo”, añade. No obstante, Alkahlout celebra que exista gente que trate de solidarizarse con la situación: “Hay gente que llora de verdad y que siente el padecimiento”. Para ella, la literatura logra mantener vivos los nombres de quienes ya no están o de quienes sufren. “Hay que nombrar a las personas, decir su nombre y su apellido completo. Somos mucho más que los números y la estadística”, sentencia. En alusión a este mismo punto, Waddah M. Abujami celebra el legado del arte: “Cierto es que la poesía no ha parado el genocidio, ni siquiera lo que está ocurriendo hoy en día, porque el genocidio no se ha detenido, pero te hace sentir, como gazatí, que hay alguien a quien le importas y que lee las circunstancias terribles por las que estás pasando”.

Sacas y represión en la antigua prisión que el Ayuntamiento de Málaga destina a la educación privada: "Entrabas por nada”

Sacas y represión en la antigua prisión que el Ayuntamiento de Málaga destina a la educación privada: "Entrabas por nada”

Una historiadora y dos sindicalistas relatan los capítulos que han marcado el pasado de este antiguo centro penitenciario: desde una fuga de película a los años de la heroína El Ayuntamiento de Málaga promueve un centro de enseñanza privada en la prisión símbolo de la represión franquista Desde la antigua prisión provincial de Cruz del Humilladero hasta el Cementerio de San Rafael hay apenas un kilómetro de distancia. Miles de prisioneros hicieron ese recorrido en los años de la Guerra Civil. Se han recuperado restos esqueléticos de 2.840 cuerpos , aunque aparecen como registradas 4.471 personas como inhumadas en las fosas del antiguo Cementerio, lo que la convierte en la mayor zona de exterminio de la represión franquista en España y una de las más grandes de Europa. La mayoría murieron fusiladas contra su muro tras el paseíllo desde la cercana cárcel. Los restos exhumados hace veinte años aún no han sido cotejados con el ADN de sus familiares y permanecen sin identificar bajo la pirámide del Parque, que sigue sin completarse. Por su parte, la prisión enfila un futuro como centro privado de formación profesional , una vez que el Ayuntamiento adjudique la parcela y las instalaciones a la oferta más ventajosa. El Consistorio pretende publicar los pliegos pretende publicar antes de final de año. De momento, cuenta con un plan, presentado por la Universidad Alfonso X el Sabio, que ha dado el pistoletazo de salida al trámite de competencia de proyectos. La idea la rechazan los grupos de izquierda y una incipiente plataforma vecinal, además del movimiento memorialista, que denuncian su escasa sensibilidad con el simbolismo del espacio, y el “afán privatizador” del Ayuntamiento. En 2009 todos los grupos políticos acordaron destinar la prisión, ya vacía de presos, a un uso público. Pero desde que el Consistorio, gobernado por el PP, se hizo con la titularidad del inmueble, en 2012, no ha cuajado ningún proyecto, y el inmueble languidece. Sacas diarias hacia el Cementerio de San Rafael La prisión, de más de 14.000 metros cuadrados, fue construida en la primera mitad de los años 30, incorporando la visión humanista de la malagueña Victoria Kent, por entonces directora de prisiones de la República. Poco podía imaginar que en los años siguientes la población reclusa se multiplicaría fruto de la represión: primero de un bando, durante los meses de desgobierno que siguieron al fracaso del golpe en la ciudad; y luego, multiplicada con la llegada de las tropas fascistas lideradas por Queipo de Llano en febrero de 1937. En 1938, el propio Gobernador civil franquista denunció el hacinamiento de más de 3.000 presos en una cárcel pensada para 800. Entre ellos, Arthur Koestler, autor de El cero y el infinito , periodista y colaborador del Komintern, antes de ser enviado a Sevilla e intercambiado por Luis Bolín. En los primeros compases tras la toma de Málaga las sacas hacia el Cementerio eran diarias. “Cualquiera que no se sumó al golpe de estado podía acabar ahí, y eso incluye a mucha gente que vuelve de La Desbandá, a quien se considera contraria”, cuenta la historiadora Raquel Zugasti, vecina del barrio, que ha estudiado a fondo los expedientes del Archivo del Juzgado Militar Territorial de Málaga. La prisión es para muchos la antesala de la muerte. 13 de marzo de 1938: alguien lanza vivas a la República y al Comunismo durante una saca. “¡Abajo el fascismo!”, se oye. Los carceleros, la mayoría miembros de Falange no profesionales, reprimen a golpes la protesta y aíslan la galería. La sentencia se dicta rápido: de los 68 acusados de rebelión militar, 39 son declarados culpables y condenados a pena de muerte, y son ejecutados el 15 de marzo. La confirmación de la sentencia no llegó hasta dos meses después. “Al final, el juez hizo una selección indiscriminada. Son juicios sumarísimos sin garantía legal”, resume la historiadora. La represión convirtió al penal en símbolo de resistencia y expresión de la crueldad del régimen. También de expresiones de solidaridad: “En el momento de la saca hay un muchacho que se desmaya. Los compañeros lo recogen y se lo llevan a la celda. Hay otro que está enfermo y el expediente recoge que los compañeros le preparan una cena especial”. A mediados de los 40 abundan los guerrilleros, pero también represaliados por nivel socioeconómico, etnia u orientación sexual. Y entre los primeros, un grupo protagoniza una fuga de película: aprovechando las cámaras de aire bajo la prisión, organizan turnos para cavar durante semanas un túnel bajo la enfermería con la ayuda de herramientas hechas con el metal de los útiles de cocina. Los lidera un guerrillero de gran autoridad moral, Ramón Vía. Se fugan durante la madrugada del 1 de mayo de 1946. Escapan al menos 26: algunos murieron en refriegas con la Guardia Civil, otros fueron delatados y algunos llegaron a la sierra y murieron allí, luchando contra la dictadura. Portada del expediente del Archivo Militar Territorial Detenida por pintar “pan, trabajo y libertad” La cárcel es reflejo de la evolución del franquismo y sus opositores. En los años previos a la Transición se llena de gente muy joven, incluso menores de edad, militantes de sindicatos clandestinos que esperan en prisión a que un tribunal de orden público dicte sentencia. “En aquella época te enviaban a la cárcel por nada”, cuenta Soledad Garbero, a la que descubrieron haciendo una pintada donde se leía “pan, trabajo y libertad”. “Me tuvieron en el cuartel durante tres días, recibiendo alguna que otra hostia, sentada en el suelo, para intentar sacarme información. Luego me enviaron a la cárcel un par de meses”. De la segunda detención llegó “en volandas” al juzgado, en tan malas condiciones que el juez llamó al forense y la dejaron en libertad bajo palabra. José Galisteo, también militante de CCOO, pisó tres veces la cárcel. La primera, en 1967, tras una acción de protesta en la Plaza de la Constitución (por entonces Plaza de José Antonio). “Estaba lo más desgraciado de la sociedad: carrilanos [gente sin casa a la que aplicaban la ley de vagos y maleantes] que pedían ayuda, algún bocadillo, jabón. También delincuentes habituales de baja estofa”. La segunda vez, por organizar la comisión obrera en Intelhorce, aunque formalmente su acusación era la habitual: propaganda y manifestación ilegal. En aquella le maltrataron en el cuartel para intentar sacarle nombres. De la tercera, en mayo del 68, salió condenado a un año y tres meses, así que huyó a Barcelona. En los ochenta hizo estragos la heroína. “Los vecinos son testigos de cómo se lanza la droga por encima de las tapias”. Son, también, los años de plomo de ETA, que en 1991 hace explotar aquí un coche bomba que hiere a siete personas y destroza comercios, viviendas y el centro escolar contiguo. A partir de ese año, la mayoría de presos fueron trasladados a la nueva prisión en Alhaurín de la Torre, y la de Cruz de Humilladero quedó como prisión de régimen abierto, hasta su cierre definitivo en 2009. Salvador es un vecino que la conoce bien: pasa muchos ratos junto a la valla, por robar un coche pasó 15 días en ella en 1982, y su padre estuvo décadas proveyendo la madera para la panadería. “Es una pena que esté así, me parece muy bien que se haga algo con ella y que gente como yo pueda hacer cursillos”. Pero cuando se le dice que será privada tuerce el gesto: “Ya no saben cómo trincar”. “Queda una labor por hacer, a nivel histórico, para valorar el tiempo de detención y cómo afecta a la vida de estas personas. La prisión es un reflejo de nuestra sociedad”, concluye Zugasti. “Es muy distópico que eso se pueda convertir en un centro educativo”. “Privatizarla es un crimen”, rechaza Garbero. Y Galisteo recuerda que la Modelo de Barcelona es hoy un gran espacio cultural con una biblioteca y un centro de la memoria. “Un centro privado de FP es inadmisible, una falta de respeto”.

Josep Lanuza, el cerebro político de izquierdas que acompañó a Mazón al Cecopi, testigo ante la jueza de la dana

Josep Lanuza, el cerebro político de izquierdas que acompañó a Mazón al Cecopi, testigo ante la jueza de la dana

El asesor valenciano a sueldo del president en funciones, figura incómoda para sus antigos camaradas, proviene de la izquierda y conoce los secretos de la última etapa del PP en el Palau de la Generalitat El PP pagó 411.000 euros en las generales del 28A a una empresa de los autores de la campaña sucia contra la izquierda Carlos Mazón no llegó solo a la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) del 29 de octubre de 2024. A las 20.28 de aquella trágica jornada, cuando ya había decenas y decenas de fallecidos a consecuencia de la dana, Mazón cruzó la entrada del edificio principal del Centro de Coordinación de Emergencias de l'Eliana acompañado por la jefa de prensa de Presidencia, la directora general Maite Gómez, y por un asesor externo contratado por el PP valenciano que llegó a convertirse en la sombra del president en el Palau de la Generalitat, a pesar de no ser personal eventual de la sede del poder autonómico. Se trata de Josep Lanuza, influyente consultor político que proviene de la izquierda valenciana y que, de hecho, llegó a compartir una empresa con relevantes cargos del PSPV-PSOE en sus tiempos mozos. Lanuza, junto con Maite Gómez, ha sido citado como testigo por la jueza instructora de la causa de la dana por si pudiera aclarar algo sobre las llamadas que hizo Carlos Mazón a la entonces consellera Salomé Pradas mientras el jefe del Consell iba de camino al Cecopi tras haber alargado la sobremesa de la comida con la periodista Maribel Vilaplana en el restaurante El Ventorro. El asesor más influyente en la estrategia de Mazón es un viejo conocido de la izquierda valenciana, aunque hoy por hoy resulta incómodo para muchos de sus antiguos camaradas. No en vano, Lanuza estuvo vinculado a una campaña de intoxicación para desmovilizar a la izquierda cuando trabajaba para el consultor Aleix Sanmartín, gurú electoral de Pablo Casado en el PP, tal como desveló elDiario.es en 2019 (en una serie de informaciones avaladas por el Tribunal Supremo ). Con esos antecedentes, Josep Lanuza aterrizó en el equipo de Mazón, siempre pegado al teléfono móvil. Tan cercano fue al jefe del Consell, actualmente en funciones tras su renuncia, que era una de las personas que escoltaba a Carlos Mazón cuando, ya casi a la hora de cenar, llegó al Centro de Emergencias, tal como se aprecia en las imágenes grabadas por À Punt y por una productora externa contratada por la Generalitat que ilustran esta información. Lanuza aparece grabando videos con un teléfono móvil en posición vertical. De 'scout' a concejal del PSPV-PSOE Ni en sus sueños más húmedos, en sus inicios en el mundo de la política, imaginaba el consultor que llegaría a asesorar al núcleo del poder autonómico de su estimado País Valenciano. Sin embargo, quienes le conocieron en el Consell Valencià de la Joventut (CVJ), hace más de dos décadas, ya veían que aquel chaval proveniente de los 'scouts' llegaría lejos. Josep Lanuza, oriundo de Alboraia, llegó a presidir el CVJ, auténtica cantera de futuros cuadros y cargos de los partidos, y a encabezar su séptima comisión permanente, entre 2003 y 2005. “Este chico”, recuerda una fuente que lo trató de cerca, “ya en la época del movimiento asociativo juvenil era una persona que se le notaba cierta capacidad camaleónica, de participar no tanto por principios como por estrategia personal”. Josep Lanuza, cuarto por la derecha, en una cena del Consell Valencià de la Joventut. Los orígenes políticos más remotos de Lanuza se sitúan en Alboraia, un municipio de l'Horta Nord bien conectado con la ciudad. Allí, Lanuza creció políticamente a la sombra de Joan Barres, alcalde de la localidad por el PSPV-PSOE entre 1983 y 1987 y entre 1994 y 1999. Barres, tras la ruptura con los socialistas, se montó un partido independiente y, posteriormente, acabó militando en Esquerra Republicana del País Valencià (ERPV), formación alrededor de la cual Lanuza acabaría a la postre orbitando cuando estaba liderada por el jativés Agustí Cerdà. “No llegó a militar, aunque lo recuerdo cercano a Agustí Cerdà”, dice un antiguo miembro de la filial en el País Valenciano de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). “Lanuza es de ideología nacionalista y de izquierdas y se puso a asesorar a ERPV”, tercia otro antiguo miembro de la formación, prácticamente residual en la política valenciana ante el éxito de Compromís en ese amplio espacio ideológico. En la onda de los Països Catalans El consultor aún figura, a ojos del Registro Mercantil, como secretario de la Fundació Francesc de Vinatea Valencians en Moviment. Fue inscrita en el Registro de Fundaciones en 2006, con Raül Garay de presidente y Vicenta Lostado de vicepresidenta. Se trata de dos veteranos militantes de base de ERPV. Agustí Cerdà, exdiputado en el Congreso y líder de ERPV entre 2000 y 2016, sostiene que el presidente y la vicepresidenta de la fundación de la que Lanuza fue secretario, actualmente inactiva, no tenían cargos orgánicos en el partido ni llegaron a ser dirigentes. En los estatutos de la Fundació Francesc de Vinatea, figura entre sus objetivos la promoción de la cultura y el fomento y la difusión de los estudios históricos “de los Països Catalans”, concepto que se erige tradicionalmente en una de las mayores bestias negras del PP valenciano. En 2007, Lanuza fue elegido concejal del PSPV en Alboraia, aunque acabaría abandonando la política municipal tras las fuertes luchas internas de los socialistas de la localidad. También se formó en la Fundación Jaime Vera del PSOE. De hecho, la participación en sus cursos de verano le cambió la vida para siempre. Allí coincidió con el politólogo Aleix Sanmartín , asesor del entonces ministro de Exteriores socialista, Miguel Ángel Moratinos. El maestro Aleix Sanmartín Sanmartín animaba a los alumnos —cuadros jóvenes de las filas socialistas— a consolidar los proyectos que trabajaban en sus clases. Josep Lanuza tomó nota de los consejos del asesor y creó una empresa junto a otros jóvenes socialistas valencianos: Daysi Com Consultoría Política SL, con domicilio social en Alboraia. La firma tenía como objeto social la “prestación de servicios de consultoría jurídica”. En esa aventura, se embarcaron Roger Cerdà, actual alcalde de Xàtiva, y Rubén Estornell, que también había participado en el curso de la Fundación Jaime Vera. Cerdà recuerda que Josep Lanuza era un joven “muy lanzado” y con las cosas muy claras. “La empresa duró poco tiempo, y el único que cobró un sueldo de la misma fue Lanuza. A mí me costó 1.000 euros para la constitución”, recuerda. El consultor político Aleix Sanmartín, en una imagen de archivo. Tras el intento de montar proyectos con sus compañeros del PSPV, que hicieron carrera por su cuenta, se alió con Aleix Sanmartín y se especializó en contracampañas políticas. Titulado en Informática, Lanuza siguió formándose con asignaturas sueltas y másteres aquí y allá, en materias como análisis de datos electorales, sociología de la comunicación, marketing político o investigación y técnicas de mercado. Inspirado por series como El ala oeste de la Casa Blanca , fue engrosando las filas de la legión de estrategas electorales con ínfulas de vender táctica electoral y comunicación al mejor postor: un mundo peculiar en el que más de un cantamañanas con suerte, tras algún éxito de chiripa, ha llegado a coronarse en los máximos puestos institucionales. Lanuza, por el contrario, es considerado como “superinteresante” por alguien que lo concoce desde tiempo atrás. “Entiende de política y de juego sucio, se juntó con Aleix y le salió bien”, cuenta la misma fuente. “El surgimiento de Steve Bannon le flipó”, apostilla de paso. Otra fuente destaca el ambiente familiar en el que se crió, progresista y muy culto, que contrasta de plano con sus actuales jefes. “Dudosas connotaciones éticas” Sin embargo, no todo es tan elegante como la ficción televisiva. Roger Cerdà cuenta que se distanciaron cuando Lanuza tomó un camino, a su juicio, de “dudosas connotaciones éticas”. Y hasta la fecha. Desencantado tras la experiencia municipal y con la empresa desactivada, Lanuza profesionalizó su papel de consultor político. Una década después de su primera aventura empresarial, fue nombrado administrador único de Publyck Worldwide SL. Por el camino, conoció bien zonas de Catalunya como Girona, donde trabajó de asesor para el PSC. Josep Lanuza, siempre bajo la batuta de su amigo Aleix Sanmartín, fue contratado por el PP de Juanma Moreno de cara a las históricas elecciones andaluzas de 2018 que perdió el PSOE tras décadas de hegemonía. “Es un tío inteligente al que le encantan estos retos”, cuenta una persona que lo conoce desde hace muchos años. Al año siguiente, el asesor trabajaría para el popular Fernando López Miras en Murcia y para el socialista Guillermo Fernández Vara en Extremadura. También ha trabajado a derecha e izquierda del bipartidismo, tanto en el País Valenciano como en el resto del territorio. De Andalucía y México al Palau de la Generalitat El PP, tal como informó este diario , abonó 411.400 euros a la empresa Publyck Worldwide SL en 2019, según la documentación del Tribunal de Cuentas. En aquella época, además de en Andalucía, Murcia y Extremadura, Josep Lanuza también ejercería de asesor en varios países de Amércia Latina, especialmente México. La experiencia en Andalucía propició su último destino: asesorar a un alicantino llamado Carlos Mazón, muy cercano a Pablo Casado, que aspiraba en 2023 a presidir la Generalitat Valenciana. Muy alejado de las coordenadas ideológicas y culturales del consultor, Mazón se perfilaba como el candidato que podía poner fin a las dos legislaturas de Gobierno progresista del Pacte del Botànic, presidido por el socialista Ximo Puig. El estratega Lanuza colaboró en la campaña de los populares, pilotada por el periodista José Manuel Cuenca. Tras las elecciones y el pacto con Vox para formar un Consell de unidad entre las derechas, Cuenca fue nombrado jefe de gabinete de Mazón y secretario autonómico de Comunicación y Lanuza, asesor externo del PP valenciano. El callejón sin salida del Ventorro Muy presente en el Palau, el trabajo de Lanuza del último año se ha centrado, como todo el Consell en su conjunto, en tratar de responder a la más que cuestionada gestión de la dana del 29 de octubre de 2024, que dejó 229 fallecidos. Con poco éxito, a la vista del resultado final. Tras la renuncia del president y en plena batalla interna en el PP por la sucesión de Mazón, sigue contratado por el partido, aunque su jefe ya ni siquiera frecuente el Palau de la Generalitat. Aquella tarde-noche del 29 de octubre en que acompañó al president al Cecopi, empezó el lento declive de un político que alargó la inoportuna comilona con Maribel Vilaplana en El Ventorro hasta límites horarios insospechados. Ni el mejor de los consultores políticos sería capaz de contrarestar tal metida de pata épica. Tampoco Josep Lanuza. “Es muy buen tío, aunque no tiene escrúpulos para el trabajo”, afirma una fuente que lo conoció muy de cerca hace unos cuantos años y aún mantiene una relación cordial con él. Lanuza ha declinado contestar las preguntas de este diario.

El cambio climático, cuyo negacionismo impone Vox al PP en la Generalitat, agravó un 20% la virulencia de la dana

El cambio climático, cuyo negacionismo impone Vox al PP en la Generalitat, agravó un 20% la virulencia de la dana

Un estudio del CSIC concluye que el calentamiento global agravó las lluvias que dejaron 229 fallecidos en Valencia y uno de sus autores considera “lamentable” que se cuestione el Pacto Verde Europeo; Santiago Abascal exige al PP que torpedee su aplicación si quiere su apoyo para investir a un nuevo presidente de la Generalitat Valenciana Ataques a la inmigración, al valenciano o al Pacto Verde: la agenda ultra de Vox que debe asumir el PP para mantener la Generalitat Valenciana “La atribución de la dana de Valencia confirma una nueva realidad climática y subraya la necesidad de una acción conjunta entre ciencia, instituciones y ciudadanía para hacer frente a sus impactos. El cambio climático y el Pacto Verde Europeo no son ni de izquierdas ni de derechas, son evidencias científicas e ir en contra es ir en contra de nosotros mismos”. El investigador del Instituto de Geociencias (IGEO), David Barriopedro, se ha pronunciado en estos términos a preguntas de elDiario.es en relación con el estudio que ha elaborado de la mano del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad Complutense de Madrid (UCM), junto a otros expertos como José Manuel Garrido-Pérez, de la UCM, y Soledad Collazo, también del IGEO. El trabajo, que también concluye que las precipitaciones del 29 de octubre de 2024 aumentaron hasta un 20% por el calentamiento global, se difundió el pasado jueves 6 de noviembre mientras Vox advertía al PP de que una de sus condiciones para apoyar a un nuevo presidente de los populares para la Generalitat Valenciana era acabar con el Pacto Verde Europeo. El jefe del Consell en funciones, Carlos Mazón, ya criticó el pasado mes de marzo el “dogmatismo climático” para ganarse el apoyo de los ultras a los presupuestos autonómicos, a pesar de que el PP, con la presidenta de la Comisión Europea a la cabeza, la también popular Úrsula von der Leyen, apoya la Agenda 2030 en Bruselas. Ahora los de Santiago Abascal han advertido a los de Alberto Núñez Feijóo que si quieren su apoyo para investir a un nuevo presidente tras la dimisión de Mazón, deberán asumir su agenda repleta de medidas negacionistas del cambio climático, o como ellos lo denominan, “fanatismo climático”. Para Barriopedro, “es lamentable que se cuestione el Pacto Verde porque está basado en evidencias científicas, no sabemos qué más tiene que pasar para darnos cuenta de que ya vamos tarde; precisamente la idea de este estudio y de otros que van en la misma línea que se han presentado es que sirva para que se tomen las mejores decisiones políticas a la hora de distribuir los fondos públicos”. Contenido del estudio El estudio presentado es contundente y acredita nuevamente la influencia del cambio climático en la intensidad de fenómenos meteorológicos como la dana. “El calentamiento de la atmósfera provocado por la actividad humana, unido a un aire y un mar cálidos, hace que se aloje más vapor de agua, lo que está relacionado con una mayor intensidad de fenómenos como la dana”, explica Barriopedro a preguntas de esta redacción. Según el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el trabajo de los expertos concluye que el cambio climático influyó en la intensidad de las lluvias registradas durante la dana de Valencia. Los resultados, basados en tres métodos complementarios, apuntan a que las precipitaciones del 29 de octubre de 2024 en el sureste de España aumentaron hasta un 20% debido al calentamiento global. También señalan que estos episodios de dana vienen acompañados de más precipitación que hace unas décadas debido, en parte, al calentamiento del mar, aunque “esta señal es aún poco robusta por la alta variabilidad de estos fenómenos”. El 29 de octubre de 2024, una depresión aislada en niveles altos (dana), alimentada por la entrada de aire muy cálido y húmedo del mar Mediterráneo, desencadenó intensas precipitaciones en el sureste de la península ibérica. Únicamente en la provincia de Valencia se registraron cifras récord: hasta 720 litros por metro cuadrado en 12 horas. “Nuestros resultados indican que el cambio climático no causó la dana, ni ha modificado apreciablemente su frecuencia de ocurrencia, pero sí la hizo más lluviosa”, resumen los investigadores del estudio publicado en la revista Bulletin of the American Meteorological Society . Tres miradas a un mismo evento El trabajo combina tres métodos complementarios de atribución para determinar si el calentamiento global influyó en la intensidad y probabilidad del evento meteorológico. “Cada enfoque responde a una pregunta distinta. Juntos ofrecen una visión más completa del papel del cambio climático en la catástrofe”, explica Barriopedro. En primer lugar, los autores emplearon un enfoque probabilístico, mediante el cual analizaron si las precipitaciones de esa magnitud son hoy más frecuentes e intensas que en el pasado. Según este método, no encontraron una tendencia reciente clara hacia un aumento en la frecuencia de lluvias tan extremas como las de la dana de Valencia. “Esto refleja la gran variabilidad natural del clima mediterráneo, y coincide con otros estudios recientes basados en observaciones”, señala José Manuel Garrido-Pérez, investigador de la UCM. En segundo lugar, el equipo empleó un método de análogos para estudiar el efecto del calentamiento global en las precipitaciones asociadas a danas similares a las del evento. Ahí es cuando emergen señales claras de influencia humana: “En promedio, estos episodios dejan más precipitación que hace unas décadas –asegura Soledad Collazo, investigadora del IGEO- aunque esta señal aún es pequeña y poco robusta por la alta variabilidad del fenómeno”. Por último, se usó un enfoque 'storyline', que recrea el episodio en un escenario sin influencia humana mediante modelos de predicción meteorológica basados en inteligencia artificial (IA). En este caso, los modelos inicializados con las condiciones atmosféricas que precedieron al evento son capaces de reproducir la tormenta con varios días de antelación. Asimismo, confirman que en un clima sin influencia humana las precipitaciones habrían sido hasta un 20% menos intensas en algunas zonas afectadas por la dana. En cambio, la circulación atmosférica —los patrones de viento y presión— no muestran variaciones claras. “El evento habría ocurrido igualmente, pero las precipitaciones habrían sido menos intensas, ya que la atmósfera habría contenido menos humedad disponible para formar tormentas”, afirma Bernat Jiménez-Esteve, investigador del IGEO. Barriopedro explica que se aplicaron las mismas condiciones de la dana del 29 de octubre de 2024 al año 1850, un periodo preindustrial con un calentamiento global provocado por la emisión de gases de invernadero menor que en la actualidad: “El modelo revela que las lluvias hubieran sido un 20% menos intensas”, reitera. El estudio utiliza datos diarios y modelos con una resolución de aproximadamente 25 kilómetros, una escala que no permite capturar lluvias muy localizadas o de corta duración. Sin embargo, los autores señalan que existen evidencias de que la señal del cambio climático podría verse amplificada en fenómenos convectivos de menor escala. Atribución en la toma de decisiones El estudio propone un marco integrador para futuras investigaciones de atribución, basado en la combinación de diferentes métodos. Los autores concluyen que este enfoque mejora la comunicación del riesgo y evita mensajes contradictorios, lo que resulta esencial para diseñar políticas de adaptación, mejorar los sistemas de alerta y planificar infraestructuras resilientes. “El valor está en sumar evidencias”, señala Ricardo García-Herrera, investigador del IGEO. “La atribución de la dana de Valencia confirma una nueva realidad climática y subraya la necesidad de una acción conjunta entre ciencia, instituciones y ciudadanía para hacer frente a sus impactos”, concluye Barriopedro.

Tres meses de los peores incendios de Castilla y León: "Lo que antes valía ya no sirve, aunque la Junta no quiera reconocerlo"

Tres meses de los peores incendios de Castilla y León: "Lo que antes valía ya no sirve, aunque la Junta no quiera reconocerlo"

Trabajadores, expertos y el gobierno reconocen que el operativo se ha visto desbordado ante la simultaneidad y fuerza de los incendios: "La extinción de los incendios se ha sacado adelante por el capital humano y por la buena voluntad de la gente" Menos permisos para talas y desbroces: la Junta de Castilla y León rebaja normas medioambientales en su nueva estrategia de lucha contra incendios En apenas unas horas, el operativo antiincendios se descontroló: los efectivos de El Bierzo estaban en Ávila, y a León tuvieron que desplazarse los de Villardeciervos. Y a Zamora tuvieron que acercarse los trabajadores de Salamanca, según varios miembros del operativo. Se cumplen tres meses de los peores incendios de Castilla y León, que quemaron más de 150.000 hectáreas según los datos provisionales, y los técnicos no pueden evitar sentirse hastiados: el cansancio protagonizó esos días en los que el operativo no dio de sí, y ahora ven cómo el gobierno de Mañueco se niega a negociar con los sindicatos e intenta parchear una infraestructura que consideran ineficaz justo antes de las elecciones autonómicas, previstas para marzo de 2026. El 8 de agosto prendía un fuego en Ávila (San Bartolomé de Pinares). Veinticuatro horas después, había otros cinco incendios activos en León que se descontrolaban: Fasgar, Orallo, Anllares del Sil, Llamas de Cabrera y Yeres. El domingo 10 de agosto había nuevos focos en León (Nogarejas), Zamora (Molezuelas de la Carballeda) y Palencia (Resoba, en Cervera de Pisuerga) y los ya descontrolados de la Cabrera leonesa llegaron y arrasaron el Patrimonio de la Humanidad de Las Médulas . Tres días después empezó el fuego en San Cristóbal de los Mochuelos (Cipérez), Salamanca, que ha sido también el peor incendio que ha vivido la provincia charra. En total, se calcula que al menos se han quemado más de 150.000 hectáreas y hay cinco muertes vinculadas a los incendios: tres voluntarios que intentaban sofocar las llamas en León y dos bomberos forestales (uno que se dirigía a un incendio en Ávila y tuvo un accidente mortal con su vehículo y otro trabajando en la extinción de un fuego en León). También falleció un hombre que estuvo colaborando en la extinción del incendio de Cipérez (Salamanca) pero cuyo fallecimiento la Junta desvincula del fuego. La familia explicó entonces que el fallecido, de 45 años, “sufrió un fuerte dolor torácico y en la garganta, además de la inmovilización de su pierna derecha, lo que requirió su evacuación por parte de otros voluntarios, al no poder salir por sus propios medios”. Este verano ha sido el de los “megaincendios”, esos fuegos de sexta generación para los que el operativo actual no tiene suficientes medios. En España se considera un gran incendio aquel que supera las 500 hectáreas. Solo este verano, Castilla y León ha vivido una decena de grandes incendios forestales, alguno de los cuales han superado por sí solo las 30.000 hectáreas. Trabajadores, expertos y el gobierno reconocen que el operativo se ha visto desbordado ante la simultaneidad y fuerza de los incendios. La expectativa del verano no era buena, pero ha sido superada. “La extinción de los incendios se ha sacado adelante por el capital humano y por la buena voluntad de la gente”, defiende el coordinador estatal de agentes medioambientales de CCOO, Jorge Nieto. La Fiscalía de Castilla y León ha abierto diligencias para investigar penalmente al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y el consejero de Medio Ambiente, el leonés Juan Carlos Suárez-Quiñones, por la gestión política de la oleada de incendios del pasado verano, según le ha comunicado el propio Ministerio Público a la asociación Bierzo Aire Limpio. La decisión es consecuencia de una denuncia presentada por el colectivo , que ve posibles delitos contra el medio ambiente, omisión del deber de socorro y otros ilícitos “vinculados a la inacción y deficiente actuación de la administración autonómica”. Carteles en la provincia de León que piden la dimisión del consejero Suárez-Quiñones y del director General de Política Forestal Suárez-Quiñones sigue sin comparecer en las Cortes En tres semanas, se han quemado parajes históricos y de gran valor ecológico como Las Médulas (Patrimonio de la Humanidad) o el Valle de Pineda (Palencia). La Junta de Castilla y León aún no ha facilitado el dato definitivo de hectáreas afectadas, a la espera de que el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, comparezca en el parlamento autonómico una vez debatidos los Presupuestos. En un principio, Suárez-Quiñones se comprometió a realizar el balance correspondiente en octubre de este año, algo que no ha sucedido. En años anteriores, el consejero hizo el balance en noviembre y en 2022, cuando hubo varios incendios en Zamora, compareció de manera extraordinaria en julio. También hay una dificultad añadida para hacer balance de daños: la herramienta de la Junta de Castilla y León (Inforcyl), de la que tanto presumió el consejero en su presentación, no permite ver los datos históricos, aunque fueran los provisionales, que permitían hacerse una idea más clara de la situación. El sistema de partes de incendios que había antes se conservaban en la web de la Consejería y se podían utilizar para calcular las hectáreas afectadas por provincias según los cálculos iniciales. Ahora es necesario remontarse a las hemerotecas de los medios de comunicación, porque la Junta de Castilla y León ya no permite ver esos datos. “La campaña ha sido mala. Es una cuestión objetiva en base al número de incendios, la superficie que ha sido alcanzada y al tipo de vegetación que ha afectado. Ha habido años donde ha ardido muchísima superficie, pero la arbolada no ha sido tan elevada, por lo que el impacto es de menor recorrido”, señala Pablo Martín Pinto, catedrático en incendios forestales. La Red Temática Internacional sobre Incendios Forestales (FUEGORED), integrada por 512 miembros, recuerda que este año se ha vivido una ola de calor “sin precedentes” que duró 16 días y mostró “un desvío térmico de +4,6 °C en comparación con el clima preindustrial”. Pedro Sánchez hablando con Mañueco tras los incendios en Laciana Cuatro meses sin lluvia efectiva Francisco José Comuñas lleva 31 años trabajando como agente medioambiental. “Antes era normal que si la primavera era lluviosa, también lo fuera junio. Y aunque hubiera mucho pasto y combustible, la humedad era más alta, las tormentas eran lluviosas. Pero lo que antes valía ya no sirve, aunque la Junta de Castilla y León no quiera reconocerlo. Este año no llovió en junio ni en verano. Estuvimos cuatro meses sin ver lluvia efectiva”, recuerda el portavoz del Sindicato Profesional de Agentes Medioambientales de UGT. Comuñas cree que el operativo no ha sido el “adecuado” para las situaciones que pueden vivirse a partir de ahora. Desde CCOO opinan que en los últimos dos años Castilla y León ha tenido un “indulto climático” y reprocha que la Junta de Castilla y León no los haya aprovechado para prepararse para futuros megaincendios. “Tenemos un modelo desactualizado con costurones y medios que están solapados y no imbricados, con personas trabajando hasta 18 horas. Y ahora presentan unos decretos-ley [que tienen que convalidar las Cortes] que no han sido negociados con el sector y que no suponen ninguna medida de calado, con enmiendas a otras normas aprobadas este mismo 2025”, resume el responsable de Medio Ambiente de CCOO CyL, José Ramón Jiménez. Los sindicatos reivindican que el operativo sea 100% público (no a través de Tragsa o Somacyl como temen que hará el gobierno de Mañueco) y que se profesionalice a través de contratos estables que permitan también reforzar los trabajos preventivos durante los periodos de bajo peligro de incendios. Martín Pinto, profesor de Incendios Forestales en la ETS de Ingenierías Agrarias de Palencia, pide que todos los ámbitos (político, técnico y científico) trabajen de manera “sinérgica” y pone en valor el trabajo que se ha hecho. “El dispositivo está dimensionado para abordar circunstancias de cierta normalidad. Se puede redimensionar el dispositivo, pero si el dinero va a multiplicar el dispositivo no va a otras cosas. Ahí es donde la sociedad tiene que ver cuál es la prioridad, es como en la economía doméstica. ¿A qué vamos a tener que renunciar? Es lo que hay que valorar como sociedad”, reflexiona. Zona arrasada por los incendios en los alrededores de la localidad zamorana de San Martín de Castañeda.EFE/Mariam A. Montesinos Sindicatos y expertos coinciden en que otra de las causas de estos incendios es el desuso del medio rural. “Se ha dado ese cóctel que ha dado lugar a este verano tan horrible. El abandono del campo, de los usos rurales, el desarrollo de matorralización, que arde con más virulencia y que engancha con masas forestales colindantes... Ese combustible está directamente relacionado con la intensidad del fuego. Y se solapó con las circunstancias climáticas negativas extremas de este verano”, explica Martín Pinto, catedrático en incendios forestales. En la comunidad hay más de 700 municipios que no tienen un plan de actuación local de emergencia ante incendios forestales —obligatorio desde 2013— a pesar de que están en zonas de “máximo riesgo” de incendio para establecer unos 'anillos de seguridad'. UGT reclama a la Junta de Castilla y León que respalde a estos ayuntamientos, que en muchas ocasiones tienen poca población —aunque la única capital que cuenta con un plan similar es Salamanca—, porque además las tierras que deberían formar parte de esos 'anillos de seguridad' son tierras particulares o minifundios y en muchas ocasiones se desconoce quiénes son los propietarios. También debe tenerse en cuenta el gasto que supone, en veranos como este, indemnizar a las víctimas de los incendios. El Consejo de Gobierno de Castilla y León ha aprobado más de 33 millones de euros en compensaciones y trabajos de recuperación de la zona. Solo en los pueblos leoneses, se han tenido que suministrar 118.000 litros de agua potable como consecuencia de los incendios, que han derivado en la contaminación de las aguas subterráneas por ceniza. “Es una salvajada lo que van a costar estos incendios”, reprocha Jiménez, que cree que con un presupuesto similar al que hay en extinción de incendios se podría reorganizar el operativo actual para evitar los problemas que hay. “Ahora lo que hay es una caja de grillo. Puedes tener en el mismo incendio a cuatro personas haciendo lo mismo; pero con cuatro contratos distintos, con lo que supone de coordinación”, suscribe Nieto. Tras los incendios de 2022, la Junta firmó unos acuerdos con la patronal, UGT y CCOO en el seno del Diálogo Social, que mejoraron parte del operativo —todavía y en parte en manos de unas 35 empresas— pero de manera insuficiente, para los sindicatos. CCOO acusa a la Junta de “interpretar de manera torticera” algunos de los puntos del acuerdo. Para todos los sindicatos y organizaciones profesionales, tanto el consejero como el director general de Patrimonio Natural, José Ángel Arranz, no están legitimados a seguir en sus puestos y a negociar condiciones del nuevo operativo, porque ya no se fían de ellos. El 60% de Las Médulas, afectado Uno de los incendios de Castilla y León que traspasó las fronteras mediáticas fue el de Las Médulas, Patrimonio de la Humanidad. El incendio de Yeres (3.900 hectáreas) alcanzó al 60% del espacio protegido como Bien de Interés Cultural, aunque no afectó directamente a la Cuevona y solo parcialmente a la imagen del circo que habitualmente visitan los turistas. Durante el incendio, el CSIC activó el Grupo de Asesoramiento de Desastres y Emergencias (GADE) para prestar asesoramiento científico-técnico en la zona de Las Médulas. Están trabajando unos 70 expertos entre el personal de gabinete y el de campo, y se espera que el grupo siga activado hasta finales de diciembre, cuando esperan haber concluido los primeros informes sobre el impacto a corto plazo del incendio. El coordinador de riesgos forestales del CSIC y del GADE, Javier Madrigal, asegura que se han localizado unas cien hectáreas sobre las que se debe actuar de manera “prioritaria” —asegura que la Junta ya está en ello— y espera que la regeneración de la zona sea “muy buena” porque el ecosistema de Las Médulas está “adaptado al fuego”. “Se espera que en tres o cuatro años esté todo el manto vegetal verde, aunque para el arbolado sí hará falta más tiempo. Hay que dar tiempo a la vegetación para ver si la afectación es temporal o más duradera, a ver si regenera. Los castaños, matorrales, robles y encinas regeneran bien por cepa y las especies germinadoras regeneran bien por semilla, para lo que hay que esperar a primavera”, reconoce. Cercanías de Las Médulas arrasadas por el fuego Actualmente se está evaluando el daño ecológico en la vegetación y el suelo a través de imágenes satelitales y el recorrido de campo. Además, con un grupo de drones se pretende levantar un mapa 3D de la zona que sirva para la evaluación a corto plazo y también a largo plazo, que tenga en cuenta el valor geológico de la zona. El trabajo de campo para analizar la afectación de los castañares también se está terminando y está previsto estudiar la afección de la biodiversidad del suelo y explica que, si la Fundación Las Médulas quisiera financiar un seguimiento de la fauna más a largo plazo, el CSIC estará a su disposición. “Sí se va a hacer un estudio piloto para ver qué fauna está visitando la zona quemada, si está volviendo poco a poco o si hay que esperar un poco más. Son procesos que tienen sus tiempos”, insiste el coordinador de riesgos forestales del CSIC. El GADE también ha identificado el riesgo de deslizamientos del terreno o de caída de rocas, especialmente después de las últimas lluvias, por lo que insiste en la necesidad de que los visitantes respeten las señales, que han sido reforzadas. Pablo Martín Pinto reconoce que aún quedan “muchas cosas que afinar y mejorar”, pero reconoce “a excelente gestión” que se ha hecho ante una situación tan complicada como la que ha vivido Castilla y León en las tres últimas semanas de agosto. El incendio de Fasgar, por ejemplo, que se inició el 8 de agosto, no fue extinguido hasta el 14 de octubre. Muchos más meses serán necesarios para que todas las zonas se recuperen de la situación.