Por qué el yogur entero puede ser más sano que el desnatado
Desde hace años la noción de desnatado se ha asociado indiscutiblemente con la saludable. No obstante, la evidencia científica y […]
Desde hace años la noción de desnatado se ha asociado indiscutiblemente con la saludable. No obstante, la evidencia científica y […]
Según lo cuenta ella misma, es evidente que todo empezó de niña. “Mi juguete favorito era un Quimicefa”, arranca Estefanía Ferrer, cofundadora de Lico Cosmetics, rememorando aquel juego infantil tan de moda en los 80 que permitía realizar experimentos científicos de forma controlada. “Puedes hacerte una idea de la pasión que tengo por la formulación”, añade esta ingeniera química sevillana convertida en emprendedora.
Según lo cuenta ella misma, es evidente que todo empezó de niña. “Mi juguete favorito era un Quimicefa”, arranca Estefanía Ferrer, cofundadora de Lico Cosmetics, rememorando aquel juego infantil tan de moda en los 80 que permitía realizar experimentos científicos de forma controlada. “Puedes hacerte una idea de la pasión que tengo por la formulación”, añade esta ingeniera química sevillana convertida en emprendedora.
Según lo cuenta ella misma, es evidente que todo empezó de niña. “Mi juguete favorito era un Quimicefa”, arranca Estefanía Ferrer, cofundadora de Lico Cosmetics, rememorando aquel juego infantil tan de moda en los 80 que permitía realizar experimentos científicos de forma controlada. “Puedes hacerte una idea de la pasión que tengo por la formulación”, añade esta ingeniera química sevillana convertida en emprendedora.
Según lo cuenta ella misma, es evidente que todo empezó de niña. “Mi juguete favorito era un Quimicefa”, arranca Estefanía Ferrer, cofundadora de Lico Cosmetics, rememorando aquel juego infantil tan de moda en los 80 que permitía realizar experimentos científicos de forma controlada. “Puedes hacerte una idea de la pasión que tengo por la formulación”, añade esta ingeniera química sevillana convertida en emprendedora.
Según lo cuenta ella misma, es evidente que todo empezó de niña. “Mi juguete favorito era un Quimicefa”, arranca Estefanía Ferrer, cofundadora de Lico Cosmetics, rememorando aquel juego infantil tan de moda en los 80 que permitía realizar experimentos científicos de forma controlada. “Puedes hacerte una idea de la pasión que tengo por la formulación”, añade esta ingeniera química sevillana convertida en emprendedora.
Según lo cuenta ella misma, es evidente que todo empezó de niña. “Mi juguete favorito era un Quimicefa”, arranca Estefanía Ferrer, cofundadora de Lico Cosmetics, rememorando aquel juego infantil tan de moda en los 80 que permitía realizar experimentos científicos de forma controlada. “Puedes hacerte una idea de la pasión que tengo por la formulación”, añade esta ingeniera química sevillana convertida en emprendedora.
La mirada del realizador sobre este microcosmos es tan vitriólica como irónica...
El suceso ha ocurrido a primera hora de la mañana de este domingo en la prolongación de avenida Almogávares junto a los pabellones del antiguo hospital militar Un turismo se ha salido de la vía cuando circulaba este domingo por la prolongación de la avenida Almogávares, en sentido hacia el Vial, y ha acabado subido en la fuente pública que se ubica en esa zona. A primera hora de la mañana, se podía ver el vehículo montado encima de la fuente escalonada sobre la pendiente de la avenida en ese punto, junto a los pabellones del antiguo hospital militar. Operarios de la empresa municipal de aguas, Emacsa, se han desplazado hasta el lugar, así como técnicos con una grúa para poder sacar al vehículo de la zona de la fuente. El coche encima de la fuente en avenida Almogávares.
El juzgado considera que no hay pruebas, ya que la boda se celebró en el ámbito de su comunidad y la transacción no se registró
Acostumbrados a las giras de despedida que al final resulta que no lo son, es justo consignar que Raimon ha cumplido su palabra y que no ha vuelto a pisar un escenario desde que, en mayo de 2017, ofreció sus doce recitales de retirada en el Palau de la Música. Ni una colaboración, ni una aparición sorpresa. "Si te vas, te vas. Dije basta, y así ha sido", hace notar con buen humor el trovador, que el 2 de diciembre cumplirá 85 años. Nos recibe en su ático de la plaza de Bonsuccés, en el Raval barcelonés. Su esposa, Annalisa Corti, que le acompañó como manager durante largas décadas, sigue discretamente la conversación.
Acostumbrados a las giras de despedida que al final resulta que no lo son, es justo consignar que Raimon ha cumplido su palabra y que no ha vuelto a pisar un escenario desde que, en mayo de 2017, ofreció sus doce recitales de retirada en el Palau de la Música. Ni una colaboración, ni una aparición sorpresa. "Si te vas, te vas. Dije basta, y así ha sido", hace notar con buen humor el trovador, que el 2 de diciembre cumplirá 85 años. Nos recibe en su ático de la plaza de Bonsuccés, en el Raval barcelonés. Su esposa, Annalisa Corti, que le acompañó como manager durante largas décadas, sigue discretamente la conversación.
Acostumbrados a las giras de despedida que al final resulta que no lo son, es justo consignar que Raimon ha cumplido su palabra y que no ha vuelto a pisar un escenario desde que, en mayo de 2017, ofreció sus doce recitales de retirada en el Palau de la Música. Ni una colaboración, ni una aparición sorpresa. "Si te vas, te vas. Dije basta, y así ha sido", hace notar con buen humor el trovador, que el 2 de diciembre cumplirá 85 años. Nos recibe en su ático de la plaza de Bonsuccés, en el Raval barcelonés. Su esposa, Annalisa Corti, que le acompañó como manager durante largas décadas, sigue discretamente la conversación.
Acostumbrados a las giras de despedida que al final resulta que no lo son, es justo consignar que Raimon ha cumplido su palabra y que no ha vuelto a pisar un escenario desde que, en mayo de 2017, ofreció sus doce recitales de retirada en el Palau de la Música. Ni una colaboración, ni una aparición sorpresa. "Si te vas, te vas. Dije basta, y así ha sido", hace notar con buen humor el trovador, que el 2 de diciembre cumplirá 85 años. Nos recibe en su ático de la plaza de Bonsuccés, en el Raval barcelonés. Su esposa, Annalisa Corti, que le acompañó como manager durante largas décadas, sigue discretamente la conversación.
Acostumbrados a las giras de despedida que al final resulta que no lo son, es justo consignar que Raimon ha cumplido su palabra y que no ha vuelto a pisar un escenario desde que, en mayo de 2017, ofreció sus doce recitales de retirada en el Palau de la Música. Ni una colaboración, ni una aparición sorpresa. "Si te vas, te vas. Dije basta, y así ha sido", hace notar con buen humor el trovador, que el 2 de diciembre cumplirá 85 años. Nos recibe en su ático de la plaza de Bonsuccés, en el Raval barcelonés. Su esposa, Annalisa Corti, que le acompañó como manager durante largas décadas, sigue discretamente la conversación.
Acostumbrados a las giras de despedida que al final resulta que no lo son, es justo consignar que Raimon ha cumplido su palabra y que no ha vuelto a pisar un escenario desde que, en mayo de 2017, ofreció sus doce recitales de retirada en el Palau de la Música. Ni una colaboración, ni una aparición sorpresa. "Si te vas, te vas. Dije basta, y así ha sido", hace notar con buen humor el trovador, que el 2 de diciembre cumplirá 85 años. Nos recibe en su ático de la plaza de Bonsuccés, en el Raval barcelonés. Su esposa, Annalisa Corti, que le acompañó como manager durante largas décadas, sigue discretamente la conversación.