
El juez deja en libertad al integrante de la pandilla Barrio 18 acusado de apuñalar a un joven en Córdoba
El magistrado acuerda la excarcelación tras diez meses de prisión preventiva y en base, además, a que las lesiones no resultaron tan graves como se temía La agresión estaría motivada por la errónea relación que el procesdo atribuía a la víctima con la Mara Salvatrucha El Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba ha decretado la libertad provisional sin fianza para el acusado de apuñalar a un joven en la capital en septiembre de 2024 que pertenece, además, a la pandilla Barrio 18. El magistrado José Luis Rodríguez Lainz considera que, tras diez meses de prisión provisional, concurren razones suficientes para modificar la medida cautelar inicial, aunque ha impuesto restricciones para proteger a la víctima. La agresión se produjo en septiembre del pasado año, cuando la víctima fue atraída a un domicilio bajo engaños y allí recibió varias puñaladas que pusieron en riesgo su vida. Tras la agresión, los presuntos autores incluso lo persiguieron, según relató la investigación policial. La operación, bautizada como Atol-Baldaquino, fue desarrollada por la Unidad Territorial de Información de la Policía Nacional en Córdoba, en coordinación con la Fiscalía. Como resultado, fueron arrestados dos hombres vinculados a la Pandilla Barrio 18, una organización de origen centroamericano considerada rival de la Mara Salvatrucha (MS-13). Los investigadores apuntan a que el móvil de la agresión fue la creencia de que la víctima formaba parte de la MS-13, lo que habría motivado el ataque. Tras su detención, uno de ellos -acusado de atraer a la víctima- quedó en libertad, pero el segundo -el presunto autor del apuñalamiento y defendido por la letrada María del Mar Jiménez Sánchez- ingresó en la cárcel en noviembre del año pasado, donde ha permanecido durante diez meses. Ahora, el juez ha decretado su libertad debido al tiempo transcurrido y a la constatación de que las lesiones sufridas por la víctima no han revestido la gravedad inicialmente prevista. Pese a la excarcelación, el juez le ha impuesto varias medidas cautelares, como la prohibición de acercarse a la víctima o a su domicilio, así como de comunicarse con ella, y a la obligación de comparecer en el juzgado cuando sea citado. El incumplimiento de estas medidas podría motivar la vuelta a prisión preventiva e incluso la imposición de nuevas restricciones más severas. La investigación judicial sigue abierta bajo la calificación de tentativa de homicidio.