Argumentos para el cuñado

Argumentos para el cuñado

Se acerca inexorable el momento de conversar con él. Lo del chiringuito de Montoro primero y lo de la brillante “Ayuso de Fuenlabrada” después le ha bajado los humos al cuñado conservador, pero éste, mucho más que las cuñadas, sigue hiperventilando, hipermotivado e hiperactivo. No se recuerda en la historia democrática de España –quizá con la excepción de la Cataluña del procés – un mayor grado de violencia verbal intrafamiliar que el que sufrimos hoy. La estrategia no es nada improvisada, tiene casi veinte años de desarrollo internacional –desde la crisis financiera del 2007 – y es bien conocida. Como la describió el neofascista estadounidense Curtis Yarvin , “el sinsentido es una herramienta de organización más efectiva que la verdad”. Aderezado con el doméstico “el que pueda hacer que haga” , el resultado es esa asfixiante sensación de caos, de corrupción, de odio hacia la burocracia, de desprecio de la democracia, de ultranacionalismo tribal. Para los más jóvenes –que se están apuntando al relato de Vox en masa–, la versión neofascista se adereza con ese toque punk tan atractivo que le dan los malotes Quiles y Ndongo , tan malotes, valientes y tenaces ellos. Vencer ese populismo contagioso que es como el ruido invisible de las cigarras es una tarea ingrata, difícil y a menudo decepcionante, porque se alimenta a partes iguales del miedo, el humor y el hedonismo. Véanse por cierto a este respecto los videos de la ya exdiputada Noelia Núñez en TikTok: irresistiblemente estúpidos, pero irresistibles al fin y al cabo. Talento para estudiar ciencias jurídicas aplicadas a la administración no le sobraba, pero sí lo tenía para poner vulgaridades una tras otra con fondo musical. Pues bien, persistamos aun en la dificultad, y cuando el cuñado trate de reducir la vida política nacional a las andanzas de Koldo, Ábalos y Cerdán , como insiste en hacer el PP, volvamos a poner en la conversación la archiconocida frase de 1992, aquella que el asesor Carville le puso en campaña a Bill Clinton : “La economía, estúpido”. Precisamente aquello de lo que Feijóo –en sí mismo otro buen tema de conversación, por cierto– no quiere ni hablar. España tiene desde la pandemia, es decir, desde que gobierna Pedro Sánchez , una economía envidiable. Con una cifra récord de ocupación: 22 millones de trabajadores y trabajadoras. Un desempleo en mínimos históricos. Un crecimiento del PIB muy superior a la media europea. Una economía de servicios sin complejos, pero con un fuerte componente de innovación en ámbitos cruciales como la energía, el medio ambiente y las infraestructuras. A España quiere venir todo el mundo , por su equilibrio admirable entre los servicios públicos esenciales como la sanidad y la educación y la iniciativa privada. Como acaba de demostrar la buena gente de Torre Pacheco , quien quiera organizar cacerías de migrantes encontrará mejores condiciones en Marsella o en Los Ángeles , no solo porque los españoles en general deploramos ese odio irracional, sino porque además tenemos una Policía modélica bien dirigida. Tu cuñado no se quedará callado, por supuesto. Repetirá el consabido: “Esos son los datos macroeconómicos. Las familias lo pasan mal”. O “tenemos la mayor tasa de desempleo de Europa”. O “no es empleo real, son fijos discontinuos”. O “hay mucha pobreza infantil”… Ni entres. Dile que le pregunte a tu sobrina si ha notado que, gracias a la subida del salario mínimo, ella cobra 1.200 euros y no 700 . O si no es microeconómico que el abono transporte (sí, el de Ayuso también), le salga gratis, o si no habría que darle las gracias a Carlos Cuerpo –otro buen objeto de conversación– y a Pedro Sánchez por haber evitado los recortes que Macron tiene que adoptar en Francia . Dile, en fin, antes de dar buena cuenta de la paella, que no se enfade tanto, caray, que basta con ver cómo están las playas y los restaurantes y las fiestas del pueblo, para ver que ni tan mal. Algún crédito habrá que darle al presidente del Gobierno. Y que te pase el alioli.

La inferioridad moral e intelectual de la izquierda

La inferioridad moral e intelectual de la izquierda

La izquierda miente hasta para dimitir. Y como no dimite nunca, haga lo que haga, tampoco deja de mentir, pase lo que pase. Y es normal. Para dimitir, hace falta valor. O al menos, tener un mínimo conocimiento del sentido de la libertad. Y la responsabilidad. Como desconocen lo que significan ambos conceptos, por ignorancia … Continuar leyendo "La inferioridad moral e intelectual de la izquierda"

Las opciones del Málaga CF para el centro de la defensa

Las opciones del Málaga CF para el centro de la defensa

La salida de Nelson Monte ha sido el gran cambio de guion en el mercado de fichajes del Málaga CF. Hasta el momento, se habían dado movimientos que entraban dentro de la lógica y los planes del club. Se habían producido salidas esperadas o deseadas y habían llegado fichajes para cubrir posiciones donde había necesidades. Pero el traspaso del central portugués al Almería obliga a la dirección deportiva blanquiazul a recalcular su ruta en la ventana estival.