La Fiscalía solicita más de 25 años de cárcel al matrimonio que retuvo desde 2021 a sus tres hijos menores en Oviedo

La Fiscalía solicita más de 25 años de cárcel al matrimonio que retuvo desde 2021 a sus tres hijos menores en Oviedo

Los niños estuvieron aislados del mundo exterior hasta el extremo de que no conocían a ningún familiar y su única referencia eran los padres. Caminan encorvados, nunca fueron a la escuela y la última vez que acudieron a una consulta médica fue en 2019 Los tres menores retenidos por sus padres desde 2021 en Oviedo reciben ya las primeras visitas de sus abuelos de EEUU La Fiscalía de Asturias considera que el matrimonio que desde 2021 mantuvo retenidos a sus tres hijos menores de edad en un chalé, ubicado en la zona rural a 1,9 kilómetros de la capital asturiana, ejerció violencia psíquica habitual sobre los niños que permanecieron aislados del mundo exterior por miedo a un “hipotético contagio” a cualquier enfermedad, entre ellas el covid. Un confinamiento forzoso que llegó al extremo de que los niños no conocían a ninguna otra persona, ni miembro de la familia que no fueran sus padres. Es la convicción a la que ha llegado la Fiscalía del Principado que va a solicitar sendas condenas de 25 años y cuatro meses de cárcel a cada miembro de la pareja por su presunta autoría en un delito de violencia psíquica habitual y tres delitos de detención ilegal. Esta es la principal tesis que baraja el Ministerio Fiscal en el escrito de calificación que ha hecho público este jueves y donde recoge las conclusiones provisionales de la causa de las que ha dado ya traslado al Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo. Cartel que impide el paso a la vivienda familiar donde durante cuatro años permanecieron encerrados los menores. Un viaje desde Alemania a Oviedo En su relato de hechos, la acusación pública expone que el matrimonio se trasladó a residir a una vivienda familiar a las afueras de Oviedo, en diciembre de 2021, junto a sus tres hijos, dos gemelos, que ahora tienen nueve años, y otro niño que actualmente tiene once. La familia procedía de Alemania, de donde es natural el padre, que era la única persona que figuraba empadronado en el chalé, ya que no constaban ni su mujer -estadounidense con nacionalidad alemana- ni los menores de edad en ningún registro público, incluidos escolar o la Seguridad Social. Incumplimientos Hasta el pasado 28 de abril, cuando se produjo la intervención policial que liberó a los menores, el matrimonio, “de común acuerdo”, según confirma la Fiscalía, incumplió “los deberes de protección” que tenían sobre sus hijos, a los que privaron de sus necesidades “educativas, sanitarias, emocionales y sociales”. Los acusados, según consta en el escrito de calificación, “encerraron a los menores en el interior de la vivienda y los aislaron de forma absoluta del mundo, negándoles el contacto con otras personas, tanto físicamente como por cualquier medio de comunicación”. No salieron para nada al exterior, ni siquiera al jardín con el que contaba la vivienda, durante casi cuatro años, por el infundado temor que tenían los acusados, y que habían inculcado a sus hijos, a que se contagiasen de algo El aislamiento del mundo exterior era absoluto, ni se relacionaban con terceras personas, ni conocían a otros miembros de la familia. El mundo de los menores se circunscribía únicamente al contacto entre los hermanos y sus progenitores y siempre dentro de casa. “No salieron para nada al exterior, ni siquiera al jardín con el que contaba la vivienda, durante casi cuatro años por el infundado temor que tenían los acusados, y que habían inculcado a sus hijos, a que se contagiasen de algo”, recalca la Fiscalía. Los padres nunca escolarizaron a los menores en España y los gemelos no sabían, con ocho años, ni leer ni escribir Sin escolarizar Los acusados nunca escolarizaron a los menores en España, de forma que los niños aprendían por sí mismos o con la asistencia puntual de sus padres. Un ejemplo claro de esa situación es que los gemelos, con 8 años cuando fueron encontrados por los agentes, no sabían leer ni escribir. Utilización prolongada de pañales Asimismo, los pequeños no tuvieron un seguimiento sanitario de su salud: la última vez que acudieron al médico fue en 2019 y eran los acusados los que se encargaban de diagnosticar y tratar sus problemas cuando surgían. En el domicilio contaban con abundantes medicamentos, comprados sin la preceptiva prescripción médica. Por otro lado, los niños presentaban igualmente problemas de control de esfínteres, ocasionados por la utilización indebida y prolongada de pañales, según advierte la Fiscalía. Barrotes rotos para “entrar y salir” La descripción en la que los agentes encontraron el interior del domicilio familiar y que refleja la Fiscalía en su escrito de calificación provisional también demuestra hasta qué punto llegaba el abandono en que el matrimonio tenía no solo a sus hijos sino también a la hora de procurarles un entorno con las mínimas condiciones higiénico-sanitarias. “La vivienda se encontraba en malas condiciones de habitabilidad, con un déficit importante de limpieza, con cantidades ingentes de basura y suciedad acumulada en diversas estancias”, indica. “Además, el mobiliario era inadecuado para cubrir las necesidades de los menores: los gemelos dormían en cunas, a las que habían roto los barrotes para entrar y salir libremente. Su hermano lo hacía en una cama de reducidas dimensiones para su edad”, explica la Fiscalía. Un retraso en relaciones sociales Otro detalle más de que el matrimonio no se ocupaba de los menores en lo más mínimo es que éstos caminaban “encorvados, con las piernas arqueadas”, presentaban dificultades para subir y bajar escaleras y tenían la piel “irritada y onicomicosis” (una infección crónica y progresiva de las uñas causada por hongos) e incluso uno de ellos tenía un ligero encorvamiento. Como no salieron a la calle en estos cuatro años, los menores mostraron una gran sorpresa y perplejidad nada más pisar el jardín, como afirma la Fiscalía en su escrito: “Al salir al exterior, una vez que se descubrió la situación en la que se encontraban, los menores se mostraron sorprendidos por cuanto les rodeaba”. Como consecuencia de estos hechos, los menores sufren distocia social, que supondrá un retraso en la incorporación a las relaciones sociales propias de su edad. El matrimonio, en prisión El matrimonio fue detenido el 28 de abril y, tras pasar a disposición judicial, el juzgado decretó su ingreso en prision provisional, comunicada y sin fianza . Actualmente ambos cónyuges permanecen internados en la Unidad Terapéutica y Educativa (UTE) de la cárcel de Asturias. El vehículo de la Guardia Civil traslada a uno de los miembros del matrimonio a la sede judicial para prestar declaración. Suspendida la patria potestad Por autos de 30 de abril de 2025 del Juzgado de Instrucción número 3 de Oviedo se acordó la prisión provisional, comunicada y sin fianza de los acusados, así como la suspensión cautelar de la patria potestad, guarda y custodia sobre sus hijos, con atribución de las mismas a la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar del Principado de Asturias. La consejería, de la que es titular Marta del Arco, aprobó el pasado 6 de mayo una resolución por la que se declaró el desamparo de los menores y la asunción de la tutela por la entidad pública. El delito de violencia psíquica habitual La Fiscalía considera que los hechos constituyen un delito de violencia psíquica habitual en el ámbito familiar y tres delitos de detención ilegal con la circunstancia agravante de parentesco. A las penas de 25 años y cuatro meses de prisión para cada uno de los acusados, el Ministerio Fiscal añade otras penas accesorias. Así, por el delito de violencia psíquica habitual reclama que se les prive el derecho a la tenencia y porte de armas durante cuatro años y seis meses y su inhabilitación especial para el ejercicio de la patria potestad, tutela, curatela, guarda y acogimiento durante tres años y cuatro meses. Además, solicita la prohibición de aproximación a los menores a menos de 300 metros, a su domicilio, lugar de trabajo o estudio y cualquier otro frecuentado por los mismos durante tres años y cuatro meses y la prohibición de comunicación por cualquier medio, quedando en suspenso el régimen de visitas, comunicación y estancia que en su caso se hubiera reconocido en sentencia civil, hasta el total cumplimiento de la pena. Los delitos de detención ilegal Por cada uno de los tres delitos de detención ilegal en concurso con un delito de abandono de familia, pide como penas accesorias a las de prisión la prohibición de aproximación a los menores a menos de 300 metros, a su domicilio, lugar de trabajo o estudio y cualquier otro que sea frecuentado por los mismos durante ocho años y seis meses. También interesa que el matrimonio tenga prohibida toda comunicación con sus hijos por cualquier medio, quedando en suspenso el régimen de visitas, comunicación y estancia que en su caso se hubiere reconocido en sentencia civil, hasta el total cumplimiento de la pena. El Ministerio Fiscal solicita que los acusados, de forma conjunta y solidaria, indemnicen a los menores con 15.000 euros a cada uno de ellos por los daños morales sufridos, más los intereses legales correspondientes.

Registran varios centros de menores en Gran Canaria y detienen a dos personas

Registran varios centros de menores en Gran Canaria y detienen a dos personas

La Policía Autonómica Canaria ha llevado a cabo este jueves una operación en dos centros de menores gestionados por la entidad Quorum 77, a instancias del Juzgado contra la Infancia y la Adolescencia, dirigido por el juez Tomás Martín. Según fuentes del Gobierno regional, se han realizado seis entradas y registros, incluyendo dos centros de menores, uno de los cuales ha sido cerrado. El centro de menores José García I, situado en la playa de El Cabrón, en el municipio de Agüimes, ha sido cerrado tras el registro. La Consejería regional de Infancia deberá buscar un lugar para trasladar a los 148 jóvenes que residían en el centro. Además, se han practicado dos detenciones en Gran Canaria, una en Arinaga y otra en Firgas. Estos registros y detenciones se producen presuntamente tras el cierre y precinto judicial del centro para menores con medidas de reforma 'EMENA la Fortaleza I', ubicado en la localidad de Monte Lentiscal, en mayo de 2025. El cierre se produjo ante evidencias de presuntos delitos de lesiones y odio, omisión del deber de impedir delitos o promover su persecución, contra la integridad moral y amenazas en el ámbito de la actividad del centro. La operación policial y las detenciones sugieren que la investigación sigue en curso, y se espera que se esclarezcan los hechos y se tomen medidas adicionales para garantizar la seguridad y el bienestar de los menores en los centros gestionados por Quorum 77. No es la primera vez que tiene lugar el registro de uno de los centros gestionados por Quorum social 77. Ocurría en mayo de este año, después de una denuncia por presuntos delitos de lesiones, amenazas y contra la integridad moral en el centro de la Fortaleza I, que también está ubicado en Gran Canaria. En aquel momento se decretó el cierre y precinto del centro.

Visita un bar de Huelva y no da crédito al ver el método que usan para mantener la cerveza helada durante todo el día: "Viven en el 2075..."

Visita un bar de Huelva y no da crédito al ver el método que usan para mantener la cerveza helada durante todo el día: "Viven en el 2075..."

Con la llegada del calor, hay una imagen que se repite en cada terraza, playa o reunión familiar: la cerveza fría en la mano. En verano, esta bebida no solo refresca, sino que se convierte en todo un símbolo de ocio, disfrute y cultura mediterránea. Pero hay algo que cualquier amante de la cerveza teme: que se caliente antes de terminarla. En Huelva, un bar ha dado con la solución perfecta. Y lo ha hecho de una forma tan sencilla como revolucionaria. El protagonista de esta historia es Juan Antonio Aguayo, un conocido creador de contenido gastronómico en redes sociales, especialmente activo en Instagram y TikTok bajo el perfil @guiasevillana. Con casi 150.000 seguidores, sus recomendaciones sobre bares y platos andaluces se han vuelto referencia para muchos. Pero nada lo había sorprendido tanto como lo que vivió recientemente en una freiduría de Huelva capital. Durante su visita a la Freiduría El Mercado, ubicada en el moderno Mercado del Carmen, Juan Antonio no daba crédito al ver cómo le servían la cerveza: sumergida en un recipiente metálico repleto de hielo picado, como si se tratase de una bebida de lujo en una cubitera personalizada. Con la popular canción “Aleluya” sonando de fondo, el sevillano compartió la escena con sus seguidores, alucinando con lo que describió como "una idea del futuro". Su reacción fue tan espontánea como viral: “No sabía que en Huelva vivían en el 2075”, exclamaba entre risas. Lo que parecía un simple detalle estético es en realidad una solución brillante para mantener la cerveza helada hasta el último sorbo. El “barreñito”, como lo bautizó el influencer, es un recipiente de metal lleno de hielo picado, en el que se introduce la jarra o botella. El resultado es inmediato: la bebida no solo se mantiene fría, sino que llega a conservar una temperatura casi de congelación durante largos minutos, algo impensable en una terraza andaluza a 35 grados. Este gesto, tan sencillo como eficaz, ha despertado admiración entre los seguidores de Aguayo, que no han tardado en llenar sus redes con comentarios del tipo: “Esto sí es innovación andaluza”, “Me voy ahora mismo a Huelva” o “En mi bar de confianza ya están tardando en copiarlo”. Aunque el vídeo se viraliza como algo anecdótico, muchos hosteleros ya están tomando nota. En un momento en el que la experiencia del cliente marca la diferencia, este tipo de detalles pueden ser clave para atraer y fidelizar a quienes buscan disfrutar de una buena cerveza sin que el calor arruine el momento. Además, en un país tan cervecero como España, donde la cultura del “cañeo” forma parte del día a día, propuestas como esta pueden marcar tendencia. No se trata de una gran inversión ni de una tecnología compleja, sino de volver a lo básico con inteligencia y originalidad. El local donde ocurre todo esto es una freiduría moderna ubicada en el renovado Mercado del Carmen, un espacio gastronómico que combina tradición marinera y cocina andaluza con una imagen fresca y actual. Allí no solo se puede disfrutar de pescado frito recién hecho, sino también de iniciativas como esta que demuestran que la innovación no está reñida con lo popular. Lo que comenzó como una visita más a un bar se ha convertido en un fenómeno viral que pone a Huelva en el mapa gastronómico por una razón inesperada: su ingenioso sistema para mantener la cerveza fría en pleno verano. En tiempos donde se valora cada vez más la originalidad y el cuidado al detalle, este pequeño gesto demuestra que a veces, las mejores ideas no vienen de Silicon Valley, sino de una freiduría con barra de metal y hielo picado en el sur de España. Y, como dice Juan Antonio, “en Huelva ya están viviendo en 2075”.

Operaban en Elche y otras ciudades de Europa: desarticulan una trama criminal dedicada a la "mercancía fantasma"

Operaban en Elche y otras ciudades de Europa: desarticulan una trama criminal dedicada a la "mercancía fantasma"

Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con Vigilancia Aduanera y ONIF de la Agencia Tributaria, liderada por la Fiscalía Europea, en la que han participado cuerpos policiales de Grecia, Francia y Bulgaria, han desarticulado una organización criminal dedicada al fraude fiscal en la importación de mercancías desde China que presuntamente habrían defraudado en España más de 56 millones de euros y un total de más de 700.000.000 de euros en Europa. En España han sido detenidas seis personas y se han llevado a cabo diez registros en los que se han intervenido 475.000 euros en efectivo y 490.000 en criptovalores. Usurpaban la identidad de empresas españolas para fingir que eran estas mercantiles, y no la organización, las responsables tributarias de las cuotas exigibles por las importaciones. Lee aquí la noticia.